MOZOS DE ESCUADRA
La exaltación del catalanismo ▬cualquier circunstancia se
aprovecha para glorificar ese sentimiento patriótico regionalista corto de
alcances que va a dar finiquito a seis siglos de unidad española: la muerte de
un futbolista holandés, incluso el accidente de unos becarios Erasmus en
Tarragona. Mismamente, el control de nuestras multas de tráfico está en manos
de una leridana una tal Seguí dineros para las arcas de la independencia▬
arremete contra las esencias de la verdad histórica. Nada tan español como la
palabra mozo de escuadra. Era una unidad de la infantería con que operaban los
Tercios Viejos. Tropas de asalto. Los mozos de escuadra eran los que pusieron
una pica en Flandes, infantería pura y dura, curtidos en el cuerpo a cuerpo y
manejando la pica que era la reina de las armas por aquel entonces. Las picadas
atacaban en cerrada formación. Bien se comprende que a pesar del valor de estas
tropas las bajas en combate eran crecidísimas. Los que entraron en Amberes y
sembraron el terror entre los defensores de Guillermo de Orange eran recios
militares catalanes herederos de la tradición almogávar. Los mejores soldados
al servicio de la corona castellana.
Cien hombres bajo el mando de un cabo integraban la
escuadra. Formaban la cuarta parte de una compañía la mitad de un pelotón. Un
pelotón de soldados salvará a la civilización decía Napoleón y de ahí esa
exaltación militarista (la Colau pone en ridículo a los oficiales del ejército
español, mientras es una consigna en nuestros medios, que se hable de los
“mossos” con veneración y a toda hora, y mal de la Guardia Civil y la Policía
Nacional. Doña Colau nos cuela otro gazapo. Ella como todas las que sucumbieron
al furor erótico tribadismo no sólo va contra la historia sino contra natura.
Es el fruto de nuestros medios bajo las garras de la
masonería intrépida. Por lo visto están siendo entrenados por el Mossad hebreo
sin que el ministro de Defensa un tal Morenès, quien por cierto es catalán,
haya dicho esta boca es mía al respecto.
Francisco de Valdés en su “Espejo de Disciplina militar”
dice que la principal tarea de los soldados escuadrados es la de vigilar las
avanzadillas y servir de centinelas del regimiento.
Su dotación: armas ligeras el arcabuz que luego sería
sustituido por la escopeta y la espingarda. Pero su principal arma de defensa y
ataque era la pica.
La operatividad de estas tropas depende de su movilidad por
lo cual el equipo de su impedimenta será liviano. Que calcen sandalias (soleae o crepide como la infantería romana pero para las grandes marchas
utilicen cáligas tachonadas.)
Está claro que las esparteras de los mozos abiertas y tan
poco castrenses pues no sirven para marcar el paso ni pegar taconazos se
justifican en una razón histórica: los mozos de escuadra eran los primeros en
entrar en combate, de ahí su aspecto tan poco marcial.
La legión hace bajas al enemigo en zapatillas y los “mossos”
caminan en “espanyeras” llevando a mando espingardas con su correspondiente
mecha. Tenían por oficio asaltar
parapetos de las enemigas trincheras. Participaron en el saco de Roma de 1527. El
papa hubo de refugiarse en Santangelo. Los catalanes no habían recibido sus
soldadas y estaban furiosos. La pecorea, los desmanes, los raptos y robos son
fáciles de suponer. Un ejército no está para repartir rosas ni largar besos
sino para hacer carne.
El resto del uniforme sombreros de copa traje de gala, y la
indefectible barretina, herencia de la caramañola era el atavío con que los
guerrilleros catalanes atacaban a los franceses en la guerra de la
Independencia. Todavía cuando pasamos por Vic los ecos del tambor del Bruch
suenan en nuestras orejas. Los independentistas
de todo sacan tajada y a la verdad histórica ▬la españolidad de estas cuatro
provincias▬ le dan la vuelta. Y ahí te quiero
ver, escopeta.
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