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lunes, 13 de agosto de 2018





 LA VIRGEN DEL CARMEN PATRONA DE LA GENTE DE MAR
 Vísperas del Carmen, la fiesta marinera. El carmín de la Pola es como unos huevos pintos de pascua en pleno verano. Ella velar. Musito una cantiga y hay un libro de un francés “Le Peur en Occident” que tomo y releo; su texto refleja cómo el medioevo ante las inseguridades de la vida se acoge a la protección de Maria. En los españoles este amor a la del Carmen tan española es algo visceral
El manto tiene doce estrellas y mis felicitaciones a las Carmenes hermosa forma de llamar a una mujer tan española aunque las carmenes que yo conozco sean la hostia empezando por la Carmen de Merimée la de la navaja en la liga.
Y a Carmen Chacón que acaba de parir pues al chaval que trajo al mundo, usted señora ministra, pronto lo veamos jurando bandera nunca mejor dicha. Es el Carmen. Es julio.
 En Luarca sacarán a la Virgen a dar un paseo en barca, bien atalajada y ornada de hortensias, camelias y lirios, por la costa rumbo a la Estrella polar la motora que la lleva carroza por la mar y repicarán gordo abajo en la hondonada de la Fuencisla las campaninas del Carmen de Segovia que tanto le gustaba a la Santa y era chico aquel convento como una palomar. Donde hizo penitencia y escribió la “Noche oscura del alma” el bueno de Juan de la Cruz.
 ¿Adonde te escondiste, amado y me dejaste con gemido. Salí tras ti penando y eras ido?
 La vida es un perpetuo discurrir. Cabalgata de ilusiones que pasan de largo. Vivir es andar en perpetua congoja e inseguridad pero no perdamos de vista a la estrella. La mirada fija en el norte.
 Maria la estrella del mar de ese mar en el que trajinamos y todos somos náufragos.  Ben com´aos van per mar a estrela guia, outrossi aos seus guiar vai Santa María Fiesta de plenitud del verano. De virgen a virgen del Carmen a la Asunción toda España es un ascua de fiestorros verbeneo y mujerío. Ella velar. Velad, aljama de los judíos.
 Jean Delameu que así se llamaba el francés que escribió ese libro sobre el miedo glosa uno de los sermones de san bernardo que aconsejaba a sus monjes blancos que cuando apretase la dificultada mirasen la estrella e invocasen el santo nombre de la madre de dios. Respice Stellam. Voca Mariam. En ello estamos y en este pensamiento se centra toda la espiritualidad sencilla y mágica de la cuaderna vía de Berceo y de las Cantigas de Santa Maria. Somos tan poca cosa que tenemos necesidad de que alguien allá arriba nos largue una estacha, nos eche una mano. Ella velar.
 Alfonso el Sabio refleja en estas composiciones escritas en el mejor gallego que se escribió hasta Rosalía y que nada tiene que ver con el de los chambones separatistas de O Bloque el miedo del hombre de su tiempo el del siglo XIII y que es trasladable al del español del XXI: crisis económicas, turbulencias sociales, los temores a la muerte y a la peste, la inguinalis plaga (un lobanillo que les salía en la ingle o bubón, luego el vómito e iban listos) miedo al moro y al judío, al que es diferente y de pronto se presenta a nuestra puerta.
 Aquellos godos de hace más de siete siglos, aunque tolerantes porque el Rey Sabio va a ser precisamente el Mecenas de las Tres culturas lo tenían bastante claro: su religión era la verdadera. Y como así lo creían trataron de imponerla en el vasto territorio patrio. La fe era bisagra de unidad entre gallegos castellanos, navarros aragoneses catalanes y vascos. Todos muy cristianos pero cada uno en su casa y Dios en la de todos. Nunca fuimos muy solidarios la verdad, mas bien individualistas y sucedía que se entendían aquellos cristianotes mejor con el mahometano que con el monarca o el conde castellano
 Los documentos oficiales se escribían en latin o en gallego y en la casa se hablaba cualquiera de las lenguas romances (gallego, catalán, fabla aragonesa, bable o castellano impregnado de vasquismos y de arabismos). La línea de separación teológica estaban bien delimitda. Hoy vivimos en un mundo más ecléctico y en totum revolutum de churras con las merinas.
 Eso es bueno y a su vez es malo. Sin embargo dentro de este mundo laico donde la creencia pertenece al peculio de lo interior la autoridad de la iglesia anda un poco de capa caída. Sin embargo es más fuerte que nunca poner en práctica el consejo de san Bernardo ante la confusión de los tiempos que vivimos de mirar a la estrella e invocar a María  pues ella es el baluarte y el asidero de nuestra fe. Virgen del Carmen abogada de una buena muerte
 ¡Qué bonito cuando todos se olvida de la muerte y rinde culto al cuerpo como si éste fuera inmortal, lo peor de la cultura laica es el paganismo que ha vuelto y en buena parte de la mano de esos herejes del Opus Dei, enemigo interior mucho más temible y formidable que aquellos moros y judíos porque dándoselas de piadosos llevan consigo aparejada la soberbia satánica de Luzbel y la semilla de la destrucción!
 Y otro báculo certero de unidad era la devoción marial que supone en todo occidente un salto adelante pleno de dinamismo para vencer los miedos. La oración era toda ella vocal y estaba siempre secundada con la limosna, el ayuno y el peregrinaje.
 Esto en el plano ideal pero en el real los hombres somos pecadores y Alfonso X para someter a férula a la fiera humana que es rencorosa, mal hablada y dada a la contumelia y a la calumnia y a veces asesina, otorga las cartas pueblas y publica el fuero Juzgo donde se condenan con castigos durísimos el estupro, el robo o la blasfemia.
La ternura de esta devoción filial a Nuestra Señora contrasta con el furor sin contemplaciones de aquellos mesnaderos que degollaban por una mala mirada o una palabra vedada o injuriosa que pronunciase su interlocutor. Si un moro violaba a una cristiana era condenado a la hoguera, si un pechero no paga sus rentas iba al destierro, y si un clérigo afrentaba a una moza lo emasculaban sin más como ocurrió en la historia de Abelardo y Eloisa.
 De Juana Chaos lo tendría crudo en aquella época. Con 25 homicidios a la espalda le hubiera durado a cualquier aportillado o regidor del tiempo de las dulces cantigas lo que un pito a la puerta de un colegio. Enseguida le hubiera mandado a los corchetes, luego al matarife. Aquellos tíos no se andaban con contemplaciones. Ella velar.
 El siglo XIII es el candoroso siglo de la Virgen pero es también el del diablo. Los demonios desatados en jaurías recorren villorrios y ciudades. Os demos e y los fillos do demo a los que alude el Rey Sabio. Para meterlos en vereda, mira hacia a la Estrella, invoca a María.
 El estribillo lo dice: moito gran poder à a Madre de Deus de defender e ampará os seus. El culto de hiperdulía es excesivo. Too much, pero predican el exceso de la euforia y la seguridad misma para conjurar los peligros que cercan al creyente que aspira a lo alto y se siente hundido en el barro y en las miserias de la vida.
 Ella es escudo contra el demonio que defiende al ome boo. Estamos ante esa catarsis medieval que explica la desmedida del arte románico, por ejemplo. De este modo la Virgen libra al ladrón de la horca por el mero hecho de rezarla cada  noche un avemaría o al clérigo lerdo que no sabe leer pero se ha aprendido la misa virgen de memoria el Salve Sancta Parens de las iras del obispo.
 O a la abadesa que se fuga con un juglar y la sustituye en el convento durante su ausencia. La pobre pecadora era devota suya y según refiere otra bellísima oración de san bernardo, el “Acordaos”: “jamás se ha oído decir que hayan sido desatendidas las suplicas de los que acuden a vos”.
El hombre es pecador. Sin embargo la Madre del Verbo nunca conoció la culpa y este concepto explica este elán humanamente inexplicable porque el culto de hiperdulía y el amor a la virgen del Carmen trascienden los sentidos.
 Va más allá de nuestros pobres pensamientos fruto de la carne y se repite a lo largo y a lo ancho de las 430 cantigas que compuso en su loor el piadoso monarca castellano. Estos mundos nos revierten al mundo de la poesía, del milagro. En todas estas composiciones late algo mágico en que se secuestra la cruda realidad del mundo medieval. Otra idea a subrayar es el carácter marinero.
 La palabra vela, anquina, náufragos, barca vientos y olas se repiten y socorre a los cuitados en peligro de irse a pique o fondo do mar. En virtud de la magia de semejante carisma. Sólo por eso porque Dios la hizo medianera de todas las gracias.
 Ella es capaz tanto de devolver la vida a un muerto  de cuatro días como de ayudar a levantarse a un “freyre” viejo que está de rodillas y para erguirse pues está algo torpe lo toma de la mano después de la elevación. Y más: por su intercesión se convierten a la “fe de Jehsu-Christo el verdadero mesias mulsimes e judeus”. A los cristianos tibios cuya fe se enfría les devuelve el fervor. Ese poder salvífico de la Gran Mediatriz se transforma entre nexo de conexión que allana las diferencias de credo desempeñando el papel de corredentora.
 Los creyentes de las tres religiones sufrían los mismos traumas, padecían las mismas angustias, los mismos medios. Maria entonces es patrona de las tres religiones monoteístas de la misma forma que Toledo bajo el imperio de don Alfonso fue sede las tres culturas y es en el siglo XIII y traída por los templarios cuando arraiga este culto mariologico a la Virgen del Carmen a la que honraban los monjes de la Península del Sinal. Siento el aleteo del misterio como un zarpazo cuando me refiero a estos temas en fiesta tan significativa como es la del 16 de julio. Y yo a mí mismo me pregunto por qué se me ocurren estas cosas o por qué puedo yo escribir esto y sólo se me ocurre una respuesta: el amor. El amor como antidotado contra la intolerancia y el odio,
 La idea puede ser utópica pero puede venirle como un guante a este mundo de legos. De agnósticos y aconfesionales a las mil maravillas:
Porque quen a la virgen ven servir nunca podrá fallir.
martes, 15 de julio de 2008                                    









 LA VIRGEN DEL CARMEN PATRONA DE LA GENTE DE MAR
 Vísperas del Carmen, la fiesta marinera. El carmín de la Pola es como unos huevos pintos de pascua en pleno verano. Ella velar. Musito una cantiga y hay un libro de un francés “Le Peur en Occident” que tomo y releo; su texto refleja cómo el medioevo ante las inseguridades de la vida se acoge a la protección de Maria. En los españoles este amor a la del Carmen tan española es algo visceral
El manto tiene doce estrellas y mis felicitaciones a las Carmenes hermosa forma de llamar a una mujer tan española aunque las carmenes que yo conozco sean la hostia empezando por la Carmen de Merimée la de la navaja en la liga.
Y a Carmen Chacón que acaba de parir pues al chaval que trajo al mundo, usted señora ministra, pronto lo veamos jurando bandera nunca mejor dicha. Es el Carmen. Es julio.
 En Luarca sacarán a la Virgen a dar un paseo en barca, bien atalajada y ornada de hortensias, camelias y lirios, por la costa rumbo a la Estrella polar la motora que la lleva carroza por la mar y repicarán gordo abajo en la hondonada de la Fuencisla las campaninas del Carmen de Segovia que tanto le gustaba a la Santa y era chico aquel convento como una palomar. Donde hizo penitencia y escribió la “Noche oscura del alma” el bueno de Juan de la Cruz.
 ¿Adonde te escondiste, amado y me dejaste con gemido. Salí tras ti penando y eras ido?
 La vida es un perpetuo discurrir. Cabalgata de ilusiones que pasan de largo. Vivir es andar en perpetua congoja e inseguridad pero no perdamos de vista a la estrella. La mirada fija en el norte.
 Maria la estrella del mar de ese mar en el que trajinamos y todos somos náufragos.  Ben com´aos van per mar a estrela guia, outrossi aos seus guiar vai Santa María Fiesta de plenitud del verano. De virgen a virgen del Carmen a la Asunción toda España es un ascua de fiestorros verbeneo y mujerío. Ella velar. Velad, aljama de los judíos.
 Jean Delameu que así se llamaba el francés que escribió ese libro sobre el miedo glosa uno de los sermones de san bernardo que aconsejaba a sus monjes blancos que cuando apretase la dificultada mirasen la estrella e invocasen el santo nombre de la madre de dios. Respice Stellam. Voca Mariam. En ello estamos y en este pensamiento se centra toda la espiritualidad sencilla y mágica de la cuaderna vía de Berceo y de las Cantigas de Santa Maria. Somos tan poca cosa que tenemos necesidad de que alguien allá arriba nos largue una estacha, nos eche una mano. Ella velar.
 Alfonso el Sabio refleja en estas composiciones escritas en el mejor gallego que se escribió hasta Rosalía y que nada tiene que ver con el de los chambones separatistas de O Bloque el miedo del hombre de su tiempo el del siglo XIII y que es trasladable al del español del XXI: crisis económicas, turbulencias sociales, los temores a la muerte y a la peste, la inguinalis plaga (un lobanillo que les salía en la ingle o bubón, luego el vómito e iban listos) miedo al moro y al judío, al que es diferente y de pronto se presenta a nuestra puerta.
 Aquellos godos de hace más de siete siglos, aunque tolerantes porque el Rey Sabio va a ser precisamente el Mecenas de las Tres culturas lo tenían bastante claro: su religión era la verdadera. Y como así lo creían trataron de imponerla en el vasto territorio patrio. La fe era bisagra de unidad entre gallegos castellanos, navarros aragoneses catalanes y vascos. Todos muy cristianos pero cada uno en su casa y Dios en la de todos. Nunca fuimos muy solidarios la verdad, mas bien individualistas y sucedía que se entendían aquellos cristianotes mejor con el mahometano que con el monarca o el conde castellano
 Los documentos oficiales se escribían en latin o en gallego y en la casa se hablaba cualquiera de las lenguas romances (gallego, catalán, fabla aragonesa, bable o castellano impregnado de vasquismos y de arabismos). La línea de separación teológica estaban bien delimitda. Hoy vivimos en un mundo más ecléctico y en totum revolutum de churras con las merinas.
 Eso es bueno y a su vez es malo. Sin embargo dentro de este mundo laico donde la creencia pertenece al peculio de lo interior la autoridad de la iglesia anda un poco de capa caída. Sin embargo es más fuerte que nunca poner en práctica el consejo de san Bernardo ante la confusión de los tiempos que vivimos de mirar a la estrella e invocar a María  pues ella es el baluarte y el asidero de nuestra fe. Virgen del Carmen abogada de una buena muerte
 ¡Qué bonito cuando todos se olvida de la muerte y rinde culto al cuerpo como si éste fuera inmortal, lo peor de la cultura laica es el paganismo que ha vuelto y en buena parte de la mano de esos herejes del Opus Dei, enemigo interior mucho más temible y formidable que aquellos moros y judíos porque dándoselas de piadosos llevan consigo aparejada la soberbia satánica de Luzbel y la semilla de la destrucción!
 Y otro báculo certero de unidad era la devoción marial que supone en todo occidente un salto adelante pleno de dinamismo para vencer los miedos. La oración era toda ella vocal y estaba siempre secundada con la limosna, el ayuno y el peregrinaje.
 Esto en el plano ideal pero en el real los hombres somos pecadores y Alfonso X para someter a férula a la fiera humana que es rencorosa, mal hablada y dada a la contumelia y a la calumnia y a veces asesina, otorga las cartas pueblas y publica el fuero Juzgo donde se condenan con castigos durísimos el estupro, el robo o la blasfemia.
La ternura de esta devoción filial a Nuestra Señora contrasta con el furor sin contemplaciones de aquellos mesnaderos que degollaban por una mala mirada o una palabra vedada o injuriosa que pronunciase su interlocutor. Si un moro violaba a una cristiana era condenado a la hoguera, si un pechero no paga sus rentas iba al destierro, y si un clérigo afrentaba a una moza lo emasculaban sin más como ocurrió en la historia de Abelardo y Eloisa.
 De Juana Chaos lo tendría crudo en aquella época. Con 25 homicidios a la espalda le hubiera durado a cualquier aportillado o regidor del tiempo de las dulces cantigas lo que un pito a la puerta de un colegio. Enseguida le hubiera mandado a los corchetes, luego al matarife. Aquellos tíos no se andaban con contemplaciones. Ella velar.
 El siglo XIII es el candoroso siglo de la Virgen pero es también el del diablo. Los demonios desatados en jaurías recorren villorrios y ciudades. Os demos e y los fillos do demo a los que alude el Rey Sabio. Para meterlos en vereda, mira hacia a la Estrella, invoca a María.
 El estribillo lo dice: moito gran poder à a Madre de Deus de defender e ampará os seus. El culto de hiperdulía es excesivo. Too much, pero predican el exceso de la euforia y la seguridad misma para conjurar los peligros que cercan al creyente que aspira a lo alto y se siente hundido en el barro y en las miserias de la vida.
 Ella es escudo contra el demonio que defiende al ome boo. Estamos ante esa catarsis medieval que explica la desmedida del arte románico, por ejemplo. De este modo la Virgen libra al ladrón de la horca por el mero hecho de rezarla cada  noche un avemaría o al clérigo lerdo que no sabe leer pero se ha aprendido la misa virgen de memoria el Salve Sancta Parens de las iras del obispo.
 O a la abadesa que se fuga con un juglar y la sustituye en el convento durante su ausencia. La pobre pecadora era devota suya y según refiere otra bellísima oración de san bernardo, el “Acordaos”: “jamás se ha oído decir que hayan sido desatendidas las suplicas de los que acuden a vos”.
El hombre es pecador. Sin embargo la Madre del Verbo nunca conoció la culpa y este concepto explica este elán humanamente inexplicable porque el culto de hiperdulía y el amor a la virgen del Carmen trascienden los sentidos.
 Va más allá de nuestros pobres pensamientos fruto de la carne y se repite a lo largo y a lo ancho de las 430 cantigas que compuso en su loor el piadoso monarca castellano. Estos mundos nos revierten al mundo de la poesía, del milagro. En todas estas composiciones late algo mágico en que se secuestra la cruda realidad del mundo medieval. Otra idea a subrayar es el carácter marinero.
 La palabra vela, anquina, náufragos, barca vientos y olas se repiten y socorre a los cuitados en peligro de irse a pique o fondo do mar. En virtud de la magia de semejante carisma. Sólo por eso porque Dios la hizo medianera de todas las gracias.
 Ella es capaz tanto de devolver la vida a un muerto  de cuatro días como de ayudar a levantarse a un “freyre” viejo que está de rodillas y para erguirse pues está algo torpe lo toma de la mano después de la elevación. Y más: por su intercesión se convierten a la “fe de Jehsu-Christo el verdadero mesias mulsimes e judeus”. A los cristianos tibios cuya fe se enfría les devuelve el fervor. Ese poder salvífico de la Gran Mediatriz se transforma entre nexo de conexión que allana las diferencias de credo desempeñando el papel de corredentora.
 Los creyentes de las tres religiones sufrían los mismos traumas, padecían las mismas angustias, los mismos medios. Maria entonces es patrona de las tres religiones monoteístas de la misma forma que Toledo bajo el imperio de don Alfonso fue sede las tres culturas y es en el siglo XIII y traída por los templarios cuando arraiga este culto mariologico a la Virgen del Carmen a la que honraban los monjes de la Península del Sinal. Siento el aleteo del misterio como un zarpazo cuando me refiero a estos temas en fiesta tan significativa como es la del 16 de julio. Y yo a mí mismo me pregunto por qué se me ocurren estas cosas o por qué puedo yo escribir esto y sólo se me ocurre una respuesta: el amor. El amor como antidotado contra la intolerancia y el odio,
 La idea puede ser utópica pero puede venirle como un guante a este mundo de legos. De agnósticos y aconfesionales a las mil maravillas:
Porque quen a la virgen ven servir nunca podrá fallir.
martes, 15 de julio de 2008                                    






domingo, 12 de agosto de 2018

NOCHE DEL 17 DE JULIO DE 1918 NO QUISIERON SALIR LAS ESTRELLAS EN EKATERINGRADO. SE NEGARON A ILUMINAR EL MARTIRIO DE LA FAMILIA IMPERIAL DEL HECHO SE ACABAN DE CUMPLIR CIEN AÑOS
















ASESINATO DEL ZAR Y SU FAMILIA

 

En la madrugada del 17 de julio de 1918 las estrellas se hicieron el remolón y se negaron aparecer sobre el firmamento de Tobolsk no querían iluminar la tétrica escena de semejante holocausto, salió una luna roja.

El comisario Abrahan Yurovsky raza maldita disparó dos tiros de revolver a la cabeza del zar Nicolás II que murió ipso facto.

El zarevich Alexis estaba sentado sobre sus rodillas y cayó en brazos de la emperatriz que trataba con la mano de protegerlo de la ráfaga. acto seguido, una soldadesca integrada por letones y húngaros entre ellos Imre Nagy que habría de presidir el soviet de aquella republica satélite Stalin lo mandó asesinar descargó su fusilería sobre la zarina Alexandra las infantas Anastasia, Maria,  Tatiana y Olga.

Con ellos sería fusilados el doctor Botkin médico de cabecera de la familia imperial. Juntamente, una de las amas de llave de la reina que quiso abrazar el martirio con su señora.

Se consumó así uno de los grandes magnicidios de la historia un hecho execrable que ha sido comprado con la crucifixión de Cristo. Nicolás II dio muestras de presencia de ánimo y de serenidad. La orden había sido dada por Lenin que mandó el traslado de los cautivos desde su palacio de Tsarkoe Selo a Yekateringrado a las mismas puertas de Asia.

La localidad siberiana se hizo famosa por sus canteras de las que se extraían piedras preciosas para adornar los palacios y la ornamentación de los iconos (amatistas, pórfidos, topacios, malaquitas, amatistas, crisolitos) era un lugar de paso muy concurrido por contrabandistas y gente del hampa. Vladimir Illich Lenin (el pálido) dio la orden de ejecución. Los soldados rojos se negaron a formar parte del pelotón. Seguían creyendo en el carácter semidivino del emperador.

La masacre tuvo lugar en los bajos de la casa de Ipatiev un hebreo el hombre más poderoso de Ekaterimburgo.

A media noche se comunicó a los prisioneros la orden de traslado. Era un engaño. Por la mañana los comisarios habían permitido la entrada en el presidio de un pope que  dijo una misa de réquiem. La emperatriz Alejandra trató de cobijar a su hijo el zarevich enfermo hemofílico en su seno. Antes de morir tanto ella como su esposo dijeron que perdonaban a los ejecutores. Se notaba en el lugar la presencia de algo extrañamente divino confesaron algunos testigos.

Acribillados a balazos los cadáveres fueron amontonas en una telega y transportados al bosque de Kostiolka donde les rociaron con gasolina y fueron quemados. Sin embargo, ochenta años después siendo presidente de Yekateringrad Boris Yetsin se encontró una fosa común de la que se extrajeron algunos huesos. Dos dias mas tarde la princesa Lisabeta de Hesen la hermana de la zarina fue despechada desde lo alto de un acantilado. En sus últimos años había profesado como religiosa y se dedicó a la caridad y atender a los heridos de la primera guerra mundial. Fue canonizada con los últimos Romanov. Algunos testigos que pasaron por el lugar contaban que oyeron gemir a la santa durante dos días.

Los Romanov fueron de humillación en humillación y de angustia en angustia durante el calvario de la abdicación y encarcelamientos y al fin lograron la palma del martirio. Yo tengo hecho yb voto de ir, si Dios me da vida, a san Petersburgo sonde está enterrados y prosternarme ante su tumba. Creo que mediante su intercesión he conseguido algunos favores que sólo yo puedo enumerar y que la modestia me impide narrarlos en publico y es que la sangre de los mártires siempre será semilla de cristianos.

sábado, 11 de agosto de 2018

RASPUTIN Y LA REVOLUCION RUSA VISTOS POR SOFIA CASANOVA LA CORESPONSAL GALLEGA DE ABC EN SAN PETERSBURGO






SOFÍA CASANOVA


A burro flojo arriero loco. Palos en el lomo cagamentos al aire. Es bello el mes de agosto para entregarse a la meditación entre los trojes de la mies ya recogida y el frescor de las tardes con un libro en la mano paseando por la pobeda de Fuentesoto. Lágrimas de san Lorenzo. Parece que se adelgaza el airee que viene desde aquella parte del cielo desde donde los santos mártires nos protegen. Un ángel dibuja en el cielo del ocaso los nombres de Nicolás, Alejandra, Tatiana, Olga, Maria, Anastasía. El rostro del zarevich san Alejo viene con un libro en la mano y un libro de primera comunión vestido de blanco. su martirio ocurrió hace justo cien años en la tahona de Ipatiev el rico mercader. un comisario judío Abrahán Jacobo Yurovsky mandaba a los sicarios. Pacíficas noches tiempo sereno  de verano, el viento de la tragedia sopló lejos y sólo queda la unción y el bálsamo que nos protege de aquella sangre derramada en Rusia por nosotros hace cien años.

Me vienen a la mente de las quintillas de san Luis que esponjan el alma. Deseo alejarme del fango que nos circunda en esta empeña de mentiras y provocaciones. Los de la Cope estar bien informados pero desinforman cargan  la báscula y tuercen el argumento os lo digo yo que soy periodista. Siguen en su demanda de instaurar Auschwitz comno dogma teológico que sustituya a la crucifixión sin cruciferagio, miuentras nuestras cámaras enmudecen a la hora de contar a los palestinos asesinados por el terror sionista. las balas del infame comisario Yurovsky en Gaza están repicando.

 Los curas han abierto un museo de los horrores con huesos supuestos de los que no ardieron en los hornos. y no son santos. A mí me parecen montajes del Averno. Cuesta la entrada seis euros. en Argentina Bergoglio se ha callado como una ursulina con lo de la interrupción y yo le recuerdo al antipapa las palabras del Señor quien no está conmigo está en contra de mí. aquí no valen los maniluvios. Han revolcado los argentinos la ley del aborto. El asesinato en el vientre materno se está llevando por delante al cuádruplo de los seis millones de supuestos asesinados en Buchenwald pero con este anticristo que mora en Roma enmudecen las linotipias de la prensa torticera y banal y se entregan a circumloquios los falsos escribas marranos. Que empiezan a hacer encajes de bolillos sobre la estatuaria criselefantina de los museos vaticanos.

El magnicidio cometido por aquel  maldito judío anticristiano Yakok Abraham Yurovosky en la tahona de Ipatiev nunca lavará la sangre ni la culpa. El zar Nicolás II un buen hombre no muy alto de estatura de ojos azules y un gran señorío adornaba su persona (dicen que el presidente Mevdevev es una reencarnación suya... a lo más mucho se le parece) con Alix Fedorovna la emperatriz su hijo el zarevich Alexis y las princesa Olga, Anastasia, Tatiana y María hoy son santos y ocupan un lugar de privilegio en el santoral de la iglesia ortodoxa.

Yo leo a Sofía Casanova la gallega que entrevistó a Trotsky y a Rasputin.

Su relato sin apasionarme me parece interesante una relación circunstanciada de lo que aconteció en Petersburgo en aquellas horas claves para Rusia y para el mundo porque parece ser que cuanto narra no es testimonio apócrifo. Estaba en allí cuando estalló la revolución del 17 y lo cuenta. Enviaba crónicas al ABC de Torcuato Luca de Tena. Luego asistiría a la sublevación del guetto de Varsovia. Es deportada a Kaliningrado y regresa a España con los expedicionarios de la División Azul. Acabada la segunda guerra mundial, regresa a Polonia con sus hijos. Francisco Franco era admirador suyo y la recibe en el Palacio de Meirás. Veraneaba en Galicia todos los años. Con pasaporte diplomático podía entrar y salir de los países  tras del Telón de Acero. Caso extraño. De sus vivencia personales me quedo con el bosquejo que hace de Rasputin. Se trataba de un yurodivi iluminado o peregrino "palomos" les llaman los rusos perteneciente a la secta mistica de los danzantes. Estos eran alumbrados que pasaban toda la noche bailando y cantando desnudos saltando en corro al calor de una hoguera. Decían que de esta forma podían recibir el Espiriti Santo.

Sus ojos en las fotos que quedan ejercen aun una fuerza magnética que cautivaba y rendía a las mujeres. Sus aduladoras decían que el vagabundo siberiano poseía poderes mágicos. un ama de llaves de la emperatriz Alejandra, la Byrybka, en colusión con un monje paisano suyo de la localidad de Tomsk,  y fray Juan de Kronstadt, le introducen en palacio.

La enfermedad del heredero del trono, la hemofilia, al fin, le abre las puertas de Tsakoe Selo. La reina Alejandra tenía una gran fe en él. Parece ser que poseía una gracia de curar y cuando imponía las manos al enfermito éste mejoraba de condición.  Los Romanov cayeron en manos del agente de esta secta del mal. Las grandes damas de la corte las duquesas marquesas y generalas las viudas de los mariscales se sentían fascinadas por la mirada penetrante y las dotes de seducción de este tosco campesino al que perdonaban sus borracheras y orgías. Decían que era un santo bebedor, dado al vicio a las mujeres y al amor profano. Ama y haz lo que quieras pero lo cierto es que echaba de su habitación a las duquesas a patadas y las llamaba perras salidas, cansado de sus caricias.

Esta forma de pseudo misticismo arraigó en medio de aquella corte holgazana y vacía.

El padre Iván de Kronstadt quien lo introdujo en la corte de Nicolás II sin embargo decía que Gregorio Efimovich Rasputin estaba tocado por un rayo de divinidad. Y la verdad es que hablando con muchos rusos le seguían venerando. Recuerdo a la periodista Gertrudis Federovna que se mostró indignada cuando yo le hablé de este monje como un clérigo giróvago y salaz. Nunca pude entender esa veneración que se detectaba todavía en el país de los zares y de la que hacía gala mi colega y eso que era del KGB. Yo toreé al los polizontes soviéticos cuando era corresponsal en Londres me invitaban a comer y me traía vino de Georgia. Para después hablarme de Manuel Fraga y de Rasputin

Su enorme verga, la del cura Rasputin, se exhibía dentro de un frasco de formol en el Museo del Ateismo. el fanal resplandecía como iluminado por la fuerza irresistible de Priapo. ¿Prejuicios? no es bueno arremeter contra las creencias arraigadas en el alma del pueblo. Los rusos creen que el mujik siberiano inculto fue puesto por Dios en la corte de san Petersburgo para expiar los pecados del imperio.

La Casanova cuenta el horror del destronamiento de los Romanov una época muy parecida a la que vive España en la actualidad. El péndulo de la historia ha revertido al ángulo  muerto que marcaba cien años atrás: la holgazanería, la petulancia, la arbitrariedad, el nihilismo de Podemos, la mofa de la justicia, el ateísmo, el feminismo, la locuacidad gárrula de la tele, los cuerpos tatuados de las marquesas que entran y salen ▬ los estudios de Telecinco▬  la cámara de Rasputin para ser poseídas por su verga gigantesca para una sociedad alta corrompida y emputecida desastres familiares la guerra perdida ruso-japonesa de 1905 y la ignominiosa paz por separado con los alemanes en Brest-Litvosk, la trágica boda de Nicolás Alexandra en Moscú cuando se derrumbó aquel palenque nupcial. Sus primos ingleses ▬ típica  flema la reina Alix era nieta de la reina Victoria▬ no movieron un dedo en su favor.  

Nicolás II era un buen rey pero  hombre débil. Estaba manejado por su mujer según esta gallega una de las primeras corresponsales españolas en el extranjero. Releí hace algun tiempo sus crónicas y me parecieron un aviso de la crónica rosa que había de arrasar en las paginas de revistas ilustradas cono Hola, Semana y Diez Minutos.

  Y eso no es cierto. Amaba a su familia y a s mujer y a Rusia sobre todas las cosas. Tal vez su mayor único defecto estuviera en no haber aprendido a aullar con la muta de chacales que merodeaba palacio. El lobo penetró en el redil disfrazado de monje sanador, vino Rasputin con su comitiva de fuerzas oscuras y se acabaron los Romanov. El destino de Rusia es la Cruz y la Resurrección.

Se había casado Sofía Casnova con un terrateniente polaco del que luego se divorció y tuvo una vida azarosa y sorprendente al sobrevivir a los avatares de una época tan complicada, con la cual le tocó pechar.

Tuvo una vida larga 1861-1958 vivió las dos guerras mundiales en Polonia fue una de las primeras mujeres periodistas corresponsales y regresó a España con los de la Blau. He leído sus libros sobre Rusia y no me parecen un dechado de perfección. Adolecía en de esa cierta rusofobia que padecen los polacos. Al zar Nicolás II lo presenta como un hombre débil manipulado por su esposa alemana Alicia de Hessen que fue victima de su propia generosidad y bondad con los nihilistas y judíos. No atendió a la máxima maquiavélica de los grandes políticos: paso de buey, diente de lobo y hacerse el bobo. Le sobro bondad y le faltó esa malicia que convierte a los asesinos en triunfadores. Claro que san Nicolás II era un santo.







miércoles, 8 de agosto de 2018

SAN ROQUE


 


Acércate niña, que soy san Roque que si viene la peste que no te toque. Por decir viva san Roque llevaron me prisionero y ahora que yago en prisiones viva san Roque y el perro. El bienaventurado santo galo, patrono del peregrinar y del vagabundaje, es también el socorro de los apestados.
La sifilis se paseaba al socaire de su esclavina desde los Pirineos,  lo portaba su calabaza de camino a manera de cantimplora. Toda España jaranera es una gran fiesta y en Asturias en Galicia en León se le tenía  devoción. Entre sus barbas se esconde la liendre y las llagas del mal francés. Ayer por telegallega difundían escenas bochornosas de la procesión del santo que parecía un monigote sobre las andas que portaban unos mozos borrachos y tres mociñas con las tetas al aire.
Después de los voladores y la música de la procesión, debían de conducirse todos y yo el primero al pajar, o a folgar entre los setos. Claro, que el perro de san Roque no tiene rabo que se lo ha comido Manuel Pintado.


Las fiestas de los santos se han convertido desde que estalla el primer chupinazo de san Fermín hasta san Miguel de Septiembre en una gran bacanal. España se paganiza, se descristianiza. ¿Siempre fue así? Uno no puede menos de tener ciertas prevenciones hacia estas folixias y me dan pena las peregrinaciones jacobeas desprovistas de antiguo sentido penitencial que tenían, pero esto es viejo.
Ya en el siglo XIV Tomás de Kempis clamaba contra las romerías y las ramerías de estas fiestas locas. Porque de aquellas romerías estas veneras y de aquellos polvos estos lodos.


Decía el autor de la "Imitación": Multo peregrinantur sed paulo minus sanctificantur" (corren mucho y se santifican poco). Pero tal vez los que decimos que Cristo era un tipo de derechas y nos acusan de conspiranoides estemos fuera de concurso, nos alejamos de la orbita. Regamos fuera del tiesto.


A lo mejor la chusma está en la razón y somos nosotros los locos pero hay que huir del mundanal ruido si se quiere ser feliz. Cada día tiene su afán y cada época su signo. Y los signos no son precisamente hoy los de ese cristianismo medieval con que se divierte el mocerío.
Es el Zeitgeist de Nietzsche que retorna. Intus est equus troyanus. El enemigo está dentro de nsotros misos. Finis Hispaniae. Europa se acabó. Que hagan con nosotros lo que les cumpla. Yo acuso.



 

Inocentadas

 

En pleno agosto cuando el sol empieza a declinar y se alargan las noches, recordando aquellos largos, interminables veranos de la infancia, compás de espera de la vida que estallaba—¡ Dios mío, qué seré, a quien querré, adónde iré, mañana quién vendrá!— cuando tirábamos varetas por el barrio de Castrobocos y los domingos todos a misa, retorno al ayer segoviano que se fue.

Había moras aq mogollón al otro lado del puente romano que atravesaron las legiones romanas y los carneros de la mesta morisca. Las recogíamos en un bote y nuestras madres nos las aderezaban con azúcar y un poco de vinillo de en cá el Tío Loco aquel tabernero que tenía una tasca cerca de la fábrica de Klein. Sabían ricas incluso las pintonas.

Y los monagos de la catedral empezábamos a preparar las fiestas del obispillo, pasado el novenario de la Virgende la Fuencisla. El señor Sebastián el sacristán nos maravillaba con su agilidad de gato al trepar por la maroma que colgaba desde lo alto de la cúpula gótica. La cuerda conectaba el templo con el campanario de la iglesia mayor de Segovia y era maravilla verlo gatear sin cansarse cerca de cuarenta metros en vertical.
Aquel alarde era la señal de que moría el verano y se acercaba el otoño con sus hielos y relentes. Que concluía con los autos de navidad en el enlosado y sobre todo con la fiesta del obispillo de tradición medieval. Todo lo que sube baja y lo que está abajo se encima. Ley de vida. las inocentadas eran una señal de la fugacidad de las cosas humanas.

El acontecimiento era toda una lección de humildad. Porque ese día, coincidiendo con la llegada de San Nicolás, el acólito más pequeño era proclamado deán y era asistido por un minorista en el simulacro de misa pontifical. Se le paseaba en andas, triunfal, a guisa de silla gestatoria, por el claustro, con un báculo en la mano y una mitra en la cabeza que le venía enorme, mientras el coro iba cantando  motetes gregorianos por detrás.
 El “Iste Confessor”  del texto latino se alteraba con parodias chistosas en romance. Se hacían momos y pantomimas. Era cosa de ver aquel jolgorio.

Durante veinticuatro horas el obispillo mandaba en la catedral y era lo que se dice un rey de armas. El ceremonial era de raíz pagana y se había instalado de costumbre tradicional en la iglesia desde tiempo inmemorial.

Se honraba de este modo la llegada de   san Nicolás que acudía a la cita anual cargado de regalos que traía en un saco y se desarrollaban en las escuelas catedralicias las famosas inocentadas.

Relación había entre los niños degollados y las saturnales paganas para conmemorar el final del año solar.

En versión católica, la fiesta de los acólitos y ostiarios tenía lugar a la puerta de las catedrales con la benevolencia de los sacerdotes. Llevaban un burro a coro cantando canciones licenciosas.

Al momento de yantar, se enviaban al refectorio paquetes de envoltura; dentro había dulces, juguetes y toda clase de regalos. En todo caso, carbón y serrín, también, cuando el comportamiento o la aplicación escolástica del alumno había dejado que desear.

Según hubiera sido el comportamiento del primer trimestre llamado Michelmas, así la calidad de los presentes.

Asimismo, se destronaba al rey Herodes arrebatándole el cetro y la corona.  Al funesto degollador de inocentes al final lo quemaban en efigie, no sin antes haber tiznado su estatua de piel de sapo.

El sapo ese místico batracio cuya saliva usaban las brujas para volar. La primera escarcha marcaba el fin de la temporada micológica. Ya estábamos a las puertas del invierno y los campos aparecían sembrados de setas alrededor de la capital.

martes, 7 de agosto de 2018

COVADONGA O COUEVA LUENGA LUGAR MAGICO DE LAS ESPAÑAS
























VISITA A COVADONGA

 

El santuario de Covadonga es para mí como para muchos españoles un sitio clave. Yo me sitúo en este emplazamiento y rezo por mis difuntos y mis descendientes en en este lugar mágico. Los riscos escarpados demuestran el poderío de un pueblo rico en valores cristianos. A este legado muchos no hemos renunciado y seguimos batallando. Nuestra pluma es nuestra espada y esgrimiendo la larga adarga deshacemos entuertos y pugnamos contra los malsines y los molinos de viento. La tumba de Pelayo desprende energía. Covadonga lugar alto. Nuestra santina sigue siendo pequeñina y galana. Bajo su protección será poderoso e invencible nuestro empeño porque la lucha no se ha acabado.

lunes, 6 de agosto de 2018

El general Krasnoff atamán de cosacos murió ajusticiado por los sovieticos en la carcel de Lefertovo en 1947. Fue un gran militar un subline escritor y patriota ruso
Pyotr Nikolayevich Krasnov.jpg
KRASNJOFF LAS HOJAS CAÍDAS EL FIN DE UN IMPERIO

 

 

 

NO hay dios las gentes lo inventaron para poder vivir los fuertes pueden vivir sin dios los débiles no… los rusos os habéis vuelto egoístas y llorones… ahora mandamos nosotros… tenemos la sartén por el mango, es nuestra la judicatura y hemos comprado  vuestros periódicos… we ll buy you out.

El periodismo fue alma de la vida moderna y motor del progreso según los cursis. A la llegada de la globalización digital se convirtió en fórmula de esclavitud.

Hoy ese motor estupefaciente está en las redes sociales que por igual controlan los judíos de Facebook apóstoles de las patrañas heraldos de la gran mentira de cuya mano vamos todos al saladero camino de la morgue de Munmayor con sus rumbosos palacios donde se alza una reliquia ecológica para mí que es como un cuento de hadas: el nisal con sus camperas y sus pastos elegantes aerogeneradores, urcíes y argomas. El cirolero que nos brinda sus dulces frutos detrás de la cerca. Dios escribe al derecho con palabras de la Naturaleza lejos de los fueros de la Política.

Al pie de monte de Coaña con sus linares encharcadizos resuena una voz profética:

 ▬We shall buy you out. Sólo nosotros podremos comprar y vender.

Pandea el paisaje entre jorcadas montañeras de tierras coloradas y ferruginosas. ¿ Hay vida en el planeta Marte? El holocausto es el final de la historia, pronto sonarán las trompetas del juicio universal: Das Jungste Gericht.

 Al zar lo asesinaron con su mujer y sus cuatro hijos hace cien años. El sentido de ese regicidio yo no lo comprendo. ¿Para qué serviría tan macabro holocausto en los bajos de la tahona de Ipatiev el rico mercader semita? Y mira que no se perdonan los pecados contra el Espiritu Santo, aquel crimen fue uno de ellos. No cabe expiación. Pesará la culpa eternamente sobre el pueblo maldito escupido con salmos y conjuros de la boca del Padre Eterno. Porque los moralistas católicos ▬ Rivadeneyra entre ellos ▬ dicen que el dolor humano es un regalo divino para probar a los que elige: una catarsis. En sentido estricto la interpretación no parece viable, en sentido lato o traslaticio, tal vez. Pero es muy dudoso y resbaladizo todo esto.

Como cristiano me someto a ese postulado, como judío soy incapaz de aceptarlo, ¿La muerte de un niño de cáncer, el incendio de los bosques de Atenas, el degüello de inocentes, la violación de las vírgenes por los de la “Manada” en las fiestas lupercales de San Fermín, responde a designios del Altísimo planeados y en la mente de Dios desde toda la eternidad?

Los moderados enmiendan la plana a los doloritas con su tesis de que Dios que el bien sumo no cabe en el mal ni dolor pero cualquier desgracia personal o catástrofe estatal ▬ peste, terremotos, incendios, guerras ▬ Él los autoriza a efectos purgativos. Y para que nos enmendemos manda el castigo. Aunque por lo general son los inocentes los que pagan factura. Los malos sobreviven y nunca se hacen cargo. Ellos se ríen de ti que vas cojeando por la vida y gritan desde las zahúrdas del odio y el rencor:

▬ Somos los elegidos. Tenemos enchufe con el Señor. Todo nos está permitido ulteriormente a Auschwitz, ¿Qué hay de lo mío?

Echenique rie desde el carrito que le regalaron los de la Seguridad Social de Aragón cuando vino desterrado de la Argentina los ojos saltones la cabezota en bambolea. Es giboso como una tortuga encaramado a una silla de ruedas que le sostiene la columna vertebral inmovilizado de medio cuerpo para arriba… but he is for president. ¿No es esto una gran farsa? Se promociona a los tullidos a los mangantes a los ladrones. Son postergados los españoles. Primero a los emigrantes y se concede casa y trabajo a los que vinieron desde ka Selva. Los buenos son lanzados al fuego eterno de la gehenna.

Krasnoff en sus “Hojas Caídas” no fiscaliza a Dios ni trata de escudriñar sus designios. Emite un oráculo sobre los tiempos del Fin cuando todo será a rebours y andarán los hombres con los pantalones del revés y las mujeres las tetas al aire. Se limita a denunciar un hecho: los mosaicos se convirtieron en los verdugos de la Ortodoxia. Ganó el Maligno la partida. ¿Dónde estaba Dios cuando un pelotón de soldados letones borrachos acribilló a balazos a la familia imperial? ¿En qué zarza ardía su rostro invisible cuando fue ultrajada Natacha la amada del protagonista? ¿Por qué Lisa la hermana de Fedor fue tambien violada por su novio campesino en la aldea de Vipolsovo? ¿Fue acto de expiación el ajusticiamiento de la nihilista Julia en la cárcel de Petropavloski por matar a un gobernador en Crimea, cuando la terrorista Sonia y sus mentores los Bradovich sucursales de Lenin y su cadena de periódicos que apoyaba la conspiración sale del embate sin una mala multa, sin un rasguño.

Los rusos pueblo rebañiego iba de oveja al matadero mientras los chacales aullaban en las noches blancas de Petersburgo.

Los funcionarios suspiraban por la santa nómina que llegaba al banco los veinte de cada mes, jugaban a las cartas o se emborrachan con los amigotes del Círculo. Nadie quería saber nada de la que se venía encima. Los sentimientos del pueblo y la opinión pública parecían anestesiados y expectantes ante un porvenir que aceptaban resignados. El mismo borreguismo de aquel ambiente de Petersburgo se da hoy un siglo después en Madrid. Aceptaban el yugo y veían cómo los “elegidos” se enriquecían mediante la esclavitud de los rusos. “Nuestro pueblo sólo sirve para ser victimas para llenar los presidios y calentar banquillo delante de los jueces. Ahora te procesan por nada. Hipólito Kuskov quería ser algo en la vida aspiraba a la cartera de un ministerio o cuando menos jefe de un negociado, lo deportaron a Siberia. Acusado de un crimen que no cometió. Vente con nosotros. Hay que abandonar las viejas ideas: la patria la familia, Dios. Desde ahora debes jurarnos obediencia. El partido va a ser tu dios. “Me avergüenzo ▬ se lamenta uno de los protagonistas del libro ▬ de ser ruso. Somos un pueblo de borrachos maleantes y vagabundos” que vienen a ser lo mismo que el lamento de algunos españoles renegados “Se es español porque no se puede ser otra cosa”. En semejante desenamoramiento o descorazonamiento colectivo existen paralelismo entre el alma rusa y la española. Tanto en Rusia (hasta Putin) como en España los políticos carecen de talento. Hoy vi una paloma volar entre un bando de cuervos negros y me afligí. No sé cuál sería su destino. Subsecuentemente, las pasiones humanas son difíciles de vencer. Es de noche y se escuchan gritos en el bosque, hoy lo mismo que ayer y mañana igual que hace mil años. Acierta el general cosaco en el titulo de este libro: Todos somos hojas caídas del árbol del destino, zarandeadas por el viento.

El zar Nicolás murió por ir contra corriente por no abdicar de la cruz Cristo. Su padre Alejandro III había sido objeto de varios atentados. Al abuelo Alejandro II lo asesinó un nihilista y él mismo, firmado el armisticio de la guerra ruso-japonesa de 1905, al salir de la misa de pascua en una iglesia ortodoxa de Tokio un samurai le clavó un cuchillo por la espalda, herida de la cual milagrosamente sanó. Vivió Nicolás II abrazado a la cruz. El evangelio era su destino. Era un santo… ojalá la iglesia católica siguiera el ejemplo de la rusa que ha canonizado a toda la familia imperial fusilada en 1918.  Pero quiá; No cabe tal posibilidad estando al frente de ella ese sátrapa de la sinagoga argentina al que llaman Papa Francisco,

El “Pálido” Vladimir Illich Ulianov se camuflaba en los trenes de largo recorrido, con pasaporte alemán. Los viajes lo pagaban los Roschild y los banqueros suizos. Trotsky creó un ejercito rojo en el cual los soldaditos dejaban de ser personas para convertirse en carne de cañón. El comisario tabardo de cuero y pistola en mano iban detrás de la infantería. Al soldado que en el avance vacilaba o reculaba lo pegaban un tiro. Este no es el ejercito del general Krasnoff donde se exaltan los valores castrenses; La disciplina, el espiritu de cuerpo, el heroísmo, la guarda de la frontera. Debemos ir en bysca de la verdad y de la belleza pero ¿dónde está? La familia de Kuskov se muestra herida por la fatalidad. Todo se lo lleva el Pálido aquel diablo que parieron en Simbirsk. El zar Nicolás y ka princesa Alix mal augurio el día de su boda murieron mil quinientas personas al hyndirse una tribuna durante las celebtraciones nupciales, el heredero sería golpeado por la hemifilia y sibre el palacio de invierno se proyectaría la cara triste del pope maldito: Rasputín. Los elegidos mucho han de sufrir. Por eso el emperadir tenía triste y vagoroso mirar. Los flutlinge arrojaban cagadas de hombre y cal viva a los guardias civiles. Volaban como humo las nubes sobre sobre los cielos aranjados de Ceuta color de invasión, las esposas maltratadas lloraban el dinero bebudo por sus hombres en la taberna. ¿Por qué bebes? ¿Por qué zurras a la parienta? A la muy perra la encontré encasquetada con un moro. Ay Virgen perdí la honra no sé qué va a ser de nosotros, los pecados de la mujer siempre los pagan los hijos.

Acostarse con la mujer del vencido es un derecho que invocan los vencedores en todas las guerras y los judíos siempre se van de rositas. Salen secos del agua, está lloviendo y ninguno se moja. Sacan no sé qué patente que losa inmuniza. Hay que reconocer que son muy listos. Sobre algunos pueblos parecen detentar el derecho de pernada.

 Durante toda la obra se escucha entre el taconeo de los desfiles t paradas el toque de llamada del cornetín de ordenes y voces cuarteleras. Soldado soy de España y estoy en el cuartel contento y orgulloso de haber entrado en él. Suena la cornamusa del toque de diana luego fajina toque de silencio y oración, así era entonces, vino un tío de derechas un tal Chemari Aznar y hubimos de arriar bandera, quedó suprimido el ejercito rompan filas, los militronches de hoy escuadran un ejercito solidario comodines de relevo en acontecimientos bélicos lejanos que nada tienen que ver con la defensa de la patria, en Rusia después de quedar derrotados los  blancos vinieron las huestes comisarias del Tozudo y se vio a antiguos generales zaristas de pordioseros  pidiendo limosna por las calles de Berlín. Trotsky el Trotsky o Tolstoi el gordinflas. Que más tiene qué más da o Gutiérrez Mellado el traidor. Son los mismos perros con otros collares. En España la revolución ha sido un poco más lenta e imperceptible. Ahora nos estamos despertando alarmados para comprobar que esta gentuza nos ha dejado sin país. Los periodistas del Pravda tenían un aire de perdonavidas y de bufones.

“Las hojas caídas del árbol del destino” son un tributo a Némesis la diosa de la venganza. Un conjuro contra las fuerzas oscuras contra las que luchaba Fedia un hijo de la luz al que los rayos del sol invicto protegen y guían.

 Todo ese mundo fenecido de mi tierra me descubre cada capitulo de esta enorme novela en los que doy vado a mis pensamientos oprimidos que son mis recuerdos y remordimientos.

 En el sur las mesnadas de la emigración están levantando gente con el efecto llamada. Es una invasión no nos engañemos señores buenistas ilusos. Pisan tierra española extienden la alcatifa y adoran a Alá pronto sacarán la cimitarra. Atacan a la Benemérita les arrojan cal viva y miran como el que enristra una lanza. El caballo de Atila trota nuevamente por el sur.

Krasnoff lo predijo al desenmascarar a los judíos porque estas mafias a las que todo el mundo culpa y nadie sabe donde residen tienen cobertura del Sionismo empeñado en transbordar gente a Europa. Es el corolario de la teoría de la venganza bíblica del holocausto. Son apariciones en la tarde malva de julio color alberil las que me afligen.

 

 

 Sólo los elegidos podremos comprar y vender. De esta manera habla Sonia la bella hebrea en cuyo rostro soplaban el viento de las montañas de Judea y el carmín de sus labios olían a las rosas de Jericó la mujer fuerte que defiende a Vladimir Illich Ulianov en el juicio por haber atentado contra la vida del zar Nicolás. Es la hora de la inmundicia de los abogados picapleitos el cine las modas el amor libre la corrupción de los nobles y el nihilismo. Todo el poder para los soviets. Ahora mandamos nosotros. Sin embargo, hay un pasaje en el cual, por boca del rabino Abraham Brodovich, el general cosaco advierte que el cristianismo es una religión de orden superior debido a su carácter divino. Amor et labor omnia vincent “Ah pensó el judío qué fuerte es la religión cristiana y qué difícil será luchar contra ella mientras existan seres como  Natacha”. La novia de Kuskov que luego será martirizada y violada escenas tétricas y una descripción terrible de la brutalidad de la cual sin capaces los seres humanos convertidos en bestias. Cuando a Bárbara Serguyevna la madre del protagonista le comunican la muerte de su hijo manda quemar los cigarrillos que le había regalado Suzanne la inductora del crimen. Comprender es perdonar.

Es una idea que se repite a lo largo de las páginas apasionantes de esta crónica de los acontecimientos que llevaron al regicidio de la familia imperial narrados desde el punto de vista de un gran militar, un oficial de la Guardia. Retrata la decadencia de los Kuskov y del ascenso social y pujanza económica de los hebreos peterburgueses que desencadenaron la revolución. El relato del general cosaco que escribe con la autoridad y despejo con el que bailaba una polca, montaba a caballo y comandaba una setnia me ha hecho entrever por más que nunca entender de por qué esa rusofobia. El odio al Kremlin mande Stalin mande Breznev o Vladimir Putin tiene su origen en que el pueblo ruso no ha sido sometido a las veleidades del dictado nazi/zionistas. Sigue en pie y con la cabeza enhiesta. La ortodoxia no se ha rendido pese a la claudicación de Roma y la sumisión del mundo protestante.

Nosotros somos débiles ellos son fuertes pero controlándolo todo y sabiéndolo todo resulta que no saben nada. La familia de Miguel Pavlovich Kuskov se asoma al abismo de la desgracia y de la bancarrota. Celebraba con solemnidad la pascua y el día de pentecostés acudía a la iglesia a poner el ramo con hojas de abedul sobre la cabeza de Cristo. Sus hijos se pervierten a  causa de una maligna educación sentimental, estamos ante la clave de un enigma. Krasnoff con habilidad certera va desenrollando la madeja. Está atando cabos a lo largo de los casi cien capítulos pero la historia como la vida misma es muy larga, contradictoria. Y sorprendente. Las descripciones que hacen de la naturaleza y de las costumbres son insuperables. En bárbara Sergueievna plasma el retrato perfecto de la gran mujer rusa bella apasionada madre de sus hijos amante de su patria. Los sufrimientos de su atribulada existencia no la obligan a desertar del Amor.

Su marido Mijail Pavlovich desde la muerte de su hijo se entrega a la bebida. No bebía como los campesinos para sazonar sus penas y alegrías; bebía metódicamente vino a las comidad y después alguna que otra copita no se le veía borracho pero se encontraba en estado de sobre excitación permanente (está haciendo el esquema de un alcohólico típico) y perdía fácilmente la continencia. Había engordado y en aquellos cuarenta días de duelo había envejecido años.

Lo actual es feo no tiene belleza hoy todo es egoísmo. Adonde fue lo bueno y lo bello a parar, nos cuenta el general escritor.

El metacrilato es el mineral que nos ayuda a graduar la vista a través de la lente óptica, de igual modo una gran novela es un descubrimiento, una visión una epifanía. El novelista de verdad comparece a los ojos del que leyere como un demiurgo un dios creador y ese carisma se da en este apasionado libro sobre los días que precedieron a la revolución de octubre.

Muerto Andrés, Fedia, el hermano, retoma la acción y se convierte en el epicentro de la trama y el preferido de la madre Bárbara Sergueievna. Se describe a los otros hijos; Hipólito el mayor que detesta el zarismo y se convierte en un liberal y será el intelectual de la familia. Fedor, sin embargo, quiere ser soldado. Miguel Pavlovich Kuskov tras el suicidio del hijo se da a la bebida. El alcohol cambia su carácter y arrastra una vida anodina de funcionario que sólo espere que llegue fin de mes con la santa nómina. En este ambiente la muerte quiere proclamar su reinado, se escuchan en el jardín de la casa venida a menos el grito de la lechuza. Lipa y Losa juegan a las cartas son dos colegialas intrascendentes. La vida es trivial. Mientras tanto los judíos acaparan éxitos se hacen con la fortuna de los viejos terratenientes compran fincas tienen buenos abogados que ganan pleitos van los sábados a la sinagoga tocados de sombreros negros y de caftanes largos que les cubren desde los pies hasta las orejas.  La vida les sonríe. Los judíos son raza fuerte.

¿Qué es la belleza? Algo nada fungible los hebreos peterburgueses se ríen de ella y proclaman el dinero como lo más importante de la existencia. Hay que mirar por la copeca pues si miras por él con los rublos no hay problemas. Hipólito predica la igualdad de géneros y de clases sociales. Es suspirar por imposible. El mirlo blanco no canta en el alero. Lo único que hace a los hombres iguales es la muerte pero el mayor de los Kuskov sigue aferrado a sus creencias igualitarias y buenistas sueña en un mundo sin fronteras. Hipólito resulta un personaje muy actual. Podría militar en una ONG y recibir la acolada del Papa Francisco al albur del lema “güelkome  refiuyís”.

Abajo los nacionalismos por postular la superioridad de razas y de unos pueblos sobre otros. Entonces ¿Cataluña?

Krasnoff hace equilibrios sobre el filo de la navaja y describe las contradicciones de la sociedad del avenir, así como los amaños contradicciones y antinomias del alma judía. La muerte de las patrias y su pisoteo conducirá al caos. A Fedia le aconseja su madre; “ama siempre a Rusia. Ese amor es más sublime que el de cualquier mujer. Las mujeres defraudan en el amor, carecen de bandera. La patria no”. A contrapás Hipólito escupe sobre la enseña que le da a besar su hermano. Acabará pobre y hambriento en un suburbio de Berlín como apaniguado del judío Abraham Brodovich. Triste es la suerte que espera al librepensador y apasionado polemista. Podría ser hoy un tertuliano de la Sexta humillado y ofendido como todos esos elches y renegados de la casa de los líos a los que la revolución dejará con la palabra en la boca. Cayeron en su propia trampa el mal nunca dará vado a la malfetría. El reloj del destino marca sus horas. Hay corilos (avellanos) en mi huerto que por septiembre dan gordas avellanas que no comerán los cerdos antipatriotas aunque tengo por seguro de que el más ruin jabalí se zampa la mejor bellota