ELEGÍA Y CANTO A LAS 24 REDONDAS BLANCAS
Con el ordenador son 53 pero bien está traer a colación aquí el poema de Pedro Salinas a las 24 redondas blancas como punto de apoyo que mueve el propio movimiento:
quietas dormidas están
Las treinta redondas blancas;
entre ellas sostienes el mundo
En realidad estos sagrados templos de las Nueve Musas son- y es lo que quería decir Salines- son cariátides que sostienen empujandolo hacia arriba al globo de la esfera armilar. Como vehículos de la idea y ancilarias de la palabra. Sin palabra no hay ciencia ni comunicación ni progreso. El be de la cabra y el chillido del mono. Es a lo que volvemos? Dios quiera que no.
Así, con este verso, el poeta Salinas en La Voz a ti debida entonaba una loa al tablero de la Smithson Corona, su maquina de escribir, ábaco del amor y del dolor, cifra y compendio de nuestros pensamientos, férula de nuestras vidas que en ellas ponemos al tablero, campos elíseos de las nueve musas, burladero con que hurtamos el cuerpo a las cornadas de esas vaquillas que son auténticos miuras morcillos, tan difícil de poner en suerte como a todo toro hembra, instrumento de trabajo de vates, abogados, periodistas, comerciantes, cronistas en general.
Alistair Cook sesudo radiofonista británico en una de sus emisiones últimas por la BBC en su Carta desde América propalaba la noticia de que la firma Smith&Corona cerraba sus puertas después de haber estado fabricando mecanografía desde hace 125 años. Sería una noticia que pase inadvertida. Los Massmedia se encuentran muy atareados por cuestiones de mayor momento a causa de una actualidad vertiginosa, en la cual parece que la historia se derrumba.
La firma patentadora de maquinas de escribir, cajas registradoras y otros instrumentos de cálculo más antigua de los estadounidenses, al cerrar sus dependencias y mandar a sus laborantes al paro, no es más que un nombre temblando en un papel, en la larga lista de fusilados a causa de este alzamiento cibernético que no cesa.
Ah, las redondas blancas, que se bañan en tinta y en sangre y a veces en agua clara! Las aguas del Tíber, como en los tiempos de cesar, siguen bajando negras con la sangre de tanto ahogado que grita antes de expirar: soy poeta. Una empresa que fenece; su cadáver, en cambio, no es un fiambre como los demás. Surjan de nuestras gargantas cantos epicedios de los que lloramos la desaparición de estas treinta ninfas mecánicas que nos ayudaron a construir nuestros propios paraísos e infiernos. De papel.
Las anduvimos aporreando con ira revolucionaria cuando nos creíamos con algún poder para que todo esto cambiara. Recuerdo que Paco Umbral se fotografió una vez desnudo y su pluma Olivetti 22"- la que utilicé yo- le servía de hoja de parra y así, in púribus, pero, a cubierto por el paño de pudor de las redondas blancas, apareció en la portada de uno de sus libros .
Las hemos acariciado con éxtasis. Con ellas hicimos el amor; tuvimos los mejores orgasmos.
Una idea feliz, una metáfora de contraste, un concepto de inspiración son como para correrse de gusto. Porque, desde el principio, sobre sus lomos cabalgaron nuestros primeros poemas de amor. Ellas son en verdad el amor. La novia que nunca cambiamos por otra. Ni nunca ella nos dejó. Amor a primera vista. Amor imperecedero. Aunque hoy escribir para qué? Difícil respuesta: es difícil escapar al ojo panóptico de la Gran Cuadrúpedo Sinario. Le importamos poco los escritores.
Pero son muchos años amando y sufriendo, dándoles a la tecla, mucha cólera y no menos ternura de afanosas noches en blanco escuchando las retransmisiones del alma y las que llegan DX, voces amigas de sintonías efervescentes en la madrugada. Todo esto para qué? Es el mensaje de la botella. Algunos dirán que esto que hacemos es un ejercicio inane pero a él estaremos sometidos los que no sabemos hacer otro (Cela dixit) hemos dejado la piel quemandonos las pestañas para que amenguara la vista, y gastando la yema de nuestros dedos.
Se atrofiaron los riñones, duelen las caderas y van las manos involuntariamente a atentar los cuadriles. Nos desriñonamos, vaya, entre sahumerios incesantes de nuestra cachimba y las tazas de café. La pipa ha sido otro de nuestros consuelo.
A la ingratitud de la existencia se vence con tabaco y humo porque acaso no otra cosa seamos que humo. Hemos sudado la gota gorda en este oficio que no guarda parangón con ningún otro. A ratos resulta suplicio y cadena. A ratos, deleite y fruición. Sueños que sueños son. Escribir es, ciertamente, una profesión pero también un vicio, del que no se descuelga uno sino con la muerte. Y a tal punto, que puede resultar más llevadero quitarse del trago o del tabaco que renunciar a esta grafomanía que nos penetra.
Nuestros sueños, pesadillas y realidades, se condensan en ese claustro apretado de las treinta redondas blancas. Ahí está la vagina rasgada de la sonrisa vertical que lanza hijos de la imaginación al mundo. El peligro es claro está junto a los retoños sanos las paridas. Redactar una parida es como alumbrar un hijo tonto.
Por desgracia, éstas abundan lo suyo entre los leguleyos y plumíferos/as y plomíferos/as que engendran demonios. Sin embargo, el rodillo de nuestra portátil todo lo abarca: el tópico desangelado y la idea genial.
A veces este carro de fuego de nuestra Olivetti echaba chispas. Era un carro de fuego en el que Elías trepó hasta los cielos. Por la cinta de la fábrica de los sueños- verdaderos caprichos goyescos- salían hasta cascos de botella.
Pedro Salinas pasó a limpio el original de La Voz a Ti debida en la Smith Corona insertando en el rodillo cuatro copias al carbón. De la misma manera hicimos muchos españoles con nuestros primeros poemas. Nadie nos hizo caso y aquellas láminas olvidadas y amarillentas yacen olvidadas en la oscuridad de viejas maletas o en cartapacios y antiguos archivadores.
Es otro riesgo que hay que afrontar, máxime, en la actualidad, el anonimato y la oscuridad. Estamos condenados a re-escribirnos y a enviar mensajes a nosotros mismos. Por si acaso lo lanzamos a la Red formato HTML en la esperanza de ser leídos. Escribe para ti mismo, dijo doña Machina la bibliotecaria de Logroño. En aquella frase me pareció escuchar una sentencias de muerte. Doña Machina era una mujer cruel como las Parcas mismas. Machina, máquina infernal, nos metió en buen mechinal. El poeta se queda sólo. Le han arrebatado la lira pero nunca le podrán quitar su voz.
Y nadie, mejor que el vate madrileño transterrado a Nueva York, supo cantar a la esbeltez y mutismo de cariátide de las Treinta Redondas Blancas. Mundo de cine black & white. Y por esa sendas seguimos los demás juntando palabras blanco sobre negro. Tiene que ver un irritante como el café o como el tabaco con el hecho de la inspiración? Pisemos mayúsculas. Calquemos en la versal del acento. Lo esdrújulo y apaisado. Antonio, no te metas en ese jardín.
Las treinta fichas constituyen no sólo nuestro aval. Son igualmente le muro de carga del edificio de nuestros sueños y Wailing Wall de los que se sienten incomprendidos, maltratados, perseguidos y hasta trucidados por los Herodes de las épocas. El acto de escribir es un acto inocente pero a veces los escritores pasamos por terroristas.
Con esta tecla en nuestros dedos estamos echando un pulso a la Historia. Nos da en plena cara el viento del Espíritu y nos sentimos eufóricos cuando escribir resulta sencillo o consternado cuando se aleja la inspiración. No hay tormento mayor que el de la cuartilla en blanco que aqueja a todo escritor. Hay que contar historias. Las que merecen contarse, y las que no. El ordenador no ha hecho sino aumentar el campo de posibilidades (y feria de vanidades) de la escritura hasta límites increíbles.
Porque la mecanografía continúa siendo la abuela irreconocible de la telemática. Pisar la tecla mayúsculas/minúsculas de una Underwood o de la última computadora fabricada en China es realizar profesión de fe en el misterio de la palabra. Reyes del alfabeto tenemos la llave triunfal del abracadabra. El soplo del espíritu, ya decimos, se equipara con el duende de las imprentas inserto en la magia de las Treinta Redondas Blancas con su inmenso abanico de combinaciones. Que brindan la salida del laberinto. A través dellas rastreamos el hilo de Ariadna.
Mi portátil hasta hace poco seguía emitiendo ese tableteo nervioso y seco de las ametralladoras. Ta. Ta. Ta. Y yo me sentía como el violinista en el tejado o como un francotirador - es lo que he sido toda mi vida, largando por lo independiente, yendo por lo libre- que asmaba la calle desde arriba y soltaba tiros contra todo lo que se movía. Contra esto y aquello. Esto y lo otro.
Ese sonido de mi Olivetti es para mí pobre escribir lo que la campanilla de las cajas registradoras que hacen poner los ojos chiribitas de los tenderos. Tilín. Tilín o el till que dicen los ingleses. Hacer la mili como servidor de ametralladoras es un buen empiece para un escritor. No me embromen con cuentos de hadas. Donde pongo el ojo, pongo la bala.
Me jacto de haber dominado este oficio a fuerza de tesón. De qué me ha servido? Tuvimos la mala suerte de vivir en un tiempo perdido de persecución y de incomprensión. Este ha sido uno de los periodos más siniestros de la historia de España pero, si cabe, que los del Rey Felón. Que vuelva Goya y se hinche hasta la narices de estampar narices borbónicas, cayetanas y monarcas con cara de gilipollas, princesas facticias y ficticias y niños rubitos y archi guapos que dan muy bien en el Hola y dan de comer a Rocainfiel y otros de la cuerda.
Con su pan se lo coman. Mientras la patria desolada se muere de tristeza y de asco aunque todos nuestros súbditos a los que va la marcha están bajo la bota del control. Que acá no se mueve nadie.
Esto no es, desde luego, me huelgo decir que yo, francotirador, que estampo mi diuturno paqueo sobre el sobrepelliz de mis hadas madrinas que son las Treinta Redondas, donde pongo el ojo pongo la bala. Ni las ideas ni las palabras me son refractarias. Casi como Indurain cuando se monta en una bicicleta y llega al pódium del Parque de los Príncipes.
Hay días malos en que te entra la pájara y uno no tiene ni una triste historia que llevarse hasta las teclas. Sequedad informativa. Penuria inspirativa pero dejalas, hijo que ya vendrán. No entra nada en esas esfera maravillosa de las cuarenta pulsaciones por minuto. La mente parece bloqueada y entonces es como el cadoz de la noria de una alberca que se empeña en sacar agua de donde no mana.
A la maquina de escribir hay que aporrearla pero el ordenador parece que va solo. Se embala. Es una maquinaria de magia oculta que parece ajena al temperamento y a las veleidades humanas. El PC no parece comprender los altibajos del plumilla que lo maneja. Es silencioso, de visión nictálope, superferolítico, eficaz, pero a veces nos muestra la cara hosca de sus manías. Es más inteligente, menos apasionado que la maquina de escribir, al tiempo que muestra un mundo plano.
Es todo cabeza porque de raza le viene al galgo. Lo dicen inteligencia artificial. La otra, todo corazón. Los que para escribir necesitamos barullo, humo, que suene la campana, que se atasque el rollo de papel que rechine el carro y que se cargue aun el tope de la justificación echamos de menos a la Underwood cuyo espaciador manejábamos con furia porque cada linea escrita aunque no nos la pagasen como a Agatha Christie o al perulero don Vargas Llosa que cobra una millonada por sus engendros en forma de articulito era una victoria.
Era como rescatar al Ser de la Nada. El que pone una idea en circulación en este país de modorros engendra y trae muchos hijos al mundo en diferentes partos múltiples. Echábamos para el compañero de al lado una sonrisa de satisfacción. Cáspita. Eureka. Lo conseguí.
Los que venimos de esta furia nos sentimos cohibidos por esta gollería silenciosa de la cibernética. La memoria artificial abrió para el escritor la cancela de otros mundos. Con ella puede llegarse al texto perfecto. Quitar. Añadir. Corregir. Sobrescribir. Formatear. Escindir. Proyectar. Subdividir. El cursor y la clepsidra. Todo aséptico y superferolítico pero uno siente nostalgia por aquel ambiente visceral, aquel humo, aquel hablar a voces. Hoy ya no se fuma. Es un mundo sin tabaco pero envenenado con otros tóxicos. Y todos vivimos enajenados por una vida sin ilusiones y sin amor. Mercurio derribó a apolo de su pedestal.
La última carta desde América de Alistair Cook-el hombre que narró para la BBC la entrada de los rusos en Berlín y la caída de la Montecasino-sus crónicas eran tan periodísticas que bastaba con escuchar el lead, después se perdía en juego de palabras y parecía que se escuchaba a sí mismo- me ha embargado de añoranza este domingo de agosto. El periodista británico cuenta lo difícil que es en Nueva York hacerse con una cinta de maquina de escribir a gentes que, como él, siguen sin entender el ordenata.
Hay que ver las maravillas que inventa el hombre blanco! Aquí empieza el tránsito de lo digital a lo analógico. Las manualidades tienen poco espacio de vida.
En Nueva York nació precisamente la maquina de escribir el 1873 patentizada por un inglés que se apellidaba Remington. Este señor se había forrado fabricando cañones y armas cañones. Su caso era muy parecido al del magnate Nobel sueco que fundó los dichosos premios aquejado de un golpe de arrepentimiento por haber colocado en el mercado armas de todo tipo. No sabía el hombre que la maquina de escribir también puede ser un arma letal y cargada de futuro.
Puede causar bajas y barrer enemigos sin necesidad de pólvora u otro fulminante. Es un revolver y una navaja . Pero la mecanografía puede ser un atril para reclinar los santos evangelios. Se trata de una herramienta carismática para cuantos seguimos creyendo en la Buena Nueva. Me incluyo en el cupo de estos humanistas idealistas a los que el vulgo tacha de zumbados. Que siguen creyendo en la justicia y la solidaridad. Rara avis!
Las treinta Redondas nos sirvieron de escalera para trepar a esas realidades excelsas a las que aspira el ser humano que son la Verdad y la Belleza. Pero acabamos rompiendonos la crisma. Luego nos levantamos, sacudimos el polvo de nuestras sandalias con la caída, nos limpiamos los petos pero pronto nos dimos cuenta de que no teníamos donde ir. Nadie nos oferta cobijo ni nos da un lugar para lamernos nuestras heridas.
Uno ha muerto para el mundo. Vive en su celda recluso servido por esas hurís sin cuerpo, dulces etéreas, a ratos hetairas, que nos sirven, nos lavan los pies derramando sobre nosotros ricos pomos de alabastro como hizo María de Magdala, que son las fieles Redondas Blancas. Autenticas cantineras para los escritores de infantería que somos los periodistas. Y de su mano seguimos escribiendo, soñando.
El 408 ya san Agustín poco antes de que los corceles de Alarico hundieran sus pezuñas sacrílegas en las lajas de la Vía Apia, alertaba, desengañado, que la verdad y la belleza sólo podrán ser gozadas en la otra vida porque mi reino no es de este mundo.
De tejas abajo, sólo podemos aspirar a que ellas nos sirvan de cirineo para sobrellevar las tribulaciones y persecuciones que la vida depara o servirnos de escudo o talanquera para esquivar los muchos golpes y cornadas que nos lanza el enemigo. Porque vivimos sojuzgados por un poder temporal en el que manda Lucifer, escribe el santo.
Pese a ello no claudicamos. Conscientes de nuestra derrota temporal, confiamos en nuestra recompensa eternal. Sabremos ser carne de cañón y carne de prostíbulo pero, asimismo, estamos abocados a ser carne de máquina de escribir. Somos, en una palabra, los perdedores.
La voz rotunda, como de petulancia de Cook [British pasada por la trituradora del yanqui pangue, que los americanos hablan un poco por la nariz, y del acento meso-atlántico] nos sigue acompañando desde Nueva York. Es todo un icono de la famosa sede de Bush House. Él debe de haber pasado el Rubicón de los 90 en plena claridad mental. Quizás los buenos periodistas nunca mueren. Cook es la voz de la tía abuela o auntie que es como llaman los ingleses a la BBC. Quizás los buenos periodistas nunca mueren.
A mí desde luego siempre don Alistair me pareció un buen periodista aunque un si es no es petulante, uno de esos ingleses que miran a media humanidad por encima del hombro. Los buenos locutores quizás nunca mueran. Sólo se desvanecen y su voz sigue rodando a través del éter por toda la eternidad.
Cook es el oráculo de la crónica política internacional. Es un panegirista inglés de la América profunda y yo no diría de pensamiento independiente pues su discurso sonaba siempre algo phoney pero creíble.
Se le cita como hombre de la CIA en Gran Bretaña. Su letra desde América es el Nueva York entrevisto desde un angular personal narrada con un impecable acento medio-atlántico, a caballo entre sendos mundos, que ni es inglés de las islas ni es yanqui, pero que conserva toda la nasalidad en la que se expresaban los Padre Peregrinos, al calor de las viejas palabras resucitada del Webster Dictionary.
Cuando yo vivía en Londres, allá por los felices 60, yo era un fan de Alistair Cook. Su emisión salía al aire en las tranquilas tardes de domingo inglés cuando al país se le para el reloj y hay que darle el cuerda, limpiar la alfombra, lavar el coche, tomarse la enésima taza de té mientras atardece y las iglesias anglicanas de Londres recibían a los escasas fieles que acudían a las vísperas o Evening Song.
Tenía su magia el domingo inglés que era un verdadero sabath y la voz de aquel corresponsal de la BBC contribuía a la puesta en escena del English Sunday que era en aquellos tiempos toda un institución. Mi hija Helen de dos años, que ya por entonces debía de querer ser periodista, se sentaba a la máquina de escribir atraída por la magia de las Treinta Redondas Blancas. Miralas que solos están como el lagarto y la lagarta. Su madre se atareaba en la cocina y mientras daba el botón del conmutador Suzanne decía:
-My God. This bloke goes for ever
Ella le había conocido de niña cuando era un anciano. La voz siguió repicando hasta bien entrado el siglo XXI y luego su cadaver experimentaría una historia rocambolesca. Alguien lo robó para extraer a don Alistair difunto algún órgano. A lo mejor fue la voz que la tenía bastante eufónica.
En 1995 seguir escuchando a don Alistair me llena de nostalgia con aquel mundo que dejé atrás en England, que fue mi secunda patria, mi segundo país y del que a veces me siento exilado. Un exilado soy del amor, de la verdad y de la belleza. My God. Ha pasado tanto tiempo!
Qué sería de mi pequeña Helen a la que la madre me impidió visitar? Pasó tanta tiempos, cayeron tantas hojas muertas que se llevaron a tantos amigos a lo largo de infinitos otoños. He llenado tanto papel. Emborroné tantos folios. A veces con menos eco del que esperaba y de lo que creo me merezco. Pero la vida es ansí (don Pío dixit)
Sin embargo, las redondas blancas siguen ahí y de ellas yo no estoy ayuno ni a blancas. Bien las conozco y ellas me conocen a mí. Conservan el magnetismo imponderable de la eterna juventud. Y esa inocencia que han de tener las bellas para ser bien deseadas.
Son deidades a las que su castidad convirtió en Vestales del devenir. Ellas serán vírgenes perennes mientras nosotros envejecemos arqueando el lomo sobre la esteva y nos aquejan los achaques y los ataques de malencolía pues ya nada será como entonces. Ellas nos devolverán algún día el amor. Por su intercesión quizás tengamos esa resurrección sobre la que converge todo escritor el cual mediante la escritura quiere perpetuarse: resucitar, ser inmortal. El ábaco, los abecedarios, las teclas y la escala musical son entes sin tiempo. Soñemos, alma, soñemos.
Antonio Parra
6 de agosto de 1995
transcrito 8 de agosto de 2008
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jueves, 23 de septiembre de 2010
miércoles, 22 de septiembre de 2010
lunes, 13 de septiembre de 2010
A LA FLOR DEL MANZANO
Albura de la flor que nos trajo la pascua
En tanto las campanas bolean Pentecostés
Hay fuego en las lenguas y llama en las miradas
Que el poeta va lo que ni el ojo vio
Ni el oído oyó
Por esos no entienden los que tienen las orejas embotadas
Y son sopistas y mundialistas
Apoltronados detrás de su tornera
Para lanzar el dardo envenenado.
Que la flor de la manzana ciegue y confunda las flechas de su aljaba.
Presea de amor y fianza de la salvación
Sean estos tallos que el tronco brotó
En el milagro de cada primavera
Bello está el jardín
Y brota la hierba
Las lenguas de fuego maten la llama
Del veneno del ojo y la lengua que se esconde detrás de la tapia
Yo les digo que mi alma es blanca.
Ningun recoveco nnhún secreto.
I speak my mind
Y me visto del alba de esta flor de los sueños puros
Días de mayo
Canta el gallo en la quintana
El masto cuida el corral la cresta rojiza
Guardando su hembra
Y luego dirán que este gallo es un machista
Las lenguas del terrorismo feminista
Pues de maricón no tiene nada
El gallo de la quintana
Es él el amo de la baila
Indue mihi, domine ex alba vestimenta
Para que con corazón puro cante tus alabanzas
Y tenga a raya a las lenguas viciosas y malparadas
Esta flor corone las quimas
Y dentro de unos meses recogeré
Un escrinio repleto de manzanas
lunes, 23 de agosto de 2010
Woody allen tiene cara de espermatozoide
Del patetismo y papanatismo nacional hablan las crónicas. Por lo visto no es noticia que un perro muerda a un niño sino que Woody llegue a Oviedo. Películas malas hace el tío este y su humor neoyorquino que parece salir de los infiernos de Manhattan es inaguantable. Detrás de este fenómeno- genoma Woody Allen está todo el clan judío, el que apoya la secesión de Cataluña – la España de las autonomías se coció en Israel- y la entrega a Marruecos de Ceuta y Melilla. Todos los ministros de Mohamed VI son sefarditas. Los sionistas albergan un propósito revanchista: la destrucción del cristianismo y por eso traen gente. Las mafias que controlan la prostitución y la trata de negros, los del top manta que mueve millones de euros y está arruinando al pequeño comercio, actúan desde Israel. Son la mano invisible que mueve la cuna. ¿Ramadán? Hoy me voy a meter entre pecho y espalda una trapallada. ¿Woody Allen, decía usted? You fucking jew, rezaba una inscripción en la estatua que tiene el cineasta al lado de la Mallorquina. Los municipales la borraron inmediatamente. Este israelita de la nariz gorda y las gafas de negra montura le sienta al paisaje urbano de esta ciudad que fue emporio de la cristiandad visigótica como a un santo cristo dos pistolas. Y Oviedo no está para bromas, Y la verdad es que cuanto más le miro más me parece que tiene cara de espermatozoide. Amigo Gracia Noriega, ahora entiendo por que el Graciano García el de los premios príncipe de Asturias da tanto bombo, platillo y orquesta a tan insignificante personaje. Es un masón y de la cuerda. Asturianos y gallegos primos hermanos y lo mismo ha de decirse de judíos y masonzazos. Ellos se lo guisan y ellos se lo comen en este sistema que más se parece a una autocracia o judeocracia movida por los hilos invisibles del poder mediático
Del patetismo y papanatismo nacional hablan las crónicas. Por lo visto no es noticia que un perro muerda a un niño sino que Woody llegue a Oviedo. Películas malas hace el tío este y su humor neoyorquino que parece salir de los infiernos de Manhattan es inaguantable. Detrás de este fenómeno- genoma Woody Allen está todo el clan judío, el que apoya la secesión de Cataluña – la España de las autonomías se coció en Israel- y la entrega a Marruecos de Ceuta y Melilla. Todos los ministros de Mohamed VI son sefarditas. Los sionistas albergan un propósito revanchista: la destrucción del cristianismo y por eso traen gente. Las mafias que controlan la prostitución y la trata de negros, los del top manta que mueve millones de euros y está arruinando al pequeño comercio, actúan desde Israel. Son la mano invisible que mueve la cuna. ¿Ramadán? Hoy me voy a meter entre pecho y espalda una trapallada. ¿Woody Allen, decía usted? You fucking jew, rezaba una inscripción en la estatua que tiene el cineasta al lado de la Mallorquina. Los municipales la borraron inmediatamente. Este israelita de la nariz gorda y las gafas de negra montura le sienta al paisaje urbano de esta ciudad que fue emporio de la cristiandad visigótica como a un santo cristo dos pistolas. Y Oviedo no está para bromas, Y la verdad es que cuanto más le miro más me parece que tiene cara de espermatozoide. Amigo Gracia Noriega, ahora entiendo por que el Graciano García el de los premios príncipe de Asturias da tanto bombo, platillo y orquesta a tan insignificante personaje. Es un masón y de la cuerda. Asturianos y gallegos primos hermanos y lo mismo ha de decirse de judíos y masonzazos. Ellos se lo guisan y ellos se lo comen en este sistema que más se parece a una autocracia o judeocracia movida por los hilos invisibles del poder mediático
viernes, 13 de agosto de 2010
ESTE-OESTE UNA NOVELA DE LA POSGUERRA ESPAÑOLA
martes, 10 de agosto de 2010
Cada vez que veo a Jaime Jiménez-Arnau, subido a la noria de la noche de los sábados, que conduce un cara de piña con ramalazo cáscara amarga y en los que comparecen los de siempre (el del pelo blanco, la catalana rubia de bote, algunas veces Maria Antonia a la que deseo que se ponga buena. Ellos en el banco rojo; por el azul, una pepera tocinera, el ex de Ana Rosa, la querindonga del torero y que fue ex de un tenista, la hija de la reina de las mañanas, y otras culonas, con un tal Calabuch con pinta de cura del vicio y apellido de película de Berlanga etc.… y allí está Jimy como gallo del corral, el único espadachín con un poco de ingenio en medio de este guirigay de cotorras, el único que sabe contar un cuento o sacarle punta a un chascarrillo aun afuer de echarle mucha sal gorda, muy a diferencia del melifluo Peñafiel, voyeur de los altos tálamos y las testas coronadas que se gana la vida haciéndoles la pelota o destripando a los borbones) , verdad es que me repatea un poquito: el que el hijo de un gran novelista -y buen escritor él- tenga que hacer de palanganero de este burdel mediático.
Sin embargo, “carmina autum non dabunt”, ya lo decía Horacio. La literatura no da para comer. Y ahora mucho menos.
Acabo de terminar de leer una novela escrita por su padre, José Antonio Jiménez-Arnau, Este-Oeste, que perfila y matiza la psicología de los españoles de posguerra. Es una novela río que mantiene el interés del lector embebecido desde cada una de sus casi setecientas páginas. La historia es ni más menos que los vencedores perdieron la guerra y que desde el año 45 hasta hoy España ha estado en manos de los norteamericanos, los ingleses. Somos una democracia vigilada. En este contexto uno se alarma ante la rusofobia del protagonista, Mauricio, germanófilo hasta las cachas. Por otra parte, un falangista monárquico tampoco casa. ¿A qué se debe a esta falta de información de los españoles bien enterados? Acaso porque desde 1945 o tal vez mucho antes, 1898, hemos dejado de existir con voz propia y seamos una colonia norteamericana. No obstante, el general Franco, hábil estratega al que el autor-cosa rara- no menciona ni una sola vez a lo largo de las casi 700 páginas de la novela, durante un interregno de treinta años de gobiernos va a cortar ese cordón umbilical que hacía de España una nación sumisa a las veleidades y vaivenes forasteros. La mano que mece la cuna, el ojo oculto, son la judeomasonería. Franco los supo mantener a raya. Tampoco se alude a ellos de la misma forma que se obvia mencionar al Caudillo. Por las páginas de este libro se canta el gol de Zarra en Maracaná y se cuentan el millón y medio de manifestantes cuando lo de la manifestación de la Plaza de Oriente. Este es el Epos sonando como telón de fondo los titulares de los noticieros. Nuestra vida moderna se mueve a impulso de “headlines” y de primeras páginas- El Ethos es la defensa de unos valores cristianos entreverada con la moralina del sermón de algún cura que pretende fundar la iglesia de los pobres (¿el padre Soler pudo acabar como el padre Llanos, cambiando de chaqueta?) y el Eros son las putas de Chicote Si Alemania se sometió a un proceso de desnazificación, España ha tenido que pasar por las horcas caudinas de la desespañolización. En medio de esta marabunta lo prescrito ha sido el cambio de chaqueta. El autor perfila una serie de personajes bien logrados en el que revive o recrea un mundo como es de don Luís Portillo, el suegro del protagonista Mauricio, un lerrouxista putañero, habitual de la barra de Chicote y del Abra, que cree en la democracia parlamentaria, un falangista Ercilla que héroe de sus ideales sucumbe en la estepa rusa, y otro falangista, inasequible al desaliento que luce un yugo en las fechas en la pechera pero a medida que se acercan los rusos y los americanos a Berlín se arranca este distintivo y va a firmar el pésame de condolencia a la embajada norteamericana cuando muere Roosevelt. Luego está Rosi la chica de alterne a la que pervierte un brigadista muerto en Brunete que de convierte la protagonista o antagonista de Mauricio el cual luego se demuestra que no es tan incorruptible excepto en su amor y respeto hacia la Rosi.
La música de fondo de esta gran epopeya es la cantinela de que hay que sobrevivir en medio del río revuelto. Camaleón que se duerme se lo lleva la corriente. “Todo el mundo había dado la vuelta. Incluso en España donde los trajes y las ideas se habían vuelto del revés” .
El estilo garboso, sencillo, es del, con un dialogo magistral que colocan al autor entre los grandes de la novela española de la segunda mitad del siglo veinte.
Es una injusticia aparte de un desacato a la verdad ningunear, preterir, a autores de la categoría del padre de Jaime Jiménez Arnau a quien como digo me repatea verle de animador o palanganero de esa prensa de la entrepierna que se ha convertido en una incesante lavativa una tarántula martilleando nuestras meninges y como ya hablé largo y tendido de este puterío nacional que se ha convertido más que en tema en monotema quisiera echarlo lejos de mí pero no ha quedado otra salida para los vencidos. O te conviertes en palanganero del sistema o haces mutis por el foro. Una magna caterva de silenciosos incomprendidos metecos en su propio país tiene que ir lampando como Jimy porque hay que subirse al carro de los vencedores so pena de no ser arrastrados y caminar atrás con la argolla al cuello del incomprendido. Esta gran novela con atisbo y reclamos profetas parece intuirlo retratando unos seres vacíos y oportunistas acomodaticios ficticios y facticios.
¿Quién traerá la monarquía parlamentaria? Los mismos que vestían camisa azul y saludaban a la romana brazo en alto. Es la derecha del dinero y los negocios turbios magistrados y periodistas diplomáticos exportadores de wólfram que se sientan en las mesas del Chicote y dejan que les soplen los cuartos las Lamias y las Floras que hacen la barra. El tema es viejo como el mundo y cuando el autor describe lías ardidas de estas barbianas de lujo creí rememorar párrafos de fray Antonio de Guevara en sus epístolas familiares “hermosas de rostros, altas de cuerpos, anchas de frente, gruesas de pechos, cortas de cintura, largas de manos, pulidas en el vestir, amorosas en el mirar, y muy cautas en el pedir” que casualidad la mayor parte de las putas de aquel Madrid eran vascas hijas de familia y educadas por monjas.
Don Luís Portillo el propietario de unos grandes almacenes le pone un piso a su querida. Uno se cruza con bares que huelen a marisco y cañitas de cerveza, que se suben en taxis de gasógenos y veranean en San Sebastián. Buenos padres de familia que tienen a sus Blancas amarradas en blanca y se divierten con las muchachas de vida alegre. O con curas evangélicos que fundan un conventillo para pobres en la calle Jaén de Cuatro Caminos. Todos ellos aprenden a sobrevivir a nadar y guardar la ropa y a distinguir entre un ladrido y un mordisco. Lo que es impepinable es que desde Hayes y Ernesto Bevin al régimen franquista lo toleraron si no lo apoyaron los anglos. La habilidad de Franco fue salvar los muebles y jugar con la monarquía de don Juan al ratón y el gato. La monarquía fue una imposición de los vencedores. Estaba claro desde el principio que aquel sistema estaba condenado a morir y con su muerte se vienen abajo los ideales por los cuales habían perdido la vida más de un millón de jóvenes en nuestra guerra civil. Los sucesivos capítulos del libro son un retrato de las pequeñas vidas de estos seres egoístas acostumbrados a tener siempre la sartén por el mango.
No eran los falangistas de Hedilla ni de Onésimo sino una multitud confusa de españoles no del todo bien informados o que no querían saber. Que querían vivir. La obsesión de esta derecha era Rusia pero lo que desconocían es que el marxismo era un sistema de quita y pon que les vino a las democracias occidentales para probar sus armas en el campo de batalla y hacer negocios. Yo creo que estaban equivocados porque Rusia no era culpable o tan culpable como algunos creyeron. Y muchos de estos falangistas ignoraban la causa por qué murió Calvo Costéelo.
No murió por oponerse a Lenin -. La Pasionaria no era más que un scapegoat- sino por oponerse a entregar al capitalismo de Londres el control de los monopolios de hidrocarburos. La mano peluda o la mano negra hizo que las apariencias fueran otras. Uno saca la conclusión después de la lectura de Este-Oeste de que una buena novela es aquella que nos hace reflexionar nos embebece e infunde alientos de vida copiando la realidad vista desde el ojo triangular del novelista omnisciente que crea mundos y nos anima a ser comprensivos tal vez mejores. Una buena novela es aquella en la que se reflejan como en un espejo los valores o virtudes y carencias de una sociedad.
Más allá de lo que consideramos permanente no hay nada definitivo. La línea separadora de las luces y las luces es tenue y el bien y el mal se entreveran. La acción de este relato río de la posguerra española cruza por los territorios comanches del estraperlo, las carestías aunque aquí todos los personajes son ricos y no viven en escuálidos cuartos realquilados con derecho a cocina sino en casas de calles nobles como Lagasca 67B, luego se entrega a los meandros del ambiente selecto de los empresarios que hacen negocios y salta por las cascadas y torrentes de los miedos del buen burgués que odia pensar o decir con Bulgakov en su “Guardia Blanca” que han ganado los americanos pero Jiménez Arnau ve venir la clausura de una era con la muerte de España y su secesión en autonomías.
Pero buen observador apunta cómo Mauricio se siente odioso- se caminaba ya en los cincuenta hacia el hedonismo de nuestros días- por haber echado barriga cerca de los cuarenta años y es que la vida moderna va a tener un fuerte componente sensualista que dejará fuera de combate a los gordos los feos los viejos.
Los moradores de Lagasca 67B en este folletón se dan cuenta de estar viviendo en un mundo banal de fuertes convencionalismos pero que siga la bola.
Hay que decir las cosas correctas y pensar como piensa el Amo para no acabar en las tinieblas exteriores. Por lo demás en el libro hay muchas bodas y funerales en Santa Bárbara. Uno se cruza la mirada con las chicas topolino. El novelista que fue diplomático describe las interioridades de esta carrera donde confluye el ambiente de las oposiciones, el respeto al escalafón. Sin embargo, si España se acaba o se fractura muchos españolitos van a tener que ir olvidando una prestamera un carguito en la administración publica. Tambien tenía buen ojo para el conocimiento femenino. Algunas de las mujeres se rinden al chulo al que las maltrata y las saquea y se portan de un modo cruel con sus pretendientes honestos.
En esto del amor las buenas personas no tienen sitio y ocuparan convirtiéndose simplemente en un buen hombre. Pero ya lo decía Tirso en el Condenado por desconfiado “Eres mujer mala que quieres y regalas al que mal te trata” presenta un cuadro de costumbres y él lector que no puede soltar el libro de las manos va observando cómo se cierra un círculo.
Casi nos atreveríamos a calificar esta novela publicada en el año 61 y que se une a otros éxitos de J.A.G-Arnau como “De pantalón corto”, obra autobiografiíta y no sé si esta lo es cómo un tour de force, una obra maestra a la cual le sobran doscientas páginas. Por desgracia ¡ay! hoy prima lo contrario a la excelencia: la literatura basura, la degeneración sicalíptica o coprológica y por eso ahí tenemos a Jimy que no deja de parecerme un tio listo haciendo de bufón en los programas rosa bailándoles el agua a putas y folclóricas o jaleando los pelos del Cara de Piña el conductor de la Noria. Aun así sigue contando los mejores chistes y teniendo las mejores ocurrencias aunque algún día alguien podría sentarles las costuras por decir esas burradas que dice de los Franco. Esta enemiga hacia don Francisco con cuya nieta matrimonió el bueno de Jimy debe de venirle de familia porque su padre diplomático, articulista del ABC y guionista de cine, elide mención alguna al General en este “Este-Oeste” que a mí me ha dado que pensar bastante.
Por lo visto es una consigna y explotar el morbo de los Franco da dinero aunque sea poco ético. Yo jamás me prostituiría como lo hace G.A júnior pero parece ser que esa es la única salida actualmente tambien para un escritor. Pero me asusta el que su hijo pudiera llegar a alcanzar el título de palanganero en el tiovivo del Cara de Piña. La otra alternativa sería el exilio interior para nosotros por mandato de esta infausta monarquía que nos desgobierna – hasta Marruecos nos chotea- por cuya restauración lucharían mi padre y el de Jimy y tantos españoles de los dos bandos dejarían la piel en las dehesas de la Piel de Toro. Tengo la impresión de que aquellos idealistas no sabían por qué morían. Yo sí. El enemigo no era el que ellos creían. Y es que las cosas con frecuencia no son lo que parecen.
martes, 10 de agosto de 2010
Cada vez que veo a Jaime Jiménez-Arnau, subido a la noria de la noche de los sábados, que conduce un cara de piña con ramalazo cáscara amarga y en los que comparecen los de siempre (el del pelo blanco, la catalana rubia de bote, algunas veces Maria Antonia a la que deseo que se ponga buena. Ellos en el banco rojo; por el azul, una pepera tocinera, el ex de Ana Rosa, la querindonga del torero y que fue ex de un tenista, la hija de la reina de las mañanas, y otras culonas, con un tal Calabuch con pinta de cura del vicio y apellido de película de Berlanga etc.… y allí está Jimy como gallo del corral, el único espadachín con un poco de ingenio en medio de este guirigay de cotorras, el único que sabe contar un cuento o sacarle punta a un chascarrillo aun afuer de echarle mucha sal gorda, muy a diferencia del melifluo Peñafiel, voyeur de los altos tálamos y las testas coronadas que se gana la vida haciéndoles la pelota o destripando a los borbones) , verdad es que me repatea un poquito: el que el hijo de un gran novelista -y buen escritor él- tenga que hacer de palanganero de este burdel mediático.
Sin embargo, “carmina autum non dabunt”, ya lo decía Horacio. La literatura no da para comer. Y ahora mucho menos.
Acabo de terminar de leer una novela escrita por su padre, José Antonio Jiménez-Arnau, Este-Oeste, que perfila y matiza la psicología de los españoles de posguerra. Es una novela río que mantiene el interés del lector embebecido desde cada una de sus casi setecientas páginas. La historia es ni más menos que los vencedores perdieron la guerra y que desde el año 45 hasta hoy España ha estado en manos de los norteamericanos, los ingleses. Somos una democracia vigilada. En este contexto uno se alarma ante la rusofobia del protagonista, Mauricio, germanófilo hasta las cachas. Por otra parte, un falangista monárquico tampoco casa. ¿A qué se debe a esta falta de información de los españoles bien enterados? Acaso porque desde 1945 o tal vez mucho antes, 1898, hemos dejado de existir con voz propia y seamos una colonia norteamericana. No obstante, el general Franco, hábil estratega al que el autor-cosa rara- no menciona ni una sola vez a lo largo de las casi 700 páginas de la novela, durante un interregno de treinta años de gobiernos va a cortar ese cordón umbilical que hacía de España una nación sumisa a las veleidades y vaivenes forasteros. La mano que mece la cuna, el ojo oculto, son la judeomasonería. Franco los supo mantener a raya. Tampoco se alude a ellos de la misma forma que se obvia mencionar al Caudillo. Por las páginas de este libro se canta el gol de Zarra en Maracaná y se cuentan el millón y medio de manifestantes cuando lo de la manifestación de la Plaza de Oriente. Este es el Epos sonando como telón de fondo los titulares de los noticieros. Nuestra vida moderna se mueve a impulso de “headlines” y de primeras páginas- El Ethos es la defensa de unos valores cristianos entreverada con la moralina del sermón de algún cura que pretende fundar la iglesia de los pobres (¿el padre Soler pudo acabar como el padre Llanos, cambiando de chaqueta?) y el Eros son las putas de Chicote Si Alemania se sometió a un proceso de desnazificación, España ha tenido que pasar por las horcas caudinas de la desespañolización. En medio de esta marabunta lo prescrito ha sido el cambio de chaqueta. El autor perfila una serie de personajes bien logrados en el que revive o recrea un mundo como es de don Luís Portillo, el suegro del protagonista Mauricio, un lerrouxista putañero, habitual de la barra de Chicote y del Abra, que cree en la democracia parlamentaria, un falangista Ercilla que héroe de sus ideales sucumbe en la estepa rusa, y otro falangista, inasequible al desaliento que luce un yugo en las fechas en la pechera pero a medida que se acercan los rusos y los americanos a Berlín se arranca este distintivo y va a firmar el pésame de condolencia a la embajada norteamericana cuando muere Roosevelt. Luego está Rosi la chica de alterne a la que pervierte un brigadista muerto en Brunete que de convierte la protagonista o antagonista de Mauricio el cual luego se demuestra que no es tan incorruptible excepto en su amor y respeto hacia la Rosi.
La música de fondo de esta gran epopeya es la cantinela de que hay que sobrevivir en medio del río revuelto. Camaleón que se duerme se lo lleva la corriente. “Todo el mundo había dado la vuelta. Incluso en España donde los trajes y las ideas se habían vuelto del revés” .
El estilo garboso, sencillo, es del, con un dialogo magistral que colocan al autor entre los grandes de la novela española de la segunda mitad del siglo veinte.
Es una injusticia aparte de un desacato a la verdad ningunear, preterir, a autores de la categoría del padre de Jaime Jiménez Arnau a quien como digo me repatea verle de animador o palanganero de esa prensa de la entrepierna que se ha convertido en una incesante lavativa una tarántula martilleando nuestras meninges y como ya hablé largo y tendido de este puterío nacional que se ha convertido más que en tema en monotema quisiera echarlo lejos de mí pero no ha quedado otra salida para los vencidos. O te conviertes en palanganero del sistema o haces mutis por el foro. Una magna caterva de silenciosos incomprendidos metecos en su propio país tiene que ir lampando como Jimy porque hay que subirse al carro de los vencedores so pena de no ser arrastrados y caminar atrás con la argolla al cuello del incomprendido. Esta gran novela con atisbo y reclamos profetas parece intuirlo retratando unos seres vacíos y oportunistas acomodaticios ficticios y facticios.
¿Quién traerá la monarquía parlamentaria? Los mismos que vestían camisa azul y saludaban a la romana brazo en alto. Es la derecha del dinero y los negocios turbios magistrados y periodistas diplomáticos exportadores de wólfram que se sientan en las mesas del Chicote y dejan que les soplen los cuartos las Lamias y las Floras que hacen la barra. El tema es viejo como el mundo y cuando el autor describe lías ardidas de estas barbianas de lujo creí rememorar párrafos de fray Antonio de Guevara en sus epístolas familiares “hermosas de rostros, altas de cuerpos, anchas de frente, gruesas de pechos, cortas de cintura, largas de manos, pulidas en el vestir, amorosas en el mirar, y muy cautas en el pedir” que casualidad la mayor parte de las putas de aquel Madrid eran vascas hijas de familia y educadas por monjas.
Don Luís Portillo el propietario de unos grandes almacenes le pone un piso a su querida. Uno se cruza con bares que huelen a marisco y cañitas de cerveza, que se suben en taxis de gasógenos y veranean en San Sebastián. Buenos padres de familia que tienen a sus Blancas amarradas en blanca y se divierten con las muchachas de vida alegre. O con curas evangélicos que fundan un conventillo para pobres en la calle Jaén de Cuatro Caminos. Todos ellos aprenden a sobrevivir a nadar y guardar la ropa y a distinguir entre un ladrido y un mordisco. Lo que es impepinable es que desde Hayes y Ernesto Bevin al régimen franquista lo toleraron si no lo apoyaron los anglos. La habilidad de Franco fue salvar los muebles y jugar con la monarquía de don Juan al ratón y el gato. La monarquía fue una imposición de los vencedores. Estaba claro desde el principio que aquel sistema estaba condenado a morir y con su muerte se vienen abajo los ideales por los cuales habían perdido la vida más de un millón de jóvenes en nuestra guerra civil. Los sucesivos capítulos del libro son un retrato de las pequeñas vidas de estos seres egoístas acostumbrados a tener siempre la sartén por el mango.
No eran los falangistas de Hedilla ni de Onésimo sino una multitud confusa de españoles no del todo bien informados o que no querían saber. Que querían vivir. La obsesión de esta derecha era Rusia pero lo que desconocían es que el marxismo era un sistema de quita y pon que les vino a las democracias occidentales para probar sus armas en el campo de batalla y hacer negocios. Yo creo que estaban equivocados porque Rusia no era culpable o tan culpable como algunos creyeron. Y muchos de estos falangistas ignoraban la causa por qué murió Calvo Costéelo.
No murió por oponerse a Lenin -. La Pasionaria no era más que un scapegoat- sino por oponerse a entregar al capitalismo de Londres el control de los monopolios de hidrocarburos. La mano peluda o la mano negra hizo que las apariencias fueran otras. Uno saca la conclusión después de la lectura de Este-Oeste de que una buena novela es aquella que nos hace reflexionar nos embebece e infunde alientos de vida copiando la realidad vista desde el ojo triangular del novelista omnisciente que crea mundos y nos anima a ser comprensivos tal vez mejores. Una buena novela es aquella en la que se reflejan como en un espejo los valores o virtudes y carencias de una sociedad.
Más allá de lo que consideramos permanente no hay nada definitivo. La línea separadora de las luces y las luces es tenue y el bien y el mal se entreveran. La acción de este relato río de la posguerra española cruza por los territorios comanches del estraperlo, las carestías aunque aquí todos los personajes son ricos y no viven en escuálidos cuartos realquilados con derecho a cocina sino en casas de calles nobles como Lagasca 67B, luego se entrega a los meandros del ambiente selecto de los empresarios que hacen negocios y salta por las cascadas y torrentes de los miedos del buen burgués que odia pensar o decir con Bulgakov en su “Guardia Blanca” que han ganado los americanos pero Jiménez Arnau ve venir la clausura de una era con la muerte de España y su secesión en autonomías.
Pero buen observador apunta cómo Mauricio se siente odioso- se caminaba ya en los cincuenta hacia el hedonismo de nuestros días- por haber echado barriga cerca de los cuarenta años y es que la vida moderna va a tener un fuerte componente sensualista que dejará fuera de combate a los gordos los feos los viejos.
Los moradores de Lagasca 67B en este folletón se dan cuenta de estar viviendo en un mundo banal de fuertes convencionalismos pero que siga la bola.
Hay que decir las cosas correctas y pensar como piensa el Amo para no acabar en las tinieblas exteriores. Por lo demás en el libro hay muchas bodas y funerales en Santa Bárbara. Uno se cruza la mirada con las chicas topolino. El novelista que fue diplomático describe las interioridades de esta carrera donde confluye el ambiente de las oposiciones, el respeto al escalafón. Sin embargo, si España se acaba o se fractura muchos españolitos van a tener que ir olvidando una prestamera un carguito en la administración publica. Tambien tenía buen ojo para el conocimiento femenino. Algunas de las mujeres se rinden al chulo al que las maltrata y las saquea y se portan de un modo cruel con sus pretendientes honestos.
En esto del amor las buenas personas no tienen sitio y ocuparan convirtiéndose simplemente en un buen hombre. Pero ya lo decía Tirso en el Condenado por desconfiado “Eres mujer mala que quieres y regalas al que mal te trata” presenta un cuadro de costumbres y él lector que no puede soltar el libro de las manos va observando cómo se cierra un círculo.
Casi nos atreveríamos a calificar esta novela publicada en el año 61 y que se une a otros éxitos de J.A.G-Arnau como “De pantalón corto”, obra autobiografiíta y no sé si esta lo es cómo un tour de force, una obra maestra a la cual le sobran doscientas páginas. Por desgracia ¡ay! hoy prima lo contrario a la excelencia: la literatura basura, la degeneración sicalíptica o coprológica y por eso ahí tenemos a Jimy que no deja de parecerme un tio listo haciendo de bufón en los programas rosa bailándoles el agua a putas y folclóricas o jaleando los pelos del Cara de Piña el conductor de la Noria. Aun así sigue contando los mejores chistes y teniendo las mejores ocurrencias aunque algún día alguien podría sentarles las costuras por decir esas burradas que dice de los Franco. Esta enemiga hacia don Francisco con cuya nieta matrimonió el bueno de Jimy debe de venirle de familia porque su padre diplomático, articulista del ABC y guionista de cine, elide mención alguna al General en este “Este-Oeste” que a mí me ha dado que pensar bastante.
Por lo visto es una consigna y explotar el morbo de los Franco da dinero aunque sea poco ético. Yo jamás me prostituiría como lo hace G.A júnior pero parece ser que esa es la única salida actualmente tambien para un escritor. Pero me asusta el que su hijo pudiera llegar a alcanzar el título de palanganero en el tiovivo del Cara de Piña. La otra alternativa sería el exilio interior para nosotros por mandato de esta infausta monarquía que nos desgobierna – hasta Marruecos nos chotea- por cuya restauración lucharían mi padre y el de Jimy y tantos españoles de los dos bandos dejarían la piel en las dehesas de la Piel de Toro. Tengo la impresión de que aquellos idealistas no sabían por qué morían. Yo sí. El enemigo no era el que ellos creían. Y es que las cosas con frecuencia no son lo que parecen.
sábado, 7 de agosto de 2010
OGOÑI. FUEGO. FUEGO. ARDE MOSCÚ. LOS INCENDIOS SON PROVOCADOS.
Estoy escuchando oficiar misa al llorado patriarca de Moscú, Alexei II de feliz memoria y mientras pronuncia las palabras más enigmáticas y salvíficas del kerigma cristiano “este es mi cuerpo que por vosotros será entregado”, escucho la palabra fuego en todas las radios y emisoras occidentales. Esto parece una conjura de todos los veranos. Moscú arde por los cuatro costados. ¿Será verdad? Los enemigos eternos asoman la incombustible oreja. Son los de siempre. Los propagandistas del NYT y de la Sienene, los pérfidos y malignos ingleses que miran que son malos y tiene mala leche, que ya lo dijo Shakespeare, que los conocía: tras sus rubicundos rostros angélicos ocultan el hollín del pateta. Y, por supuesto, a la lista son de añadir aquellos a los que señala con el dedo el general Krasnoff en sus libros sobre las causas y agentes de la revolución bolchevique. De los soviet del politburó menos Vladimir Illich Ulianov que actuó por venganza a causa de la muerte de su hermano por los “blancos” y de Stalin que era hijo de un zapatero georgiano cristiano viejo que quiso ser pope, todos eran de la cuerda: Kameneff, Beria, Trotsky, Livitnoff, Kirov, Popov, Malenkov, Molotov y Zinoviev el que quitó la palabra dios del idioma ruso ¡que iluso!…
En Madrid soltero por Agosto y con dinero, Baden-Baden. En Rusia, sin embargo, en agosto siempre tiene que pasar algo (el asalto al parlamento, el hundimiento de un submarino nuclear, un ataque terrorista) y los bustos parlantes, las bellas sibilas mediáticas, no se les corre el rimel de sus bien maquillados y adobados palmitos (tienen el alma negra como los diablos hamletianos), y, pregoneras de tanto sufrimiento, que recitan retahílas de muerte y destrucción, sin alterar un músculo, parecen pronunciar la palabra Rusia con asco, al albur de las instrucciones recibidas. Practican una lectoría de la infamia, la mentira florida como una perenne primavera en sus labios. Es mosqueante, la verdad, treta semejante que huele a puchero enfermo y a cuerno quemado porque de judíos se trata.
Debe formar parte de la guerra psicológica – estamos en guerra por si ustedes no lo sabían- que han declarado a Rusia los judíos, pero que tengan cuidado que está a punto de saltar a la palestra las escuadras de las legiones Vespasianas y no van a dejar piedra sobre piedra de Elia Capitolina. Y mientras el patriarca entona el misereatur y luego hace la devoción a la Virgen María nuestros jornalistos cuentan y no acaban lo de bienvenido Mister Marshall- wellcome lady Obama.
La verdad es que la negra no está mal y es una bella embajadora de su país que nos hace olvidar los dientes postizos y los pantalones el culo remendado de estrellas y barras del Tío Sam, el cual anda a grandes zancadas por todo el globo terráqueo, escoltado por una nube mefítica de mal olor, tirándose pedos que son pecados mortales en forma de golfos enteros tiznados de chapapote, bosques talados y mucha tierra quemada, o disparos de misil que matan a mucha gente.
Tal vez lo mejor de Norteamérica sean los negros y esta señora Obama enmienda la pagina a aquellas primeras damas que eran bochornosas: doña Pat Nixon que acabó aferrada a la botella después de lo de Watergate, la Lady Bird de Lindon Johnson, una southern belle pero que dormía con el colt bajo la almohada, la mujer de Roosevelt, fea como un demonio, que bailaba al corro sobre el uniforme de un pobre soldado alemán en Times Square, o Rosalyn Carter que no dejaba de ser una paleta de Georgia a la que la Casa Blanca le venía Grande. La Obamesa, ¡oh qué dientes más bien puestos!, es una brisa de aire fresco, de sonrisas y de juventud en los sobrecargados pasillos del Pentágono infestado de nazis-askenazis, y de warmongers, gente muy pagada de su poder y de su malicia. Bienvenida a Marbella la bella, missus, y usted sí que es guapa.
Pero mira lo que andan diciendo los ingleses de usted que qué es eso de ir a pasar las vacaciones en la Costa del Crime, el Telegraph dixit. Todavía no se ha debido de morir aquel maldito Harold Sieve que nos traía por la calle de la amargura a los españoles, al iguales que el Harry Debelius, un jodío inglés que nos las tiraba con bala.
Es posible que sea así que la costa del sol sea un revolcadero de los dineros negros, de las plusvalías y enjuagues de la venta de armas, de la prostitución, los alijos de droga, de los mil y un cambalaches del capitalismo que atraca sus yates de lujo en el pantalón de la famosa villa malagueña popularizada por el tristemente famoso Jesús Gil y por James Bond.
Cabe recordar que Gibraltar, que aparte de un polvorín nuclear es el buque nodriza de toda la corrupción subyacente a la Costa del Sol, está a unos pocos kilómetros. El dato lo obvia el periódico londinense. Saben barrer para casa y arrimar el agua a su molino. Copiaron todas las técnicas de propaganda que les enseñaron tanto Lord How-How como Goebbels. Y de ahí sus descargas- por el momento mediáticas- contra Putin.
Pero a propósito hoy cuando vino la mujer del presidente USA rodeada de un ejercito de gorilas y de guardaespaldas y se dirige por lo visto a darle el abrazo de la muerte al Rubio y a toda su jarca, que ya le quedan dos telediarios como aquel que dice, y va a morir por donde más fumado había… sus habanos, y se exhuman huesos de fusilados en Aranda, memoria histórica de unos huesos que si no fueron santos merecen toda la alharaca de la publicidad, mientras otros huesos de los “otros” son echados al olvido, Don Garzón que por cierto también es un jodío juez- and he is biased- no puede mostrarse más parcial al respecto. Sólo le interesan por lo visto los asesinados por unos pero los caídos del otro bando no tendrán bula en este entierro. Y a esto lo llaman justicia el amigo ZP y toda su patulea que en comandita ha hecho una verdadera razzia o una pecorea salvaje de la verdad de lo ocurrido en España en los últimos tiempos.
Y a todo esto ha saltado a mis manos un texto de una novela rusa que viene al pelo para ambientar esta atmósfera de zanjas y de pelotones de fusilamiento en la que nos movemos.
“¿Oye, usted, María? ¡Están fusilando a nuestros hermanos! Y, entretanto, hemos de callar, porque, si no, nos fusilan a nosotros. Hay muchos que se han vendido a las aves de rapiña y se salvan así de la muerte. Los mejores de los nuestros han caído ya. Traicionados. Pero aun somos fuertes aunque seamos pocos. Lucharé contra ellos. No los temo. Oye. Están fusilando al segundo turno y dando a los caídos el tiro de gracia… no os regocijéis, aves de rapiña. Os queda poco tiempo de oprimir a la patria rusa. Ignoráis que hay hombres resueltos a todo, que no estan en vuestro poder. Y ellos se alzarán contra vosotros, miserables que oprimís a Rusia desde el Kremlin. ¡Temblad! Lo que habéis conseguido tan fácilmente se os va a escapar de las manos. Tenéis miedo y por eso os ocultáis entre los muros del Kremlin rodeados de pretorianos y guardaespaldas con ametralladoras y a la bayoneta calada. Pero quien os defiende vamos a ver: chinos, letones, mercenarios backhires. Todos los rusos están en la cárcel y vosotros domináis mediante el terror y habéis traído extranjeros. Los habéis sacado de sus madrigueras y escondrijos. Y ahora no hay Dios, ni templos, ni leyes, ni patria, ni familia, ni tribunales imparciales. Ahora sólo se castiga como acto criminal el amo a la patria. Pero aguardad: un hombre marcha contra vosotros, carroña humana y llegará el día en que vestido de mariscal dirija contra vosotros el cañón de su arma. Fuera. Paso a los verdaderos rusos a los que avanzan levantando la cruz en los labios estas palabras:
- Xristos Voskrése
- Verdaderamente ha resucitado – contestaron los que portaban la cruz como si fuera un arma”. (Lev URVANZEV; “Mañana” (Ytro) Moscú 1942.
Estas palabras suenan como una profecía que fue materializada en 1989 con el fin de la URSS pero no con el fin del Comunismo que esclavizó a Rusia y ahora, muy vivo, se mueve por otros parámetros. Es el grito agónico de “ Ogoñi…Ogoñi” que tambien escuchó Andreiev otro autor cuya obra versa sobre este periodo revolucionario una de cuyas características, según nos dice en su obra maestra Sacha Yugolev, que tiene que ver con la crucifixión de Yugoslavia, es el afán incendiario. Rusia también ardió por los cuatro costados en el verano caliente de 1917. Los incendios, como ahora, estaban provocados por especuladores capitalistas y por agentes de la maldad. Ogoñi. Clamor de angustia. El monje negro pasea por el jardín de un claustro románico. Las arpías y aves monstruosas de los capiteles románicos cruzan los pescuezos y se pican las patas hasta hacerse sangre. San Miguel en un altar trae en la mano una bascula para pesar las almas y hay quien estiba mientras tanto información por la Red. Gran parte de ese material, tábido por la manipulación de los Tabelión, que no para, no es más que falsa moneda. Un señuelo. Una trampa. En ese pozo caen no pocos incautos. Coacervar noticias capciosas e informaciones entreveradas es un venal ejercicio de esta época empapada de falsos testimonios y empopada por los vientos de Queronte el funesto nauta que no sabemos a donde nos llevará. Dicen que de los escarmentados se hacen los arteros pero aquí el personal se repite más que la cebolla, tropieza dos veces en la misma piedra, cae en los mismos pecados, el más grave el de la presunción, y propala infundios ad nauseam. No paran esas lenguas boquimuelles de las reinas de los informativos que a mí me recuerdan precisamente las arpías entrechocando sus pescuezos juntando noticias. Dicen que la mejor palabra es aquella que no se ha dicho todavía pero éstas hablan como cotorras. Garlan a todas oras. Su verborrea es como una diarrea mental que todo lo distorsiona y todo cuanto toca convierte en polución.
-Chist. Guardemos silencio en el templo de Volupia.
Tales recomendaciones caen en el vacío. Esas ¿nunca callarán? Parlan y parlan hasta en catalán y encima ganan dinero.
-Cierra el pico, Cleopatra.
La chica de los informativos nunca cambiaba de luk. Más de veinte años se presentaba con su pelo a lo Cleopatra ante la pequeña pantalla y su boca, menuda es la tía, como las fauces de una gárgola. Es la boca de un fuego que nos consume. Abominables y abominarios tiempos con mucho buldero lanza en ristre, y mucho inepto como ese nuevo cantamañanas al que llaman Ramón Pi que gasta tirantes y sabe medir la distancia de pi, que se desayunan un sapo cada mañana y a la noche a la cena les ponen aceite de ricino y les sellan los labios mediante una alguaza. Cuando vayas al baño, no te sorprendas de que has cagado una bisagra. Malas lenguas que dicen lo que no pasa, no dicen una verdad entera, sólo medias verdades. Puro enlabio y mayor engaño. Cálidas noches de agosto. Presenciamos las lágrimas de san Lorenzo desde la ventana.
-Arson. Ogoñi-proclaman las estrellas incendiarias.
Por lo que parece en el firmamento tambien andan de batalla. Otra vez Lucifer y Luzbel. Bienvenido Mister Marshall y farewell, Michele, ma belle. Sont les mots qui vont tres bien ensemble.
Hoy los Beatles al despedir a la bella dama tambien cantaban. Ni que decir tiene que la negra es guapa. Big Bones. Y norteamericana. Lo malo de ese país-no nos engañemos- es que si los republicanos declaran la guerra son los demócratas los que tiran las bombas. A mí siempre me dio un poco de pena Obama. Un inocente en medio de tanto malvado. Daniel en el foso de los leones. Dicen que los fuegos que asuelan a los rusos son todos provocados.
07/08/2010
Estoy escuchando oficiar misa al llorado patriarca de Moscú, Alexei II de feliz memoria y mientras pronuncia las palabras más enigmáticas y salvíficas del kerigma cristiano “este es mi cuerpo que por vosotros será entregado”, escucho la palabra fuego en todas las radios y emisoras occidentales. Esto parece una conjura de todos los veranos. Moscú arde por los cuatro costados. ¿Será verdad? Los enemigos eternos asoman la incombustible oreja. Son los de siempre. Los propagandistas del NYT y de la Sienene, los pérfidos y malignos ingleses que miran que son malos y tiene mala leche, que ya lo dijo Shakespeare, que los conocía: tras sus rubicundos rostros angélicos ocultan el hollín del pateta. Y, por supuesto, a la lista son de añadir aquellos a los que señala con el dedo el general Krasnoff en sus libros sobre las causas y agentes de la revolución bolchevique. De los soviet del politburó menos Vladimir Illich Ulianov que actuó por venganza a causa de la muerte de su hermano por los “blancos” y de Stalin que era hijo de un zapatero georgiano cristiano viejo que quiso ser pope, todos eran de la cuerda: Kameneff, Beria, Trotsky, Livitnoff, Kirov, Popov, Malenkov, Molotov y Zinoviev el que quitó la palabra dios del idioma ruso ¡que iluso!…
En Madrid soltero por Agosto y con dinero, Baden-Baden. En Rusia, sin embargo, en agosto siempre tiene que pasar algo (el asalto al parlamento, el hundimiento de un submarino nuclear, un ataque terrorista) y los bustos parlantes, las bellas sibilas mediáticas, no se les corre el rimel de sus bien maquillados y adobados palmitos (tienen el alma negra como los diablos hamletianos), y, pregoneras de tanto sufrimiento, que recitan retahílas de muerte y destrucción, sin alterar un músculo, parecen pronunciar la palabra Rusia con asco, al albur de las instrucciones recibidas. Practican una lectoría de la infamia, la mentira florida como una perenne primavera en sus labios. Es mosqueante, la verdad, treta semejante que huele a puchero enfermo y a cuerno quemado porque de judíos se trata.
Debe formar parte de la guerra psicológica – estamos en guerra por si ustedes no lo sabían- que han declarado a Rusia los judíos, pero que tengan cuidado que está a punto de saltar a la palestra las escuadras de las legiones Vespasianas y no van a dejar piedra sobre piedra de Elia Capitolina. Y mientras el patriarca entona el misereatur y luego hace la devoción a la Virgen María nuestros jornalistos cuentan y no acaban lo de bienvenido Mister Marshall- wellcome lady Obama.
La verdad es que la negra no está mal y es una bella embajadora de su país que nos hace olvidar los dientes postizos y los pantalones el culo remendado de estrellas y barras del Tío Sam, el cual anda a grandes zancadas por todo el globo terráqueo, escoltado por una nube mefítica de mal olor, tirándose pedos que son pecados mortales en forma de golfos enteros tiznados de chapapote, bosques talados y mucha tierra quemada, o disparos de misil que matan a mucha gente.
Tal vez lo mejor de Norteamérica sean los negros y esta señora Obama enmienda la pagina a aquellas primeras damas que eran bochornosas: doña Pat Nixon que acabó aferrada a la botella después de lo de Watergate, la Lady Bird de Lindon Johnson, una southern belle pero que dormía con el colt bajo la almohada, la mujer de Roosevelt, fea como un demonio, que bailaba al corro sobre el uniforme de un pobre soldado alemán en Times Square, o Rosalyn Carter que no dejaba de ser una paleta de Georgia a la que la Casa Blanca le venía Grande. La Obamesa, ¡oh qué dientes más bien puestos!, es una brisa de aire fresco, de sonrisas y de juventud en los sobrecargados pasillos del Pentágono infestado de nazis-askenazis, y de warmongers, gente muy pagada de su poder y de su malicia. Bienvenida a Marbella la bella, missus, y usted sí que es guapa.
Pero mira lo que andan diciendo los ingleses de usted que qué es eso de ir a pasar las vacaciones en la Costa del Crime, el Telegraph dixit. Todavía no se ha debido de morir aquel maldito Harold Sieve que nos traía por la calle de la amargura a los españoles, al iguales que el Harry Debelius, un jodío inglés que nos las tiraba con bala.
Es posible que sea así que la costa del sol sea un revolcadero de los dineros negros, de las plusvalías y enjuagues de la venta de armas, de la prostitución, los alijos de droga, de los mil y un cambalaches del capitalismo que atraca sus yates de lujo en el pantalón de la famosa villa malagueña popularizada por el tristemente famoso Jesús Gil y por James Bond.
Cabe recordar que Gibraltar, que aparte de un polvorín nuclear es el buque nodriza de toda la corrupción subyacente a la Costa del Sol, está a unos pocos kilómetros. El dato lo obvia el periódico londinense. Saben barrer para casa y arrimar el agua a su molino. Copiaron todas las técnicas de propaganda que les enseñaron tanto Lord How-How como Goebbels. Y de ahí sus descargas- por el momento mediáticas- contra Putin.
Pero a propósito hoy cuando vino la mujer del presidente USA rodeada de un ejercito de gorilas y de guardaespaldas y se dirige por lo visto a darle el abrazo de la muerte al Rubio y a toda su jarca, que ya le quedan dos telediarios como aquel que dice, y va a morir por donde más fumado había… sus habanos, y se exhuman huesos de fusilados en Aranda, memoria histórica de unos huesos que si no fueron santos merecen toda la alharaca de la publicidad, mientras otros huesos de los “otros” son echados al olvido, Don Garzón que por cierto también es un jodío juez- and he is biased- no puede mostrarse más parcial al respecto. Sólo le interesan por lo visto los asesinados por unos pero los caídos del otro bando no tendrán bula en este entierro. Y a esto lo llaman justicia el amigo ZP y toda su patulea que en comandita ha hecho una verdadera razzia o una pecorea salvaje de la verdad de lo ocurrido en España en los últimos tiempos.
Y a todo esto ha saltado a mis manos un texto de una novela rusa que viene al pelo para ambientar esta atmósfera de zanjas y de pelotones de fusilamiento en la que nos movemos.
“¿Oye, usted, María? ¡Están fusilando a nuestros hermanos! Y, entretanto, hemos de callar, porque, si no, nos fusilan a nosotros. Hay muchos que se han vendido a las aves de rapiña y se salvan así de la muerte. Los mejores de los nuestros han caído ya. Traicionados. Pero aun somos fuertes aunque seamos pocos. Lucharé contra ellos. No los temo. Oye. Están fusilando al segundo turno y dando a los caídos el tiro de gracia… no os regocijéis, aves de rapiña. Os queda poco tiempo de oprimir a la patria rusa. Ignoráis que hay hombres resueltos a todo, que no estan en vuestro poder. Y ellos se alzarán contra vosotros, miserables que oprimís a Rusia desde el Kremlin. ¡Temblad! Lo que habéis conseguido tan fácilmente se os va a escapar de las manos. Tenéis miedo y por eso os ocultáis entre los muros del Kremlin rodeados de pretorianos y guardaespaldas con ametralladoras y a la bayoneta calada. Pero quien os defiende vamos a ver: chinos, letones, mercenarios backhires. Todos los rusos están en la cárcel y vosotros domináis mediante el terror y habéis traído extranjeros. Los habéis sacado de sus madrigueras y escondrijos. Y ahora no hay Dios, ni templos, ni leyes, ni patria, ni familia, ni tribunales imparciales. Ahora sólo se castiga como acto criminal el amo a la patria. Pero aguardad: un hombre marcha contra vosotros, carroña humana y llegará el día en que vestido de mariscal dirija contra vosotros el cañón de su arma. Fuera. Paso a los verdaderos rusos a los que avanzan levantando la cruz en los labios estas palabras:
- Xristos Voskrése
- Verdaderamente ha resucitado – contestaron los que portaban la cruz como si fuera un arma”. (Lev URVANZEV; “Mañana” (Ytro) Moscú 1942.
Estas palabras suenan como una profecía que fue materializada en 1989 con el fin de la URSS pero no con el fin del Comunismo que esclavizó a Rusia y ahora, muy vivo, se mueve por otros parámetros. Es el grito agónico de “ Ogoñi…Ogoñi” que tambien escuchó Andreiev otro autor cuya obra versa sobre este periodo revolucionario una de cuyas características, según nos dice en su obra maestra Sacha Yugolev, que tiene que ver con la crucifixión de Yugoslavia, es el afán incendiario. Rusia también ardió por los cuatro costados en el verano caliente de 1917. Los incendios, como ahora, estaban provocados por especuladores capitalistas y por agentes de la maldad. Ogoñi. Clamor de angustia. El monje negro pasea por el jardín de un claustro románico. Las arpías y aves monstruosas de los capiteles románicos cruzan los pescuezos y se pican las patas hasta hacerse sangre. San Miguel en un altar trae en la mano una bascula para pesar las almas y hay quien estiba mientras tanto información por la Red. Gran parte de ese material, tábido por la manipulación de los Tabelión, que no para, no es más que falsa moneda. Un señuelo. Una trampa. En ese pozo caen no pocos incautos. Coacervar noticias capciosas e informaciones entreveradas es un venal ejercicio de esta época empapada de falsos testimonios y empopada por los vientos de Queronte el funesto nauta que no sabemos a donde nos llevará. Dicen que de los escarmentados se hacen los arteros pero aquí el personal se repite más que la cebolla, tropieza dos veces en la misma piedra, cae en los mismos pecados, el más grave el de la presunción, y propala infundios ad nauseam. No paran esas lenguas boquimuelles de las reinas de los informativos que a mí me recuerdan precisamente las arpías entrechocando sus pescuezos juntando noticias. Dicen que la mejor palabra es aquella que no se ha dicho todavía pero éstas hablan como cotorras. Garlan a todas oras. Su verborrea es como una diarrea mental que todo lo distorsiona y todo cuanto toca convierte en polución.
-Chist. Guardemos silencio en el templo de Volupia.
Tales recomendaciones caen en el vacío. Esas ¿nunca callarán? Parlan y parlan hasta en catalán y encima ganan dinero.
-Cierra el pico, Cleopatra.
La chica de los informativos nunca cambiaba de luk. Más de veinte años se presentaba con su pelo a lo Cleopatra ante la pequeña pantalla y su boca, menuda es la tía, como las fauces de una gárgola. Es la boca de un fuego que nos consume. Abominables y abominarios tiempos con mucho buldero lanza en ristre, y mucho inepto como ese nuevo cantamañanas al que llaman Ramón Pi que gasta tirantes y sabe medir la distancia de pi, que se desayunan un sapo cada mañana y a la noche a la cena les ponen aceite de ricino y les sellan los labios mediante una alguaza. Cuando vayas al baño, no te sorprendas de que has cagado una bisagra. Malas lenguas que dicen lo que no pasa, no dicen una verdad entera, sólo medias verdades. Puro enlabio y mayor engaño. Cálidas noches de agosto. Presenciamos las lágrimas de san Lorenzo desde la ventana.
-Arson. Ogoñi-proclaman las estrellas incendiarias.
Por lo que parece en el firmamento tambien andan de batalla. Otra vez Lucifer y Luzbel. Bienvenido Mister Marshall y farewell, Michele, ma belle. Sont les mots qui vont tres bien ensemble.
Hoy los Beatles al despedir a la bella dama tambien cantaban. Ni que decir tiene que la negra es guapa. Big Bones. Y norteamericana. Lo malo de ese país-no nos engañemos- es que si los republicanos declaran la guerra son los demócratas los que tiran las bombas. A mí siempre me dio un poco de pena Obama. Un inocente en medio de tanto malvado. Daniel en el foso de los leones. Dicen que los fuegos que asuelan a los rusos son todos provocados.
07/08/2010
jueves, 5 de agosto de 2010
Ha venido la Obamesa
Pues que bien, seguimos en la España de bienvenido mistner Marshall. La Obamesa es una mujer grande, big bones, se pare un poco a Noemí campbell, sólo que la inglesa es negra-negra y está es negra con un ligero toque de exotismo asiático. Ha venido a marbella muchos escoltas luego granada y el sacromontne, una fartura de flamencno tipical spanish. Después irá a Mallorca, es posible que le de al rey el beso de la muerte. Todos recordamos a kissingner. Yo que juanca me escaquearía mal fario trae la señorona. Pero ha llegado la Obamesa, que gran noticia
n
Pues que bien, seguimos en la España de bienvenido mistner Marshall. La Obamesa es una mujer grande, big bones, se pare un poco a Noemí campbell, sólo que la inglesa es negra-negra y está es negra con un ligero toque de exotismo asiático. Ha venido a marbella muchos escoltas luego granada y el sacromontne, una fartura de flamencno tipical spanish. Después irá a Mallorca, es posible que le de al rey el beso de la muerte. Todos recordamos a kissingner. Yo que juanca me escaquearía mal fario trae la señorona. Pero ha llegado la Obamesa, que gran noticia
n
martes, 3 de agosto de 2010
BIENVENIDO A LA VIDA, YAGO
Ya soy abuelo
Un hermoso vástago nos nació en la tarde del día de Santiago. Le presento a Jacob, Yago o Sant Yago, patrón de las Españas. No sé qué decir en un artículo para darle la bienvenida a mi primer nieto que nació muy cerca del cuartel donde su abuelo juró bandera. Ya no hay cuarteles y los campamentos donde marcábamos el paso se han convertido en cómodas urbanizaciones donde los nuevos españoles han plantado árboles nuevo que dentro de algunos lustros darán sombra y no quedará memoria de estos eriales. La vida florece y la sangre sigue su curso. Me tomé la primera fotografía y mi mirada y mi recuerdo y mis ojos cansados miraban para la Biblia y musitaron la oración del anciano Simeón. Nunc dimittis… espero sin embargo que Dios me conceda el galardón de verlo crecer algunos años para llevarle a jugar al parque a mi querido Yago, verle hacer pocitos y columpiarse, llevarle a la escuela y contarle algún cuento antes de dormir. Dentro del pesimismo que nos agarrota los nervios porque esta España a la cual ha venido mi nieto no es aquella en la que nosotros soñamos pero una vieja sentencia teológica nos sirve de consuelo para conjurar las siniestras percepciones y los pensamientos. La gracia y la fuerza de la vida circulan a través de la savia y nunca por la corteza. Por eso muchos de los milagros y maravillas del tiempo nuevo no se aprecian mirando a la corteza o a las hojas del gran roble pluricentenario que es España. A dios no se le ve pero está ahí. Ya es un consuelo que me llena de agradecimiento el ver el alumbramiento de un nieto. No puedo expresar todo el reconocimiento a la Providencia como también a todos aquellos que me han llamado para felicitarme en día tan significado (Publio, Antonio Valdivieso y otros muchos amigos). Estaba leyendo un libro de Armando Palacio de Valdés un poco melancólico que se titula El Álbum de un Viejo entreteniendo mi espera en la maternidad cuando salió mi hijo del paritorio para anunciar a la familia el feliz evento. Uno ya es mucho pasado y poco futuro pero seguiremos en la misma demanda hasta el último aliento hasta el final. Bienvenido a la vida, Yago, un regalo a esta familia del glorioso Boanerges cuya fiesta veneramos los españoles de buena voluntad. Dios te dé salud y larga vida, querido Yago.
03/08/2010
Un hermoso vástago nos nació en la tarde del día de Santiago. Le presento a Jacob, Yago o Sant Yago, patrón de las Españas. No sé qué decir en un artículo para darle la bienvenida a mi primer nieto que nació muy cerca del cuartel donde su abuelo juró bandera. Ya no hay cuarteles y los campamentos donde marcábamos el paso se han convertido en cómodas urbanizaciones donde los nuevos españoles han plantado árboles nuevo que dentro de algunos lustros darán sombra y no quedará memoria de estos eriales. La vida florece y la sangre sigue su curso. Me tomé la primera fotografía y mi mirada y mi recuerdo y mis ojos cansados miraban para la Biblia y musitaron la oración del anciano Simeón. Nunc dimittis… espero sin embargo que Dios me conceda el galardón de verlo crecer algunos años para llevarle a jugar al parque a mi querido Yago, verle hacer pocitos y columpiarse, llevarle a la escuela y contarle algún cuento antes de dormir. Dentro del pesimismo que nos agarrota los nervios porque esta España a la cual ha venido mi nieto no es aquella en la que nosotros soñamos pero una vieja sentencia teológica nos sirve de consuelo para conjurar las siniestras percepciones y los pensamientos. La gracia y la fuerza de la vida circulan a través de la savia y nunca por la corteza. Por eso muchos de los milagros y maravillas del tiempo nuevo no se aprecian mirando a la corteza o a las hojas del gran roble pluricentenario que es España. A dios no se le ve pero está ahí. Ya es un consuelo que me llena de agradecimiento el ver el alumbramiento de un nieto. No puedo expresar todo el reconocimiento a la Providencia como también a todos aquellos que me han llamado para felicitarme en día tan significado (Publio, Antonio Valdivieso y otros muchos amigos). Estaba leyendo un libro de Armando Palacio de Valdés un poco melancólico que se titula El Álbum de un Viejo entreteniendo mi espera en la maternidad cuando salió mi hijo del paritorio para anunciar a la familia el feliz evento. Uno ya es mucho pasado y poco futuro pero seguiremos en la misma demanda hasta el último aliento hasta el final. Bienvenido a la vida, Yago, un regalo a esta familia del glorioso Boanerges cuya fiesta veneramos los españoles de buena voluntad. Dios te dé salud y larga vida, querido Yago.
03/08/2010
lunes, 26 de julio de 2010
Todos los cojos van pa Santa Ana arriba voy yo con mi pata galana, dice un viejo adagio astur. Cuando corre 2010 no he podido subir al monte santo desde donde se otea una de las más espectaculares panorámicas de mar y monte del litoral cantábrico. Quisieron los cielos hacerme abuelo en el día en que la Iglesia celebra la fiesta de la abuela de Cristo madre de la Virgen y mujer que fue de San Joaquín, conque este año mis compadres me pondrán falta. Subía yo todos los años monte arriba entre los piornos y helechales muchos abedules algún roble y bastantes castaños. La autopista que lo cruza ha desforestado bastantes hectáreas de monte bajo pero qué se le va a hacer. La misa es a las doce y tocan las campanas. Tambor y gaita. A la hora de alzar suenan los acordes del himno nacional. Luego baile en la explanada. Que la fiesta tiene un origen sincretista y que era una antigua festividad baquica lo denota el que se tenga por costumbre entre el mocerío pixueto darle a la garrafa con menos moderación que mandan las buenas costumbres por lo que se agarran en lo alto y por todo lo alto curdas que son sonadas y los beodos ruedan por las veredas monte abajo casi sin detenerse hasta la misma bocana del puerto de Cudillero. Pero Dios todo lo perdona y los papás de la Virgen hacen la vista gorda. y mira para otra parte la gloriosa Santa Ana Sin embargo, es muy fuerte la devoción que sienten los mareantes pixuetos por su santa Anina así la llaman porque su ermita alta y bien dibujada cuando la ven señalabdoi el horizonte en dias de mala mar les consuela con el pensamiento de que gracias a la intercesión de la Gloriosa Santa ana podrá llegar a tiempo. Para mí esta fiesta es tan importante como la del Rocío pero celebrada sin tanto fanatismo, sin el señoritismo andaluz un tanto chulesco. Por alla arriba somos más llanos y no tan espectaculares pero hecnhidos tambien de fe cristiana y asturiana hasta las cachas. Aquí van unas fotos captadas de la fiesta durante casi cinco lustros que estuve subiendo al alto de Montarez. Que la santa anina dulce y guapina nos valga.
Todos los cojos van pa Santa Ana arriba voy yo con mi pata galana, dice un viejo adagio astur. Cuando corre 2010 no he podido subir al monte santo desde donde se otea una de las más espectaculares panorámicas de mar y monte del litoral cantábrico. Quisieron los cielos hacerme abuelo en el día en que la Iglesia celebra la fiesta de la abuela de Cristo madre de la Virgen y mujer que fue de San Joaquín, conque este año mis compadres me pondrán falta. Subía yo todos los años monte arriba entre los piornos y helechales muchos abedules algún roble y bastantes castaños. La autopista que lo cruza ha desforestado bastantes hectáreas de monte bajo pero qué se le va a hacer. La misa es a las doce y tocan las campanas. Tambor y gaita. A la hora de alzar suenan los acordes del himno nacional. Luego baile en la explanada. Que la fiesta tiene un origen sincretista y que era una antigua festividad baquica lo denota el que se tenga por costumbre entre el mocerío pixueto darle a la garrafa con menos moderación que mandan las buenas costumbres por lo que se agarran en lo alto y por todo lo alto curdas que son sonadas y los beodos ruedan por las veredas monte abajo casi sin detenerse hasta la misma bocana del puerto de Cudillero. Pero Dios todo lo perdona y los papás de la Virgen hacen la vista gorda. y mira para otra parte la gloriosa Santa Ana Sin embargo, es muy fuerte la devoción que sienten los mareantes pixuetos por su santa Anina así la llaman porque su ermita alta y bien dibujada cuando la ven señalabdoi el horizonte en dias de mala mar les consuela con el pensamiento de que gracias a la intercesión de la Gloriosa Santa ana podrá llegar a tiempo. Para mí esta fiesta es tan importante como la del Rocío pero celebrada sin tanto fanatismo, sin el señoritismo andaluz un tanto chulesco. Por alla arriba somos más llanos y no tan espectaculares pero hecnhidos tambien de fe cristiana y asturiana hasta las cachas. Aquí van unas fotos captadas de la fiesta durante casi cinco lustros que estuve subiendo al alto de Montarez. Que la santa anina dulce y guapina nos valga.
lunes, 12 de julio de 2010
lunes, 3 de mayo de 2010
SANTO SINDONE
MISTERIOSOS
MILAGROS
DE
LA SABANA SANTA
DE TURÍN
POR
ANTONIO PARRA GALINDO
Según un reciente informe de peritos y paleólogos, es cierto que este ornamento pudo pertenecer al Señor
Es una historia apasionante que comienza en la Edad Media, en la que se funde la verdad con la leyenda y el mito. Unos dicen que se trata del verdadero rostro de Cristo. Otros que es un fraude. En realidad la Sábana Santa de Turín se ha convertido en la reliquia más polémica de toda la catolicidad desde que fue captada en los negativos de un fotógrafo italiano hace justo un siglo. La peripecia experimentada por este trozo de sudario hebreo - o medieval ? - desde Jerusalén a Edesa, hoy ciudad turca, y de allí a Constantinopla de cuya catedral fue expoliada por los templarios y trasladada a Francia, y de allí a Italia sería materia suficiente como para llenar con libros y documentos toda una recóndita galería de los archivos secretos vaticanos cerrados a cal Sindonología y canto. Ha dado lugar a una nueva rama muy específica de la ciencia histórica que se llama . Y, coincidiendo con la salida a luz pública de las famosas placas de Secondo Pía en 1898, la literatura esotérica es un género con garra en la sociedad de consumo, inquieta por las cosas del más allá pese al cacareado materialismo.
Los cristianos griegos denominan a la famosa efigie Mandylion , que quiere decir el paño sagrado. En el siglo VI el patriarca Nicolás Mesartes ordenó su traslado desde Edesa hasta la catedral de Santa Sofía. De acuerdo con una leyenda apócrifa, Cristo no murió tras su suplicio en la cruz. Cuando lo dieron por muerto, su amigo Nicomedus pidió sus restos al prefecto Pilatos y saliendo de Jerusalén a favor de la noche se llegó hasta el enterramiento, curó las heridas del crucificado muy maltrecho pero aun con alientos y trasladó al herido hasta Edesa donde el Salvador sometido a un tratamiento de hierbas, pues Nicodemus era médico apotecario, vivió hasta los noventa años una segunda vida oculta. Su mortaja consistente en el paño mortuorio con que los judíos acostumbraban a ceñir a los difuntos quedó impregnado de los rasgos físicos del Señor como consecuencia de las substancias aromáticas y conservantes con las que fue fajado en el acto de inhumación: aloe, mirra y cinamomo y otros aditamentos balsámicos con los cuales los antiguos atajaban el proceso de descomposición. Las cintas y vendajes que encontraron las Santas Mujeres en la mañanita de Pascua aparecieron impregnadas del olor corporal y las marcas de la silueta de Jesús. Según la costumbre judía, depositaron en la cavidad bucal del finado un denario al objeto de poder pagar al Barquero, cuando se presentase a Caronte quién pasaba los muertos a la otra orilla de la laguna Estigia previo pago del salvoconducto. A todos los difuntos se les introducía en el paladar o sobre la frente el óbolo de costas para la postrer singladura. Era un rito griego que los hebreos asimilaron en sus exequias. Curiosamente, en la Sabana Santa quedan vestigios metálicos en forma de redondel que bien podría haber sido producido por un denario. Esta es una historia muy bonita aunque difícilmente creíble.
Todos los viernes del año hasta su expolio por los cruzados de Godofredo de Bouillon era trasladada la reliquia desde la catedral de Santa Sofía a una iglesia extramuros , que llevara por nombre Agios Ivan Xristiteli, emplazada en el arrabal Blancherna, en la propia Estambul. Los otomanos la destruyeron.
El Mandylion o Santo Sudario es seguramente después del lignum crucis que trajo Santa Helena en el siglo IV desde el Monte Calvario la reliquia más venerada y una de las más espectaculares a pesar de que su autenticidad ha sido muy debatida habiendo generado apasionadas controversias dentro de la
comunidad científica. La razón parece amotinarse contra el legado de esta tradición. Sin embargo hay razones que manda el corazón que no entiende la lógica. Los detractores del Santo Síndone no ven ello más que el prurito de la imaginación calenturienta, un embuste que se sacaron los curas de la manga de la estola para enriquecerse a costa de las credulidades del vulgo. El clero sabe estar al santo y a la limosna. Por consabido hay que dar que la religión bien administrada es una fuente de divisas y el soporte más fiel del poder en todas las épocas, porque no vamos a contradecir a Lenin en lo del opio del pueblo. Esto ha pasado algunas veces. Nadie puede resucitar. Va contra las normas físicas y la naturaleza no puede forzar sus propias reglas , establecidas por Dios. ni ir más allá de sí misma. Los detractores de los milagros y los que no creen en la Resurrección - tenían ya un precedente en el pueblo hebreo, una de cuyas sectas, los saduceos, negaban el Seno de Abrahán - y de las sofisterías místicas recalcan que el documento de Turín fue una falsificación del siglo XIII llevada a cabo por un experto alquimista que conocía las reglas cromáticas de las manufacturas textiles y manejaba el pincel divinamente, porque seguramente sería un monje del Monte Athos especialista en representaciones iconográficas...Sea...
Es una opinión respetable, igual que las demás, pero, como dicen los británicos: there is more than meets the eye . Esto no es todo. Hay aspectos de la cuestión que no los abarca el ojo desnudo. El rostro de Cristo está en todas partes. Se multiplica. Viaja por Internet. La batahola de ondas hertzianas .En 1997 el paño salió milagrosamente indemne de una fuego que se declaró en la capilla del relicario de Turín. Algunos vieron en este hecho fortuito o provocado un signo.
LOS TEMPLARIOS
El legendario Jacques de Molay, maestre del Temple , al que por orden papal se encarceló en la Bastilla y se mandó ajusticiar - subió al patíbulo el 14 de marzo de 1314-, antes de ser pasto de las llamas formuló una profecía escalofriante por su implicación a tres bandas. Contra el trono de Francia. Contra la Sede Romana quien por aquellas fechas vivía los aciagos tiempos del cisma de Avignon con sus retahílas de papas y de antipapas, bulas, interdictos, excomuniones, etc... Era por lo demás un maleficio contra el trono de Francia pronunciado desde una mazmorra de la Bastilla, que se cumpliría matemáticamente en 1789 la noche que guillotinaron a Luis XVI. Un monarca de la Flor de Lís - profería el augurio - pondrá la cabeza en la toza; al papa lo meterán preso, y el rostro de Cristo nos mirará a todos desde el icono santo donde quedó plasmado por testimonio de su Resurrección al final de los tiempos. Será la contraseña de los signados a los que El vendrá a salvar en su segunda venida . El vaticinio del postrer clavero de los Caballeros del Temple que es muy similar a los que formula Juan en Apocalipsis anunciando que se estampará en la frente la señal del número de la Bestia: el anosmie o 666 entre los elegidos, y sólo ellos podrán vender y comprar ( no pensemos por favor en los intrigantes por lo herméticos y venales códigos de barras estampadas desde las cajetillas de cigarros hasta los paquetes de condones) parece haberse cumplido en la totalidad de sus tres apartados según nuestros vislumbres. Porque no solamente murió en la guillotina María Antonieta y el romano pontífice Pio IX fue internado en Santangelo por Napoleón sino que también se está produciendo una verdadera eclosión de iconos. Las estampas modernas de la imagen de Cristo no son ya las acarameladas calcamonías asexuadas y cursis de hace unos años sino que plasman esa mirada del Hijo del Hombre que puede ser de todos los hombres no de uno en concreto diseñada en el Mandylion o Santo Sudario. Nos referimos al Cristo abstracto posando en majestad y bendiciendo mirando enigmáticamente para nosotros con unos ojos de calor y de comprensión, pero con la frialdad y el hieratismo del Pantocrátor , que ciertamente no son de este mundo, porque trascienden el tiempo y el espacio, y con la caballera abundante y recogida hacia atrás a la manera de los iconos bizantinos .Es la vera efigie de la majestad solemne. Y hablando de iconos, claro está, ésta es la edad de la imagen cuando en cibernética no se podría funcionar sin los consabidos iconos virtuales del ordenador. Iconos es una palabra nueva que ha resucitado el lenguaje emblemático cargado de símbolos de los antiguos para comunicarse por señas jeroglíficas. Fluye por doquier. La proliferación de estas imágenes supone una verdadera revolución iconográfica en el seno de la Iglesia latina que ha adoptado las formas estilizadas y no antropomórficas de la griega a la hora de representar al Señor. En el principio era el crismón, que los cristianos de Roma marcaban sobre las bóvedas ocultas de las catacumbas. Con una ji (X) y la rho (P) griegas fundidas con la prótesis alfa y la apódosis omega, enunciando el principio y el fin de todas las cosas. Lo que abre y lo que cierra. La clave de la vida y de la Historia. El crismón se complementaba con el IXTHIOS,o pez eucarístico, que se corresponde a su vez con la palabra que en griego quiere decir pez y que en la simbología paleocristiana se traduce como CRISTO-JESÚS - HIJO DE DIOS. Estamos delante de la gran sigla, de bruces sobre el arcano de los misterios, a la sombra del Grial, que bien pudiera ser el Santo Sudario.
En los retablos de ahora y en los modernos altares de los templos edificados durante las últimas décadas se representar con harta frecuencia al Mandylion o Santa Faz, y a la Virgen como Odyguitria (la que muestra el camino) de la iconografía ortodoxa, idealización esquemática y escoltada por sendos arcángeles con figura humana con las alas distendidas y por debajo el epígrafe heleno Mater Theous( Madre de Dios). No se sabe cómo era Jesús en su carne mortal, pero éste es el único dato fiable, pues según las mediciones antropométricas del sudario, debió de medir entre 1,82 metros y 1,90 de estatura. Tenía la cara alargada y debió de ser un varón hermoso y bien proporcionado, la tez trigueña con una cierta retiranza aria más que semita, y los miembros bien proporcionados.
El cuadro de la Odyguitria ( La Virgen del Perpetuo Socorro) se le atribuye al evangelista Lucas que era médico y pintor, pero esta antiquísima tradición ha de ser acogida con reservas ya que tampoco tenemos pruebas precisas al respecto. Sin embargo, este ornamento sagrado, según el dictamen de los expertos que han determinado de un forma categórica e inconcusa las denominadas pruebas del carbono catorce llevada a efecto por científicos yanquis, obsecuentes con el criterio de que era una falsificación de urdimbre medieval.
II
El normando Geoffrey de Charny, un discípulo de Morlay , que estuvo preso en San Juan de Acre durante las cruzadas, llevó a Roma el lienzo funerario, para ser bendecido y cotejado. Con la anuencia del papa Clemente VII lo colocó en la cripta de la iglesia de Lorey. Formaba parte la famosa reliquia del legendariamente fabuloso tesoro de los templarios tan codiciado por el rey de Francia? Los historiadores se muestran de acuerdo en que una de las causas de la muerte del preboste de la Orden más importante que tuvo la Iglesia en los siglos finales de la Edad Media fue la codicia de Felipe el Hermoso de consuno con las apetencias de la Silla Romana. No se sabe a ciencia cierta bien lo que pasó, pero corría la voz de que los templarios eran grandes alquimistas y que guardaban no solamente el Grial que abría las puertas del cielo y de la felicidad en la tierra, sino que también habían alcanzado la fórmula secreta de transformar cualquier metal en lingotes de oro. Porque, familiarizados con las ciencias ocultas e íntimos conocedores de los arcanos de la crisopeya, habían accedido al ultimo grado de los conocimientos gnósticos . El que da llegar a la piedra filosofal. Pero todo esto es fabuloso. Volvamos a los hechos contrastados por la historia.
El lienzo funerario fue exhibido en París por la viuda de Geoffrey de Charny, del que se decía que era un hijo natural del maestro del Temple, Jacques de Morlay, que murió en el tormento de la hoguera. La condición de sacerdotal no era óbice por tales calendas para que personas consagradas como eran los monjes de las órdenes militares se reservasen el derecho de procrear y tuviesen comercio carnal con mujeres, y esto deshace también la especie vertida contra los templarios de practicar la pedofilia , reduciéndola a la categoría de bulo. Fue uno de tantos infundios que contra ellos fueron propalados por aquella época: la homosexualidad.
Clemente VII publica un rescripto para que la joya pudiera ser expuesta al público en la ciudad de Lirey. En 1578 ya está en Turín donde consigue convertirse en una de las grandes atracciones místico históricas de la capital del Piamonte, pero su ostentación a la devoción popular se restringe a días muy concretos del año. La reliquia había llegado muy dañada como consecuencia de un fuego que hubo en la ciudad de Lirey ; quedaron algunos chamuscones en los bordes, pero la pieza salvó también aquella vez milagrosamente.
Hasta el presente siglo a raíz de las espectaculares fotografías tridimensionales obtenidas en 1898 no se somete al pertinente análisis químico Con técnicas muy depuradas como los rayos infrarrojos y la utilización de sales especiales para rastrear toda su estructura con rigor exacto.
Se observa en la composición una serie de elementos conservantes como el áloe, savia de Terebinto, mirra y otras substancias balsámicas, pero lo que llama la atención de los estudiosos es un hecho poco común: en el lienzo aparecen partículas de plantas liliáceas hoy extinguidas y cuyo florecimiento los palinólogos( especialistas en botánica arcaica) fijan en Asia Menor y Palestina hace muchos siglos; esas yerbas nunca crecieron en Europa, a decir de los expertos, que vienen a ser los arqueólogos de la fitología. No es posible que en la Edad Media pudieran haberse producido estas flores en el Viejo Continente, a no ser que hubiesen sido transportados por vilanos o en alas de algún pájaro migratorio o por el aire mismo. Este es un argumento a favor de los que creen en la autenticidad de la tan controvertida tela.
Los estudios en razón de la polémica mundial suscitada fueron en incremento después de la II.G.M. cuando Turín , tomada por los americanos, a raíz de la caída del fascismo, llega a ser la capital europea del esoterismo. Los científicos USA han capitalizado el asunto desde aquel primer reportaje por la TV. en 1973, y sobre todo, a partir de las conclusiones de un equipo de investigadores de la NASA que detectaron en el paño las secuelas de lo que pudiera haber sido una explosión nuclear. Hay en todo ello materia esotérica para dar y tomar. Un género literario que inunda las librerías del mundo. Hoy muchos se refieren a la Sábana Santa de Turín como el Quinto Evangelio.
CUERPO MÓRBIDO
Todo es tan aleatorio como inconcuso a la vez. Cabe la instancia de que la tela en la cual fue envuelto el Señor fuese una falsificación llevada a efecto por algún ducho manitas italiano avezado a la técnica de la reproducción oleográfica precisamente en una época en que proliferaba el culto a las reliquias como retributivo fenómeno de fe en el más allá y en el negocio, que en este mundo pecador no hay ganancia mayor que allí donde se atisba algún hecho preternatural, supuesto o real, porque la aparición da siempre lugar a la peregrinación y, ésta al emolumento y la ganancia, como demuestra el hecho de que Fátima sea el capítulo más importante en el ingreso de divisas que tiene montado el gobierno portugués, y otro tanto podría decirse de Lourdes, y nada se diga de Jerusalén.
Es verdad. Tales apostillas son absolutamente razonables, pero tampoco hay que dar de lado al carisma como categoría inherente a la religión predicada por el Nazareno, que cerró la boca de los leones en el circo de Roma, sobrevivió a las herejías, las revoluciones aguantando el filo de la espada y sobrevivirá a sus enemigos de dentro y de afuera, a los errores de sus ministros, a las modas y a la especulación política. El icono de Turín en esta época iconoclasta e iconográfica a la vez , puesto que domina la imagen que triunfa y vende, la que entra por los ojos, se ha convertido en un símbolo de la espiritualidad de nuestros días, un tanto supersticiosa, la verdad sea dicha, porque no cabía otra fórmula. Puede ser un argumento también de que las relaciones con la divinidad, pese al mecanicismo, el materialismo y el racionalismo de la época no han quedado rotas. El hombre no puede remediar su fascinación por la trascendencia en medio de las dudas y del ambiente propicio a no creer más allá de lo que se plasma delante de nuestras propias narices.
La Santa Sábana con su hermetismo misterioso parece encerrar la clave de ese misticismo gnóstico que fascinó a los Templarios tan vilipendiados pero al mismo tiempo tan en boga. Está volviendo el Temple ? Marcará el milenio entrante el cenit del culto gnóstico como elemento catalizador de síntesis entre todas las religiones en la época del ordenador y de las conquistas espaciales a la sombra del Evangelio? Es a lo que aspiraban estos frailes, grandes constructores de catedrales, introductores en Europa de la tradición caballeresca, apasionados de la sabiduría y de la ciencia ( en todas sus construcciones arquitectónicas introducían como elemento decorativo o mascota de protección un baffamot que era una especie de cerebro electrónico) pero Roma, que años más tarde procesaría a Galileo, celosa de su poder desmedido, y que nunca ha permitido que nadie le hiciese sombra, como se comprueba a lo largo de los turbios manejos de los papas de la Edad de Hierro, entre el siglo VII y el año 1000, o la oposición con el emperador germano en la siniestra cronología de las Investiduras, sin hacer excepción de los pocos edificantes pontificados Borgia, mandó a Jacques de Morlay al quemadero. Su maldición pesa cual negra sombra sobre Sede Apostólica. Pedirá ella perdón rehabilitando al ultimo clavero de la Orden de San Juan Bautista - algunos anales lo acreditan como mártir - como ya hizo con Galileo o con Savonarola?
Todo eso está por ver. En cualquier caso , los templarios, iniciados en los secretos gnósticos y teniendo en cuenta su condición militante y penitente, porque en eso siguen al Precursor, tendrían la clave del futuro y pudieran salvar a la Iglesia de tanto poder, tanta regalía, tanto ir y venir en papamovil, rescatandola de las garras de los italianos y del mal más grave que siempre la amenaza: la macrocefalia y el dogmatismo, tan lejos del Mensaje del Sermón de la Montaña Eso pertenece al aparato externo y a la hojarasca vicaria de los intereses humanas. Por eso, la Iglesia que es eterna y se encuentra dominada por la sabiduría del Espíritu , cuando muere un papa, lleva a cabo uno de los ritos funerarios más emocionantes y significativos. El anillo pastoral del pontífice fallecido es machacado con un martillo de grandes proporciones y en torno al cadáver se hacen nueve abluciones y se rezan nueve responsos, no uno como al común de los mortales, porque el pontífice al heredar la tiara se cree que está sujeto a más tentaciones - sobre todo las que otorga la gloria y el poder en ejercicio - que los que nunca tuvieron sobre sus espaldas responsabilidad tan abrumadora como la de ejercer las funciones de representante de la divinidad en la tierra. Suele decirse que casi todos los sucesores de Pedro al llegar la hora de la muerte se sienten atormentados y sobrecogidos pues temen más que las personas ordinarias el juicio de Dios. Su responsabilidad es entonces mayor y al rendir cuentas se le reclamará en grado consonante con las obligaciones. En la ceremonia de entronización hay otro rito pontifical que recalca ese aspecto de la fugacidad de las cosas humanas: el cardenal arcediano va delante de la cruz procesional portando en la mano una tea encendida que pronto se apaga, mientras exclama:
- Pater sancte, sic transit gloria mundi. (Así se esfuma la gloria del mundo, Santidad).
Por desgracia - lo demuestran los anales - muy pocos elegidos para tan alta misión entre los sucesores de San Dámaso hacen demasiado caso del imperativo de rúbrica en el ceremonial de coronación .Solieron caer en la tentación del poder y de la vanagloria por causa de la flaqueza de la condición humana. El poder supone una tentación, porque corrompe, y el poder absoluto más aún.. Sin embargo, portentos como el que nos ocupa, o los sucesos extraordinarios de las apariciones de los que se tienen noticia en el mundo de hoy, pero , sobre todo, esa llamada interior de la fe que sienten en su interior muchos cristianos, esa intuición, esa luz interior, que es lo más maravilloso del cristianismo, que nos ayuda a pechar con las múltiples dificultades de nuestra vida, consuela en las aflicciones, y guía en la oscuridad de los caminos de la existencia plagados de abrojos y de peligros, apuntalan más nuestro compromiso con el Evangelio a despecho de las pompas y vanidades terrenales o las miserias y grandezas del peso de la púrpura, que no todos saben llevarla con dignidad. Es lo de fuera, hojarasca que mudará el viento de los otoños. La savia está en el interior del tronco del árbol y seguirá brotando cada primavera. La Iglesia esotérica siempre estará más viva que la exotérica que es la aparece relacionada con las fuerzas seculares.
III
En el oficio divino se repite con frecuencia un adverbio latino (multifariam = en muchos puntos y lugares) que expresa ese alto concepto sobre la multiplicidad sorprendente y de las formas más inauditas con que se deja sentir la acción divina sobre el mundo. El rostro de Dios es poliédrico y su casa encierra infinidad de moradas. La idea que esbozó el Maestro a lo largo de sus predicaciones por Galilea pertenece a la filosofía gnóstica que fue la primera en descubrir la diversidad de la realidad casi inabarcable por lo complejo de las situaciones en que se manifiesta y recapitula Einstein en su Teoría de la Relatividad. Aquel descubrimiento hizo que el mundo dejase de ser el mismo. Por lo pronto, puso a toda la Física patas arriba, disparó las naves espaciales hacia el cosmos, colocó sobre el frágil planeta nuestro el cartel de: No tocar .Peligro de explosión nuclear con la tibia y la calavera imbricadas. Jesús insiste en este principio calcado de la ideología de Hermes por lo menos en tres ocasiones cuando dice: No juzguéis y no seréis juzgados... Dejad que los niños se acerquen a mí ... Amáos los unos a los otros . Es decir: dejaralo estar, no busquéis los cuatro pies al gato, que la verdad está en el amor. Pero el amor es conocimiento y es correlativo a la sabiduría porque sólo el que conoce vive y ama. Por contra, el odio, los prejuicios humanos siempre suelen amancebarse con la ignorancia y con la inquietud. Esa idea la había predicado, casi veinte siglos antes que Cristo, Hermes Trimegisto de Alejandría, el tres veces grandes, tres veces santo, tres veces sabio , convirtiendola en piedra angular de su filosofía. Es un maravilloso canto a la vida interior, atrio inviolable de la libertad de pensamiento y de acción.
El Santo Síndone, curiosamente, en abono de un enigma que no cesa, fue guardado sólo en iglesias y basílicas dedicadas a la advocación de San Juan Bautista ( en Edesa, Lirey, Estambul,Turín) , porque iglesia templaria del Precursor era la de Lirey e iglesia del mismo nombre es la de Turín donde se encuentra la más famosa teca de la Cristiandad. Su primer bastión fue San Juan de Acre orilla de Jerusalén. Es una casualidad o un signo de la Providencia ?
He aquí el monumento eterno de la gloria de los sufrimientos de Jesús Crucificado. Venid a adorarlo... Ave, o bona crux , spes unica, dijo en un sermón pronunciado el 24 de junio de 1898 en la iglesia de Turín antes mencionada el arzobispo metropolita, Agustín Richelmy en los fastos de la ostentación de la reliquia a la veneración popular. Por tales fechas el mundo entero se conmovió con las impresionantes fotografías obtenidas por un fotógrafo local, SECONDO PIA, el cual en enero del mismo año obtuvo unas placas del Síndone en tres dimensiones, en las cuales los científicos apreciaron signos de haber estado enrrollada la sábana a un cuerpo mórbido en estado de putrefacción. En el pecho quedaban marcas de flagelación. En las sienes, las de las espinas y en las muñecas los estigmas de los clavos. Es el primer testimonio que ratifica que el reo no pendió del madero por las palmas de las manos sino por las muñecas, y que no hubo cruciferagio o rotura de las piernas , como testimonia el Evangelio contraviniendo así las normas del tormento infligido por los romanos a condenados a morir por muerte de cruz. Para acortar la agonía se les partían las piernas a los crucificados , pero con Jesús no hubo necesidad al comprobar sus esbirros que acababa de expirar. El centurión optó por el golpe de gracia de hincar la lanza por los ijares, de donde manó sangre y agua .La Quinta LLaga.
El reportaje de Secondo Pía dio vuelta al atlas. Muchos creerían, pero otros pensaron en un montaje bien amañado por los curas. El rey Humberto I de Italia prohibió hacer más fotografías. Las instántaneas aparecían en todo su esplendor como dotadas de un fuerza indeleble que conmovió a las naciones ante el aspecto sereno de aquel varón de dolores de faz augusta que recordaba la visión del semblante de Cristo ya manejado por la iconografía oriental. El arte de la fotografía estaba en pañales, pero la cámara oscura y el trípode de Secondo Pia utilizando los polvos de oxalato de hierro y de manganeso habían sacado una reproducción perfecta y hasta diríase que inquietante. Tras los baños de plata pertinentes quedaría positivada sobre el negativo la imagen en cuestión proyectando una silueta indeleble del cuerpo del Señor, una composición en la que destaca la faz inalterable del sujeto pese a los sufrimientos. El varón de dolores que profetizara Isaías se muestra ajeno a sus propios padecimientos, porque los ha vencido, los ha remontado.
En diciembre de l899 otro francés aficionado a la fotografía, Ulises Chevalier, fue llamado a declarar ante un tribunal de Lyon, donde un grupo de católicos habían sido denunciados por falsarios, después de haber comercializado y puesto a la venta las famosos negativos de su colega italiano. En la deposición forense que haría Chevalier delante del juez, declaró que las placas habían sido tomadas del natural sobre el original existente y que no estaban pintadas ni retocadas. Francia vivía entonces conmovida por el asunto de Dreyffus y las revelaciones de Ulises Chevalier a muchos les parecía una salida de tono. Se exaltaron los ánimos de los círculos agnósticos y ateos preponderantes en la Francia de fin de siglo. Se reclamó el veredicto del Pontífice sobre el tema, pero ni León XIII ni su sucesor se pronunciaron ni en un sentido ni en otro al respecto del escabroso aliciente del Santo Sindone. Sería Pio XI, un intelectual y escritor que pasó la mayor parte de su vida hasta su elección encerrado en la biblioteca y que, contra todo pronóstico creía en el carisma de los milagros ( él canonizó a Teresa de Lisieux proclamando la lluvia de rosas ) el que dictaminara que la reliquia del Santo Sudario estaba admitida por la Iglesia.
LAS CARAS DE BELMEZ
Hace unos años la España franquista se sintió conmovida por un hecho que se salía de lo corriente. En una casa particular del pueblo jiennense de Bélmez aparecieron una serie de rostros en el muro perfectamente diseñados. Se comprobó que allí hubo enterrados o emparedados personas. Sucede que el sudor mórbido de los moribundos y de los cadáveres exhala urea , una sustancia química que al fermentar produce amoniaco. Cuando se evapora el amoniaco éste a su vez cría tanino; el tanino determina finalmente que surjan imágenes. Es una reacción química equiparable al proceso que utilizan los fabricantes de calcamonías. El amoníaco de las caras de Bélmez y las impregnaciones de la Sábana Santa obraron ese milagro inexplicable aparentemente, aunque en el fondo estén perfectamente incardinadas sus causas en las leyes físico químicas.
Hubo un factor de sorpresa añadido cuando en 1973 los militares estadounidenses J. P. Jackson y Eric Jünger revelaron que habían encontrado en el sudario marcas de lo que podía haber sido un estallido de radiación solar. Los evangelistas narran cómo las santas mujeres que se acercaron al sepulcro vieron una luz sobrecogedora que las hizo temblar, pero un ángel vino a confortarlas al tiempo que decían que al que buscaban no estaba allí, que había resucitado. Sus declaraciones estallaron como una bomba. Los más aviesos fueron diciendo por ahí que Cristo era un extra terrestre. La Nasa estaba por esos días metida de lleno en la investigación de los platillos volantes. Las teorías de Jackson y Jünger no pudieron concretarse en demostraciones fehacientes pero contribuyeron a que no menguase el interés por la venerable reliquia.
Resulta que ésta era de una textura inconsútil al igual que la túnica de la cual hablan los evangelistas y que los soldados romanos se jugaron a la taba al pie de la cruz. Era de lino sin costuras y en un segundo análisis volvieron a aparecer los restos de pólenes y de yerbas exóticas. Las pruebas del carbono catorce incoadas en la segunda mitad de la década de los 90 dieron resultados negativos sobre la antigüedad del documento, pero, a decir de determinados sindonologos, las pruebas del carbono, que dataron el lienzo hacia comienzos del siglo XIII y nunca en los inicios de la era actual dijeron que no habían sido llevadas a cabo convenientemente. Otros alegaron que dichos experimentos fueron una forma de poner a la Iglesia contra las cuerdas mediante comprobaciones periciales . Ésta hubo de admitir que, si bien es posible que la sabana no fuese el sudario de Cristo lo resulta infalible que se trata de la reliquia más veneradas del orbe. La que ha creado a lo largo de los siglos un mayor nivel de fervor y de expectación..
En éstas estábamos cuando se produce un pavoroso incendio en la capilla de San Juan Bautista de Turín en 1997 con el papa en el estribo del avión para emprender uno de sus múltiples viajes. Todo el edificio fue pasto de las llamas pero el vestigio de incalculable valor sale indemne del fuego, un hecho que unos reputan de milagroso, pero que otros atribuyen a la pericia y al arrojo de un bombero que logra rescatarlo cuando ya el cofre de metales preciosos donde se guarda el corporal daba señales de fundirse. Hay quien atribuye el percance a la acción intencionada de una mente maligna y criminal. Porque ha de ser tenido en cuenta que Turín es una de las ciudades mundiales donde más casos de posesión diabólica se han dado últimamente , al ser la industriosa capital del Piamonte sede de sectas y conventículos que profesan el culto al diablo. A los pocos meses del incendio sobreviene el terremoto de Asís, otro hecho que tampoco los estudiosos de las ciencias ocultas del siglo XX dan por casual, porque así estaba escrito de antemano. Ya lo anunciaban algunas profecía
IV
Cabe la posibilidad de que nos encontremos ante una falsificación, obra de la alquimia que bien pudo ser trocado en la retorta de algún monje oscuro conocedor de las leyes secretas que rigen el crisol de los metales y la combinación de los ungüentos y colores. La alquimia era el arte sagrado , el gran desideratum de la sabiduría hermética.. Se cultiva durante toda la Edad Media en Europa. Fue traída por los árabes. Nunca se practicaba a la luz del día sino en el interior de lóbregas cavernas, donde hombres excéntricos de narices corvas y largas melenas de guedejas grises, rodeados de matraces, alquitaras y otros cachivaches y vidrios tallados que contenían líquidos de diversos colores en ebullición llevaban a cabo sus investigaciones. El introductor de la alquimia en España fue Raimundo Lulio el Venerable. El doctor iluminado como se le conoce en los estudios teológicos murió mártir apedreado por los sarracenos fundamentalistas. Si no ha subido hasta ahora a los altares quizás se deba a haber cultivado esa actividad tan sospechosa como es la alquimia.
Hubo un papa, Juan XX, que cultivó la panacea universal o arte de transformar en oro los metales; en su testamento otorgado el l334 legó a sus herederos una suma considerable de 28 millones de florines obtenidos en el alambique secreto que transmutaba en metales preciosos los viles y que practicó las ciencias ocultas toda su vida. Era un alquimista, y alquimista fue el famoso quiromántico y adivino de la corte de Juan II, el marqués de Villena,cuya tumba puede visitarse en los Jerónimos de Segovia. El tal marqués también conocido por el de Villena, ni palabra mala ni obra buena - tal debería de ser su catadura moral y su perfidia - se rumoreaba tenía pacto con el diablo y gracias a estas mañas conseguía resucitar a los muertos . Incluso llevó a cabo el primer caso de clonación de la historia fabricando un personaje que era idéntico a sí mismo. Merced a este doble logró salvar el pellejo multitud de ocasiones.
En la época de los magos medievales hacer una réplica o fabricar un sudario semejante al que tuvo en sus manos José de Arimatea no era cosa difícil. Había tecnología suficiente para ello, una tecnología que hoy se ha perdido como se ha perdido el secreto de los maestros que edificaron las grandes catedrales europeas. La alquimia y la sabiduría hermética era la pasión de aquellos siglos , tanto como pudo serlo la cetrería o el conocimiento de las yerbas.
Un médico francés, el Dr. Barbet , comprobó en el lienzo de Turín hasta 120 marcas de azotes o golpes de flagrum - un palo al que iban unidas unas correas de cuero rematadas por bolas de acero verbera con las que se flagelaba a los condenados - llegando a la conclusión de que la paliza fue administrada por dos verdugos diferentes los cuales se habían ido turnando en la tarea.
Cinco hebras de la Sábana escudriñadas al microscopio en 1973 revelaron que la imagen se plasmó sobre un cuerpo mórbido porque había rastros de amoniaco y partículas de sustancias aromáticas y residuos de fanerógamas no habituales en el continente europeo pero bastante frecuentes en Asia . Se encontraron manchas de sangre coagulada y las ya consignadas marcas de clavos en las muñecas. Cristo pesaba unos ochenta kilos y medía poco más de un metro ochenta centímetros. Murió de asfixia a causa de su posición en la cruz que determinaría un encharcamiento de los pulmones al cesar éstos de bombear aire. Las pruebas del carbono catorce fueron efectuadas por William C. Libby, premio Nobel de Química 1960, uno de los investigadores que contribuyeron en 1946 al hallazgo de los tan traídos y llevados Rollos del Mar Muerto . Aunque se trata de una reacción química harto compleja podría sintetizarse de la manera siguiente: cada minuto que pasa los seres vivos crean una cantidad determinada de isótopos carbono catorce , pero cuando esas plantas o animales cesan de absorber oxígeno terminan al punto las emisiones del isótopo. Es posible calcular la edad de un fósil o de cualquier materia siguiendole la pista al carbono catorce estudiando al microscopio las adherencias y trazas que deja en torno suyo todo cuanto tuvo vida. La edad de un árbol se puede colegir al trasluz de los arillos concéntricos .que aparecen como un diagrama al hendir la sierra en el tronco para cortarlo .El surco de cada circunferencia es una floración. Pues muy similar a esto es mutatis mutandis la prueba del carbono catorce. La energía ni muere ni se destruye, sólo se transforma. A tenor con ese axioma hay una interdependencia cósmica o lo que llaman algunos científicos el EFECTO MARIPOSA. El batir de las alas de un insecto en Nueva York puede provocar un huracán en Mallorca. La biblia traduce dicho principio sinérgico con una frase que nos debe llenar de esperanza a los creyentes: vita mutatur non tollitur . La vida se cambia o transforma nunca se arrebata. La materia se adapta y adopta otras formas (metamorfosis). Los que creen en la reencarnación se basan en este principio del efecto mariposa , porque la energía es indestructible y todo lo que vive deja un rastro indeleble en algunos casos como demuestran algunos estudios con fósiles. Las investigaciones palinógrafas a que ha dado lugar el Santo Síndone determinan la existencia de otra flora muy diferente a la que hoy conocemos. Algunos folículos aparecen estratificados cuando se contempla toda la pieza a través del ojo implacable del microscopio, en forma de muescas o adoptando otras formas caprichosas de la naturaleza.
La familia Charny lo tuvo en su poder hasta 1356. El Santo Sudario ha resistido dos incendios, varios intentos de robo. La imagen aparece estampada o impresa mediante una técnica xilográfica, de la misma forma que pudiera ser estampado un vestido a la moda. La faz del Señor emerge con una semblanza muy humana y muy divina al propio tiempo, emanando toda su figura recogimiento y quietud sin convulsiones macabras ante la muerte. Es un rostro de varón muy de antes y después, en el que se funden el hoy , el mañana y el ayer, porque es valedero para el ser humano de todas las épocas. Se da la coincidencia de que la reliquia más venerada por la Iglesia latina presenta una clara tendencia griega. En ello tal vez haya que encontrar un síntoma de hacia adonde apuntan en eclesiología la dirección de los turnos de la veleta que marca el rumbo de los vientos. EL FUTURO YA ESTÁ AQUÍ. Ex oriente, lux . La luz alumbra ya sin más requisitos para los tiempos venideros. Ex Oriente Lux. La luz del día augural de la fe remonta por Levante. Es el rostro del Redentor que viene, y su presencia se siente cada vez con más fuerza también.
En el caso de que sean ciertas las aseveraciones de los científicos americanos que aseguran haber hallado el rastro de radiaciones que impregnaron el cadáver devolviéndolo a la vida, cabría suponer que la fuerza de aquella eclosión hizo saltar por los aires la losa del sepulcro y que Jesús transformado en cuerpo de luz venció a la fuerza de la gravedad . Hay un halo inexplicable en toda la composición. En la región intercostal destacan las secuelas de una incisión o boquete, pero sobre todo, examinada la cavidad bucal, en su interior fue encontrado vestigio de una leptón ( moneda antigua hebrea de los tiempos de Pilatos) en cuya sobrehaz se dibujaba la efigie del emperador reinante, Tiberio.
Los griegos y los rusos celebraban ya en el siglo VIII la fiesta de San Mandylion, o la del Santo Rostro. Este es un dato muy a tener en cuenta para obviar las cábalas de aquellos que datan su aparición en el siglo XIII.
Asimismo, ceba la hipótesis de que la sábana de Turín pudiera no ser la auténtica sino una copia de la original que estuvo mucho tiempo en Constantinopla. Hay en el mundo varios santos rostros. Sin ir más lejos en España hay dos, el de Jaén y el de Oviedo.
Javier Briansó, ingeniero de Minas y miembro del Centro de Sindonología corroborando los trabajos de los profesores italianos Bollone, Ballosino y Zacà,en un interesante trabajo aunque demasiado técnico aparecido en el periódico La Nueva España(10-II-1997) data mediante fórmulas químicas que el lienzo de la Cámara Santa ovetense fue fabricado en el siglo VII, por lo que no puede ser el original. Sin embargo, es del todo seguro de que la reliquia de José de Arimatea existió y que , si no en su estado original, al menos ha llegado hasta nosotros como una señal cierta de la existencia de Cristo y que su espíritu pervivirá hasta el fin de los tiempos. El quinto evangelio se transforma de esta forma en la máxima reliquia de la cristiandad. Su rostro se estampa por doquier y está resurgiendo. Es la mirada que vuelve para dar esperanza a los hombres. Es una luz interior que se siente adentro más allá de las diferencias externas de criterio, las reivindicaciones históricas, la malicia de los hombres o las razones de Estado o de la alta política. Son ojos llenos de misericordia y de perdón, porque pertenecen al orden esotérico ( lo que está dentro ) y que trascienden lo exotérico, lo aparente, lo externo. Sobre ambos planos del Espíritu y la Carne se proyecta el gran combate, el largo camino de la Humanidad hacia su destino. Quizás haya muchos que sigan poniendo en tela de juicio los milagros. Se precipitan sin duda al rechazarlos categóricamente, porque , como escribía Agustín hace mil quinientos años, un milagro no acaece en contradicción con las leyes de la naturaleza sino en contradicción con las leyes de la naturaleza que nosotros, en nuestros limitados alcances, conocemos. El obispo de Hipona deja así la puerta abierta a la investigación y al progreso.
Antonio Parra Galindo
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MISTERIOSOS
MILAGROS
DE
LA SABANA SANTA
DE TURÍN
POR
ANTONIO PARRA GALINDO
Según un reciente informe de peritos y paleólogos, es cierto que este ornamento pudo pertenecer al Señor
Es una historia apasionante que comienza en la Edad Media, en la que se funde la verdad con la leyenda y el mito. Unos dicen que se trata del verdadero rostro de Cristo. Otros que es un fraude. En realidad la Sábana Santa de Turín se ha convertido en la reliquia más polémica de toda la catolicidad desde que fue captada en los negativos de un fotógrafo italiano hace justo un siglo. La peripecia experimentada por este trozo de sudario hebreo - o medieval ? - desde Jerusalén a Edesa, hoy ciudad turca, y de allí a Constantinopla de cuya catedral fue expoliada por los templarios y trasladada a Francia, y de allí a Italia sería materia suficiente como para llenar con libros y documentos toda una recóndita galería de los archivos secretos vaticanos cerrados a cal Sindonología y canto. Ha dado lugar a una nueva rama muy específica de la ciencia histórica que se llama . Y, coincidiendo con la salida a luz pública de las famosas placas de Secondo Pía en 1898, la literatura esotérica es un género con garra en la sociedad de consumo, inquieta por las cosas del más allá pese al cacareado materialismo.
Los cristianos griegos denominan a la famosa efigie Mandylion , que quiere decir el paño sagrado. En el siglo VI el patriarca Nicolás Mesartes ordenó su traslado desde Edesa hasta la catedral de Santa Sofía. De acuerdo con una leyenda apócrifa, Cristo no murió tras su suplicio en la cruz. Cuando lo dieron por muerto, su amigo Nicomedus pidió sus restos al prefecto Pilatos y saliendo de Jerusalén a favor de la noche se llegó hasta el enterramiento, curó las heridas del crucificado muy maltrecho pero aun con alientos y trasladó al herido hasta Edesa donde el Salvador sometido a un tratamiento de hierbas, pues Nicodemus era médico apotecario, vivió hasta los noventa años una segunda vida oculta. Su mortaja consistente en el paño mortuorio con que los judíos acostumbraban a ceñir a los difuntos quedó impregnado de los rasgos físicos del Señor como consecuencia de las substancias aromáticas y conservantes con las que fue fajado en el acto de inhumación: aloe, mirra y cinamomo y otros aditamentos balsámicos con los cuales los antiguos atajaban el proceso de descomposición. Las cintas y vendajes que encontraron las Santas Mujeres en la mañanita de Pascua aparecieron impregnadas del olor corporal y las marcas de la silueta de Jesús. Según la costumbre judía, depositaron en la cavidad bucal del finado un denario al objeto de poder pagar al Barquero, cuando se presentase a Caronte quién pasaba los muertos a la otra orilla de la laguna Estigia previo pago del salvoconducto. A todos los difuntos se les introducía en el paladar o sobre la frente el óbolo de costas para la postrer singladura. Era un rito griego que los hebreos asimilaron en sus exequias. Curiosamente, en la Sabana Santa quedan vestigios metálicos en forma de redondel que bien podría haber sido producido por un denario. Esta es una historia muy bonita aunque difícilmente creíble.
Todos los viernes del año hasta su expolio por los cruzados de Godofredo de Bouillon era trasladada la reliquia desde la catedral de Santa Sofía a una iglesia extramuros , que llevara por nombre Agios Ivan Xristiteli, emplazada en el arrabal Blancherna, en la propia Estambul. Los otomanos la destruyeron.
El Mandylion o Santo Sudario es seguramente después del lignum crucis que trajo Santa Helena en el siglo IV desde el Monte Calvario la reliquia más venerada y una de las más espectaculares a pesar de que su autenticidad ha sido muy debatida habiendo generado apasionadas controversias dentro de la
comunidad científica. La razón parece amotinarse contra el legado de esta tradición. Sin embargo hay razones que manda el corazón que no entiende la lógica. Los detractores del Santo Síndone no ven ello más que el prurito de la imaginación calenturienta, un embuste que se sacaron los curas de la manga de la estola para enriquecerse a costa de las credulidades del vulgo. El clero sabe estar al santo y a la limosna. Por consabido hay que dar que la religión bien administrada es una fuente de divisas y el soporte más fiel del poder en todas las épocas, porque no vamos a contradecir a Lenin en lo del opio del pueblo. Esto ha pasado algunas veces. Nadie puede resucitar. Va contra las normas físicas y la naturaleza no puede forzar sus propias reglas , establecidas por Dios. ni ir más allá de sí misma. Los detractores de los milagros y los que no creen en la Resurrección - tenían ya un precedente en el pueblo hebreo, una de cuyas sectas, los saduceos, negaban el Seno de Abrahán - y de las sofisterías místicas recalcan que el documento de Turín fue una falsificación del siglo XIII llevada a cabo por un experto alquimista que conocía las reglas cromáticas de las manufacturas textiles y manejaba el pincel divinamente, porque seguramente sería un monje del Monte Athos especialista en representaciones iconográficas...Sea...
Es una opinión respetable, igual que las demás, pero, como dicen los británicos: there is more than meets the eye . Esto no es todo. Hay aspectos de la cuestión que no los abarca el ojo desnudo. El rostro de Cristo está en todas partes. Se multiplica. Viaja por Internet. La batahola de ondas hertzianas .En 1997 el paño salió milagrosamente indemne de una fuego que se declaró en la capilla del relicario de Turín. Algunos vieron en este hecho fortuito o provocado un signo.
LOS TEMPLARIOS
El legendario Jacques de Molay, maestre del Temple , al que por orden papal se encarceló en la Bastilla y se mandó ajusticiar - subió al patíbulo el 14 de marzo de 1314-, antes de ser pasto de las llamas formuló una profecía escalofriante por su implicación a tres bandas. Contra el trono de Francia. Contra la Sede Romana quien por aquellas fechas vivía los aciagos tiempos del cisma de Avignon con sus retahílas de papas y de antipapas, bulas, interdictos, excomuniones, etc... Era por lo demás un maleficio contra el trono de Francia pronunciado desde una mazmorra de la Bastilla, que se cumpliría matemáticamente en 1789 la noche que guillotinaron a Luis XVI. Un monarca de la Flor de Lís - profería el augurio - pondrá la cabeza en la toza; al papa lo meterán preso, y el rostro de Cristo nos mirará a todos desde el icono santo donde quedó plasmado por testimonio de su Resurrección al final de los tiempos. Será la contraseña de los signados a los que El vendrá a salvar en su segunda venida . El vaticinio del postrer clavero de los Caballeros del Temple que es muy similar a los que formula Juan en Apocalipsis anunciando que se estampará en la frente la señal del número de la Bestia: el anosmie o 666 entre los elegidos, y sólo ellos podrán vender y comprar ( no pensemos por favor en los intrigantes por lo herméticos y venales códigos de barras estampadas desde las cajetillas de cigarros hasta los paquetes de condones) parece haberse cumplido en la totalidad de sus tres apartados según nuestros vislumbres. Porque no solamente murió en la guillotina María Antonieta y el romano pontífice Pio IX fue internado en Santangelo por Napoleón sino que también se está produciendo una verdadera eclosión de iconos. Las estampas modernas de la imagen de Cristo no son ya las acarameladas calcamonías asexuadas y cursis de hace unos años sino que plasman esa mirada del Hijo del Hombre que puede ser de todos los hombres no de uno en concreto diseñada en el Mandylion o Santo Sudario. Nos referimos al Cristo abstracto posando en majestad y bendiciendo mirando enigmáticamente para nosotros con unos ojos de calor y de comprensión, pero con la frialdad y el hieratismo del Pantocrátor , que ciertamente no son de este mundo, porque trascienden el tiempo y el espacio, y con la caballera abundante y recogida hacia atrás a la manera de los iconos bizantinos .Es la vera efigie de la majestad solemne. Y hablando de iconos, claro está, ésta es la edad de la imagen cuando en cibernética no se podría funcionar sin los consabidos iconos virtuales del ordenador. Iconos es una palabra nueva que ha resucitado el lenguaje emblemático cargado de símbolos de los antiguos para comunicarse por señas jeroglíficas. Fluye por doquier. La proliferación de estas imágenes supone una verdadera revolución iconográfica en el seno de la Iglesia latina que ha adoptado las formas estilizadas y no antropomórficas de la griega a la hora de representar al Señor. En el principio era el crismón, que los cristianos de Roma marcaban sobre las bóvedas ocultas de las catacumbas. Con una ji (X) y la rho (P) griegas fundidas con la prótesis alfa y la apódosis omega, enunciando el principio y el fin de todas las cosas. Lo que abre y lo que cierra. La clave de la vida y de la Historia. El crismón se complementaba con el IXTHIOS,o pez eucarístico, que se corresponde a su vez con la palabra que en griego quiere decir pez y que en la simbología paleocristiana se traduce como CRISTO-JESÚS - HIJO DE DIOS. Estamos delante de la gran sigla, de bruces sobre el arcano de los misterios, a la sombra del Grial, que bien pudiera ser el Santo Sudario.
En los retablos de ahora y en los modernos altares de los templos edificados durante las últimas décadas se representar con harta frecuencia al Mandylion o Santa Faz, y a la Virgen como Odyguitria (la que muestra el camino) de la iconografía ortodoxa, idealización esquemática y escoltada por sendos arcángeles con figura humana con las alas distendidas y por debajo el epígrafe heleno Mater Theous( Madre de Dios). No se sabe cómo era Jesús en su carne mortal, pero éste es el único dato fiable, pues según las mediciones antropométricas del sudario, debió de medir entre 1,82 metros y 1,90 de estatura. Tenía la cara alargada y debió de ser un varón hermoso y bien proporcionado, la tez trigueña con una cierta retiranza aria más que semita, y los miembros bien proporcionados.
El cuadro de la Odyguitria ( La Virgen del Perpetuo Socorro) se le atribuye al evangelista Lucas que era médico y pintor, pero esta antiquísima tradición ha de ser acogida con reservas ya que tampoco tenemos pruebas precisas al respecto. Sin embargo, este ornamento sagrado, según el dictamen de los expertos que han determinado de un forma categórica e inconcusa las denominadas pruebas del carbono catorce llevada a efecto por científicos yanquis, obsecuentes con el criterio de que era una falsificación de urdimbre medieval.
II
El normando Geoffrey de Charny, un discípulo de Morlay , que estuvo preso en San Juan de Acre durante las cruzadas, llevó a Roma el lienzo funerario, para ser bendecido y cotejado. Con la anuencia del papa Clemente VII lo colocó en la cripta de la iglesia de Lorey. Formaba parte la famosa reliquia del legendariamente fabuloso tesoro de los templarios tan codiciado por el rey de Francia? Los historiadores se muestran de acuerdo en que una de las causas de la muerte del preboste de la Orden más importante que tuvo la Iglesia en los siglos finales de la Edad Media fue la codicia de Felipe el Hermoso de consuno con las apetencias de la Silla Romana. No se sabe a ciencia cierta bien lo que pasó, pero corría la voz de que los templarios eran grandes alquimistas y que guardaban no solamente el Grial que abría las puertas del cielo y de la felicidad en la tierra, sino que también habían alcanzado la fórmula secreta de transformar cualquier metal en lingotes de oro. Porque, familiarizados con las ciencias ocultas e íntimos conocedores de los arcanos de la crisopeya, habían accedido al ultimo grado de los conocimientos gnósticos . El que da llegar a la piedra filosofal. Pero todo esto es fabuloso. Volvamos a los hechos contrastados por la historia.
El lienzo funerario fue exhibido en París por la viuda de Geoffrey de Charny, del que se decía que era un hijo natural del maestro del Temple, Jacques de Morlay, que murió en el tormento de la hoguera. La condición de sacerdotal no era óbice por tales calendas para que personas consagradas como eran los monjes de las órdenes militares se reservasen el derecho de procrear y tuviesen comercio carnal con mujeres, y esto deshace también la especie vertida contra los templarios de practicar la pedofilia , reduciéndola a la categoría de bulo. Fue uno de tantos infundios que contra ellos fueron propalados por aquella época: la homosexualidad.
Clemente VII publica un rescripto para que la joya pudiera ser expuesta al público en la ciudad de Lirey. En 1578 ya está en Turín donde consigue convertirse en una de las grandes atracciones místico históricas de la capital del Piamonte, pero su ostentación a la devoción popular se restringe a días muy concretos del año. La reliquia había llegado muy dañada como consecuencia de un fuego que hubo en la ciudad de Lirey ; quedaron algunos chamuscones en los bordes, pero la pieza salvó también aquella vez milagrosamente.
Hasta el presente siglo a raíz de las espectaculares fotografías tridimensionales obtenidas en 1898 no se somete al pertinente análisis químico Con técnicas muy depuradas como los rayos infrarrojos y la utilización de sales especiales para rastrear toda su estructura con rigor exacto.
Se observa en la composición una serie de elementos conservantes como el áloe, savia de Terebinto, mirra y otras substancias balsámicas, pero lo que llama la atención de los estudiosos es un hecho poco común: en el lienzo aparecen partículas de plantas liliáceas hoy extinguidas y cuyo florecimiento los palinólogos( especialistas en botánica arcaica) fijan en Asia Menor y Palestina hace muchos siglos; esas yerbas nunca crecieron en Europa, a decir de los expertos, que vienen a ser los arqueólogos de la fitología. No es posible que en la Edad Media pudieran haberse producido estas flores en el Viejo Continente, a no ser que hubiesen sido transportados por vilanos o en alas de algún pájaro migratorio o por el aire mismo. Este es un argumento a favor de los que creen en la autenticidad de la tan controvertida tela.
Los estudios en razón de la polémica mundial suscitada fueron en incremento después de la II.G.M. cuando Turín , tomada por los americanos, a raíz de la caída del fascismo, llega a ser la capital europea del esoterismo. Los científicos USA han capitalizado el asunto desde aquel primer reportaje por la TV. en 1973, y sobre todo, a partir de las conclusiones de un equipo de investigadores de la NASA que detectaron en el paño las secuelas de lo que pudiera haber sido una explosión nuclear. Hay en todo ello materia esotérica para dar y tomar. Un género literario que inunda las librerías del mundo. Hoy muchos se refieren a la Sábana Santa de Turín como el Quinto Evangelio.
CUERPO MÓRBIDO
Todo es tan aleatorio como inconcuso a la vez. Cabe la instancia de que la tela en la cual fue envuelto el Señor fuese una falsificación llevada a efecto por algún ducho manitas italiano avezado a la técnica de la reproducción oleográfica precisamente en una época en que proliferaba el culto a las reliquias como retributivo fenómeno de fe en el más allá y en el negocio, que en este mundo pecador no hay ganancia mayor que allí donde se atisba algún hecho preternatural, supuesto o real, porque la aparición da siempre lugar a la peregrinación y, ésta al emolumento y la ganancia, como demuestra el hecho de que Fátima sea el capítulo más importante en el ingreso de divisas que tiene montado el gobierno portugués, y otro tanto podría decirse de Lourdes, y nada se diga de Jerusalén.
Es verdad. Tales apostillas son absolutamente razonables, pero tampoco hay que dar de lado al carisma como categoría inherente a la religión predicada por el Nazareno, que cerró la boca de los leones en el circo de Roma, sobrevivió a las herejías, las revoluciones aguantando el filo de la espada y sobrevivirá a sus enemigos de dentro y de afuera, a los errores de sus ministros, a las modas y a la especulación política. El icono de Turín en esta época iconoclasta e iconográfica a la vez , puesto que domina la imagen que triunfa y vende, la que entra por los ojos, se ha convertido en un símbolo de la espiritualidad de nuestros días, un tanto supersticiosa, la verdad sea dicha, porque no cabía otra fórmula. Puede ser un argumento también de que las relaciones con la divinidad, pese al mecanicismo, el materialismo y el racionalismo de la época no han quedado rotas. El hombre no puede remediar su fascinación por la trascendencia en medio de las dudas y del ambiente propicio a no creer más allá de lo que se plasma delante de nuestras propias narices.
La Santa Sábana con su hermetismo misterioso parece encerrar la clave de ese misticismo gnóstico que fascinó a los Templarios tan vilipendiados pero al mismo tiempo tan en boga. Está volviendo el Temple ? Marcará el milenio entrante el cenit del culto gnóstico como elemento catalizador de síntesis entre todas las religiones en la época del ordenador y de las conquistas espaciales a la sombra del Evangelio? Es a lo que aspiraban estos frailes, grandes constructores de catedrales, introductores en Europa de la tradición caballeresca, apasionados de la sabiduría y de la ciencia ( en todas sus construcciones arquitectónicas introducían como elemento decorativo o mascota de protección un baffamot que era una especie de cerebro electrónico) pero Roma, que años más tarde procesaría a Galileo, celosa de su poder desmedido, y que nunca ha permitido que nadie le hiciese sombra, como se comprueba a lo largo de los turbios manejos de los papas de la Edad de Hierro, entre el siglo VII y el año 1000, o la oposición con el emperador germano en la siniestra cronología de las Investiduras, sin hacer excepción de los pocos edificantes pontificados Borgia, mandó a Jacques de Morlay al quemadero. Su maldición pesa cual negra sombra sobre Sede Apostólica. Pedirá ella perdón rehabilitando al ultimo clavero de la Orden de San Juan Bautista - algunos anales lo acreditan como mártir - como ya hizo con Galileo o con Savonarola?
Todo eso está por ver. En cualquier caso , los templarios, iniciados en los secretos gnósticos y teniendo en cuenta su condición militante y penitente, porque en eso siguen al Precursor, tendrían la clave del futuro y pudieran salvar a la Iglesia de tanto poder, tanta regalía, tanto ir y venir en papamovil, rescatandola de las garras de los italianos y del mal más grave que siempre la amenaza: la macrocefalia y el dogmatismo, tan lejos del Mensaje del Sermón de la Montaña Eso pertenece al aparato externo y a la hojarasca vicaria de los intereses humanas. Por eso, la Iglesia que es eterna y se encuentra dominada por la sabiduría del Espíritu , cuando muere un papa, lleva a cabo uno de los ritos funerarios más emocionantes y significativos. El anillo pastoral del pontífice fallecido es machacado con un martillo de grandes proporciones y en torno al cadáver se hacen nueve abluciones y se rezan nueve responsos, no uno como al común de los mortales, porque el pontífice al heredar la tiara se cree que está sujeto a más tentaciones - sobre todo las que otorga la gloria y el poder en ejercicio - que los que nunca tuvieron sobre sus espaldas responsabilidad tan abrumadora como la de ejercer las funciones de representante de la divinidad en la tierra. Suele decirse que casi todos los sucesores de Pedro al llegar la hora de la muerte se sienten atormentados y sobrecogidos pues temen más que las personas ordinarias el juicio de Dios. Su responsabilidad es entonces mayor y al rendir cuentas se le reclamará en grado consonante con las obligaciones. En la ceremonia de entronización hay otro rito pontifical que recalca ese aspecto de la fugacidad de las cosas humanas: el cardenal arcediano va delante de la cruz procesional portando en la mano una tea encendida que pronto se apaga, mientras exclama:
- Pater sancte, sic transit gloria mundi. (Así se esfuma la gloria del mundo, Santidad).
Por desgracia - lo demuestran los anales - muy pocos elegidos para tan alta misión entre los sucesores de San Dámaso hacen demasiado caso del imperativo de rúbrica en el ceremonial de coronación .Solieron caer en la tentación del poder y de la vanagloria por causa de la flaqueza de la condición humana. El poder supone una tentación, porque corrompe, y el poder absoluto más aún.. Sin embargo, portentos como el que nos ocupa, o los sucesos extraordinarios de las apariciones de los que se tienen noticia en el mundo de hoy, pero , sobre todo, esa llamada interior de la fe que sienten en su interior muchos cristianos, esa intuición, esa luz interior, que es lo más maravilloso del cristianismo, que nos ayuda a pechar con las múltiples dificultades de nuestra vida, consuela en las aflicciones, y guía en la oscuridad de los caminos de la existencia plagados de abrojos y de peligros, apuntalan más nuestro compromiso con el Evangelio a despecho de las pompas y vanidades terrenales o las miserias y grandezas del peso de la púrpura, que no todos saben llevarla con dignidad. Es lo de fuera, hojarasca que mudará el viento de los otoños. La savia está en el interior del tronco del árbol y seguirá brotando cada primavera. La Iglesia esotérica siempre estará más viva que la exotérica que es la aparece relacionada con las fuerzas seculares.
III
En el oficio divino se repite con frecuencia un adverbio latino (multifariam = en muchos puntos y lugares) que expresa ese alto concepto sobre la multiplicidad sorprendente y de las formas más inauditas con que se deja sentir la acción divina sobre el mundo. El rostro de Dios es poliédrico y su casa encierra infinidad de moradas. La idea que esbozó el Maestro a lo largo de sus predicaciones por Galilea pertenece a la filosofía gnóstica que fue la primera en descubrir la diversidad de la realidad casi inabarcable por lo complejo de las situaciones en que se manifiesta y recapitula Einstein en su Teoría de la Relatividad. Aquel descubrimiento hizo que el mundo dejase de ser el mismo. Por lo pronto, puso a toda la Física patas arriba, disparó las naves espaciales hacia el cosmos, colocó sobre el frágil planeta nuestro el cartel de: No tocar .Peligro de explosión nuclear con la tibia y la calavera imbricadas. Jesús insiste en este principio calcado de la ideología de Hermes por lo menos en tres ocasiones cuando dice: No juzguéis y no seréis juzgados... Dejad que los niños se acerquen a mí ... Amáos los unos a los otros . Es decir: dejaralo estar, no busquéis los cuatro pies al gato, que la verdad está en el amor. Pero el amor es conocimiento y es correlativo a la sabiduría porque sólo el que conoce vive y ama. Por contra, el odio, los prejuicios humanos siempre suelen amancebarse con la ignorancia y con la inquietud. Esa idea la había predicado, casi veinte siglos antes que Cristo, Hermes Trimegisto de Alejandría, el tres veces grandes, tres veces santo, tres veces sabio , convirtiendola en piedra angular de su filosofía. Es un maravilloso canto a la vida interior, atrio inviolable de la libertad de pensamiento y de acción.
El Santo Síndone, curiosamente, en abono de un enigma que no cesa, fue guardado sólo en iglesias y basílicas dedicadas a la advocación de San Juan Bautista ( en Edesa, Lirey, Estambul,Turín) , porque iglesia templaria del Precursor era la de Lirey e iglesia del mismo nombre es la de Turín donde se encuentra la más famosa teca de la Cristiandad. Su primer bastión fue San Juan de Acre orilla de Jerusalén. Es una casualidad o un signo de la Providencia ?
He aquí el monumento eterno de la gloria de los sufrimientos de Jesús Crucificado. Venid a adorarlo... Ave, o bona crux , spes unica, dijo en un sermón pronunciado el 24 de junio de 1898 en la iglesia de Turín antes mencionada el arzobispo metropolita, Agustín Richelmy en los fastos de la ostentación de la reliquia a la veneración popular. Por tales fechas el mundo entero se conmovió con las impresionantes fotografías obtenidas por un fotógrafo local, SECONDO PIA, el cual en enero del mismo año obtuvo unas placas del Síndone en tres dimensiones, en las cuales los científicos apreciaron signos de haber estado enrrollada la sábana a un cuerpo mórbido en estado de putrefacción. En el pecho quedaban marcas de flagelación. En las sienes, las de las espinas y en las muñecas los estigmas de los clavos. Es el primer testimonio que ratifica que el reo no pendió del madero por las palmas de las manos sino por las muñecas, y que no hubo cruciferagio o rotura de las piernas , como testimonia el Evangelio contraviniendo así las normas del tormento infligido por los romanos a condenados a morir por muerte de cruz. Para acortar la agonía se les partían las piernas a los crucificados , pero con Jesús no hubo necesidad al comprobar sus esbirros que acababa de expirar. El centurión optó por el golpe de gracia de hincar la lanza por los ijares, de donde manó sangre y agua .La Quinta LLaga.
El reportaje de Secondo Pía dio vuelta al atlas. Muchos creerían, pero otros pensaron en un montaje bien amañado por los curas. El rey Humberto I de Italia prohibió hacer más fotografías. Las instántaneas aparecían en todo su esplendor como dotadas de un fuerza indeleble que conmovió a las naciones ante el aspecto sereno de aquel varón de dolores de faz augusta que recordaba la visión del semblante de Cristo ya manejado por la iconografía oriental. El arte de la fotografía estaba en pañales, pero la cámara oscura y el trípode de Secondo Pia utilizando los polvos de oxalato de hierro y de manganeso habían sacado una reproducción perfecta y hasta diríase que inquietante. Tras los baños de plata pertinentes quedaría positivada sobre el negativo la imagen en cuestión proyectando una silueta indeleble del cuerpo del Señor, una composición en la que destaca la faz inalterable del sujeto pese a los sufrimientos. El varón de dolores que profetizara Isaías se muestra ajeno a sus propios padecimientos, porque los ha vencido, los ha remontado.
En diciembre de l899 otro francés aficionado a la fotografía, Ulises Chevalier, fue llamado a declarar ante un tribunal de Lyon, donde un grupo de católicos habían sido denunciados por falsarios, después de haber comercializado y puesto a la venta las famosos negativos de su colega italiano. En la deposición forense que haría Chevalier delante del juez, declaró que las placas habían sido tomadas del natural sobre el original existente y que no estaban pintadas ni retocadas. Francia vivía entonces conmovida por el asunto de Dreyffus y las revelaciones de Ulises Chevalier a muchos les parecía una salida de tono. Se exaltaron los ánimos de los círculos agnósticos y ateos preponderantes en la Francia de fin de siglo. Se reclamó el veredicto del Pontífice sobre el tema, pero ni León XIII ni su sucesor se pronunciaron ni en un sentido ni en otro al respecto del escabroso aliciente del Santo Sindone. Sería Pio XI, un intelectual y escritor que pasó la mayor parte de su vida hasta su elección encerrado en la biblioteca y que, contra todo pronóstico creía en el carisma de los milagros ( él canonizó a Teresa de Lisieux proclamando la lluvia de rosas ) el que dictaminara que la reliquia del Santo Sudario estaba admitida por la Iglesia.
LAS CARAS DE BELMEZ
Hace unos años la España franquista se sintió conmovida por un hecho que se salía de lo corriente. En una casa particular del pueblo jiennense de Bélmez aparecieron una serie de rostros en el muro perfectamente diseñados. Se comprobó que allí hubo enterrados o emparedados personas. Sucede que el sudor mórbido de los moribundos y de los cadáveres exhala urea , una sustancia química que al fermentar produce amoniaco. Cuando se evapora el amoniaco éste a su vez cría tanino; el tanino determina finalmente que surjan imágenes. Es una reacción química equiparable al proceso que utilizan los fabricantes de calcamonías. El amoníaco de las caras de Bélmez y las impregnaciones de la Sábana Santa obraron ese milagro inexplicable aparentemente, aunque en el fondo estén perfectamente incardinadas sus causas en las leyes físico químicas.
Hubo un factor de sorpresa añadido cuando en 1973 los militares estadounidenses J. P. Jackson y Eric Jünger revelaron que habían encontrado en el sudario marcas de lo que podía haber sido un estallido de radiación solar. Los evangelistas narran cómo las santas mujeres que se acercaron al sepulcro vieron una luz sobrecogedora que las hizo temblar, pero un ángel vino a confortarlas al tiempo que decían que al que buscaban no estaba allí, que había resucitado. Sus declaraciones estallaron como una bomba. Los más aviesos fueron diciendo por ahí que Cristo era un extra terrestre. La Nasa estaba por esos días metida de lleno en la investigación de los platillos volantes. Las teorías de Jackson y Jünger no pudieron concretarse en demostraciones fehacientes pero contribuyeron a que no menguase el interés por la venerable reliquia.
Resulta que ésta era de una textura inconsútil al igual que la túnica de la cual hablan los evangelistas y que los soldados romanos se jugaron a la taba al pie de la cruz. Era de lino sin costuras y en un segundo análisis volvieron a aparecer los restos de pólenes y de yerbas exóticas. Las pruebas del carbono catorce incoadas en la segunda mitad de la década de los 90 dieron resultados negativos sobre la antigüedad del documento, pero, a decir de determinados sindonologos, las pruebas del carbono, que dataron el lienzo hacia comienzos del siglo XIII y nunca en los inicios de la era actual dijeron que no habían sido llevadas a cabo convenientemente. Otros alegaron que dichos experimentos fueron una forma de poner a la Iglesia contra las cuerdas mediante comprobaciones periciales . Ésta hubo de admitir que, si bien es posible que la sabana no fuese el sudario de Cristo lo resulta infalible que se trata de la reliquia más veneradas del orbe. La que ha creado a lo largo de los siglos un mayor nivel de fervor y de expectación..
En éstas estábamos cuando se produce un pavoroso incendio en la capilla de San Juan Bautista de Turín en 1997 con el papa en el estribo del avión para emprender uno de sus múltiples viajes. Todo el edificio fue pasto de las llamas pero el vestigio de incalculable valor sale indemne del fuego, un hecho que unos reputan de milagroso, pero que otros atribuyen a la pericia y al arrojo de un bombero que logra rescatarlo cuando ya el cofre de metales preciosos donde se guarda el corporal daba señales de fundirse. Hay quien atribuye el percance a la acción intencionada de una mente maligna y criminal. Porque ha de ser tenido en cuenta que Turín es una de las ciudades mundiales donde más casos de posesión diabólica se han dado últimamente , al ser la industriosa capital del Piamonte sede de sectas y conventículos que profesan el culto al diablo. A los pocos meses del incendio sobreviene el terremoto de Asís, otro hecho que tampoco los estudiosos de las ciencias ocultas del siglo XX dan por casual, porque así estaba escrito de antemano. Ya lo anunciaban algunas profecía
IV
Cabe la posibilidad de que nos encontremos ante una falsificación, obra de la alquimia que bien pudo ser trocado en la retorta de algún monje oscuro conocedor de las leyes secretas que rigen el crisol de los metales y la combinación de los ungüentos y colores. La alquimia era el arte sagrado , el gran desideratum de la sabiduría hermética.. Se cultiva durante toda la Edad Media en Europa. Fue traída por los árabes. Nunca se practicaba a la luz del día sino en el interior de lóbregas cavernas, donde hombres excéntricos de narices corvas y largas melenas de guedejas grises, rodeados de matraces, alquitaras y otros cachivaches y vidrios tallados que contenían líquidos de diversos colores en ebullición llevaban a cabo sus investigaciones. El introductor de la alquimia en España fue Raimundo Lulio el Venerable. El doctor iluminado como se le conoce en los estudios teológicos murió mártir apedreado por los sarracenos fundamentalistas. Si no ha subido hasta ahora a los altares quizás se deba a haber cultivado esa actividad tan sospechosa como es la alquimia.
Hubo un papa, Juan XX, que cultivó la panacea universal o arte de transformar en oro los metales; en su testamento otorgado el l334 legó a sus herederos una suma considerable de 28 millones de florines obtenidos en el alambique secreto que transmutaba en metales preciosos los viles y que practicó las ciencias ocultas toda su vida. Era un alquimista, y alquimista fue el famoso quiromántico y adivino de la corte de Juan II, el marqués de Villena,cuya tumba puede visitarse en los Jerónimos de Segovia. El tal marqués también conocido por el de Villena, ni palabra mala ni obra buena - tal debería de ser su catadura moral y su perfidia - se rumoreaba tenía pacto con el diablo y gracias a estas mañas conseguía resucitar a los muertos . Incluso llevó a cabo el primer caso de clonación de la historia fabricando un personaje que era idéntico a sí mismo. Merced a este doble logró salvar el pellejo multitud de ocasiones.
En la época de los magos medievales hacer una réplica o fabricar un sudario semejante al que tuvo en sus manos José de Arimatea no era cosa difícil. Había tecnología suficiente para ello, una tecnología que hoy se ha perdido como se ha perdido el secreto de los maestros que edificaron las grandes catedrales europeas. La alquimia y la sabiduría hermética era la pasión de aquellos siglos , tanto como pudo serlo la cetrería o el conocimiento de las yerbas.
Un médico francés, el Dr. Barbet , comprobó en el lienzo de Turín hasta 120 marcas de azotes o golpes de flagrum - un palo al que iban unidas unas correas de cuero rematadas por bolas de acero verbera con las que se flagelaba a los condenados - llegando a la conclusión de que la paliza fue administrada por dos verdugos diferentes los cuales se habían ido turnando en la tarea.
Cinco hebras de la Sábana escudriñadas al microscopio en 1973 revelaron que la imagen se plasmó sobre un cuerpo mórbido porque había rastros de amoniaco y partículas de sustancias aromáticas y residuos de fanerógamas no habituales en el continente europeo pero bastante frecuentes en Asia . Se encontraron manchas de sangre coagulada y las ya consignadas marcas de clavos en las muñecas. Cristo pesaba unos ochenta kilos y medía poco más de un metro ochenta centímetros. Murió de asfixia a causa de su posición en la cruz que determinaría un encharcamiento de los pulmones al cesar éstos de bombear aire. Las pruebas del carbono catorce fueron efectuadas por William C. Libby, premio Nobel de Química 1960, uno de los investigadores que contribuyeron en 1946 al hallazgo de los tan traídos y llevados Rollos del Mar Muerto . Aunque se trata de una reacción química harto compleja podría sintetizarse de la manera siguiente: cada minuto que pasa los seres vivos crean una cantidad determinada de isótopos carbono catorce , pero cuando esas plantas o animales cesan de absorber oxígeno terminan al punto las emisiones del isótopo. Es posible calcular la edad de un fósil o de cualquier materia siguiendole la pista al carbono catorce estudiando al microscopio las adherencias y trazas que deja en torno suyo todo cuanto tuvo vida. La edad de un árbol se puede colegir al trasluz de los arillos concéntricos .que aparecen como un diagrama al hendir la sierra en el tronco para cortarlo .El surco de cada circunferencia es una floración. Pues muy similar a esto es mutatis mutandis la prueba del carbono catorce. La energía ni muere ni se destruye, sólo se transforma. A tenor con ese axioma hay una interdependencia cósmica o lo que llaman algunos científicos el EFECTO MARIPOSA. El batir de las alas de un insecto en Nueva York puede provocar un huracán en Mallorca. La biblia traduce dicho principio sinérgico con una frase que nos debe llenar de esperanza a los creyentes: vita mutatur non tollitur . La vida se cambia o transforma nunca se arrebata. La materia se adapta y adopta otras formas (metamorfosis). Los que creen en la reencarnación se basan en este principio del efecto mariposa , porque la energía es indestructible y todo lo que vive deja un rastro indeleble en algunos casos como demuestran algunos estudios con fósiles. Las investigaciones palinógrafas a que ha dado lugar el Santo Síndone determinan la existencia de otra flora muy diferente a la que hoy conocemos. Algunos folículos aparecen estratificados cuando se contempla toda la pieza a través del ojo implacable del microscopio, en forma de muescas o adoptando otras formas caprichosas de la naturaleza.
La familia Charny lo tuvo en su poder hasta 1356. El Santo Sudario ha resistido dos incendios, varios intentos de robo. La imagen aparece estampada o impresa mediante una técnica xilográfica, de la misma forma que pudiera ser estampado un vestido a la moda. La faz del Señor emerge con una semblanza muy humana y muy divina al propio tiempo, emanando toda su figura recogimiento y quietud sin convulsiones macabras ante la muerte. Es un rostro de varón muy de antes y después, en el que se funden el hoy , el mañana y el ayer, porque es valedero para el ser humano de todas las épocas. Se da la coincidencia de que la reliquia más venerada por la Iglesia latina presenta una clara tendencia griega. En ello tal vez haya que encontrar un síntoma de hacia adonde apuntan en eclesiología la dirección de los turnos de la veleta que marca el rumbo de los vientos. EL FUTURO YA ESTÁ AQUÍ. Ex oriente, lux . La luz alumbra ya sin más requisitos para los tiempos venideros. Ex Oriente Lux. La luz del día augural de la fe remonta por Levante. Es el rostro del Redentor que viene, y su presencia se siente cada vez con más fuerza también.
En el caso de que sean ciertas las aseveraciones de los científicos americanos que aseguran haber hallado el rastro de radiaciones que impregnaron el cadáver devolviéndolo a la vida, cabría suponer que la fuerza de aquella eclosión hizo saltar por los aires la losa del sepulcro y que Jesús transformado en cuerpo de luz venció a la fuerza de la gravedad . Hay un halo inexplicable en toda la composición. En la región intercostal destacan las secuelas de una incisión o boquete, pero sobre todo, examinada la cavidad bucal, en su interior fue encontrado vestigio de una leptón ( moneda antigua hebrea de los tiempos de Pilatos) en cuya sobrehaz se dibujaba la efigie del emperador reinante, Tiberio.
Los griegos y los rusos celebraban ya en el siglo VIII la fiesta de San Mandylion, o la del Santo Rostro. Este es un dato muy a tener en cuenta para obviar las cábalas de aquellos que datan su aparición en el siglo XIII.
Asimismo, ceba la hipótesis de que la sábana de Turín pudiera no ser la auténtica sino una copia de la original que estuvo mucho tiempo en Constantinopla. Hay en el mundo varios santos rostros. Sin ir más lejos en España hay dos, el de Jaén y el de Oviedo.
Javier Briansó, ingeniero de Minas y miembro del Centro de Sindonología corroborando los trabajos de los profesores italianos Bollone, Ballosino y Zacà,en un interesante trabajo aunque demasiado técnico aparecido en el periódico La Nueva España(10-II-1997) data mediante fórmulas químicas que el lienzo de la Cámara Santa ovetense fue fabricado en el siglo VII, por lo que no puede ser el original. Sin embargo, es del todo seguro de que la reliquia de José de Arimatea existió y que , si no en su estado original, al menos ha llegado hasta nosotros como una señal cierta de la existencia de Cristo y que su espíritu pervivirá hasta el fin de los tiempos. El quinto evangelio se transforma de esta forma en la máxima reliquia de la cristiandad. Su rostro se estampa por doquier y está resurgiendo. Es la mirada que vuelve para dar esperanza a los hombres. Es una luz interior que se siente adentro más allá de las diferencias externas de criterio, las reivindicaciones históricas, la malicia de los hombres o las razones de Estado o de la alta política. Son ojos llenos de misericordia y de perdón, porque pertenecen al orden esotérico ( lo que está dentro ) y que trascienden lo exotérico, lo aparente, lo externo. Sobre ambos planos del Espíritu y la Carne se proyecta el gran combate, el largo camino de la Humanidad hacia su destino. Quizás haya muchos que sigan poniendo en tela de juicio los milagros. Se precipitan sin duda al rechazarlos categóricamente, porque , como escribía Agustín hace mil quinientos años, un milagro no acaece en contradicción con las leyes de la naturaleza sino en contradicción con las leyes de la naturaleza que nosotros, en nuestros limitados alcances, conocemos. El obispo de Hipona deja así la puerta abierta a la investigación y al progreso.
Antonio Parra Galindo
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