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domingo, 6 de enero de 2019

LUZ NAVIDEÑA `PR EL PRIMADO DE LA IGLESIA ANGLCANA

Archbishop Justin Welby and friends reflect on the meaning of Christmas in new book ‘In This Light’

Archbishop Justin Welby has published a new book bringing together people from all walks all life to reflect on what Christmas means to them.
In This Light contributors
The Archbishop of Canterbury, Justin Welby, has published a new book bringing together people from all walks all life to reflect on what Christmas means to them.
‘In This Light: Thoughts for Christmas’ features stories from the world’s toughest prisons, to people finding courage in refugee camps. Doctors reflect on facing fear at the operating table, while others talk about finding hope after disappointments and struggles at Christmas.
Published by Harper Inspire, the collection of personal essays includes contributions fromBishop Michael Curry, Julie Etchingham, Jonathan Bryan, Matt Brittin, John Kerry, Sadiq Khan, Agnes Abuom, Hosam Naoum, Sally Phillips, Bryan Stevenson, Alan Titchmarsh and Hae Woo, among many others.
In This Light books
All royalties from the book are being donated to three charities close to Archbishop Justin’s heart. They will be divided equally between Caring for Ex-Offenders, part of the ministry of Holy Trinity Brompton; the Equal Justice Initiative; the Melanesian Mission and Charis Tiwala.
As diverse as the authors, Archbishop Justin hopes that these raw and honest stories will resonate with people from all backgrounds, faiths, and spheres of life.
“As you will quickly see, they are an eclectic bunch – believers and sceptics, priests, teachers and artists – each of whom, has shaped how I think and work,” the Archbishop said.

sábado, 5 de enero de 2019

AZORIN ALMA DE ESPAÑA EL PAISAJE



Azorín retratado por Zuloaga. Colección particular, Madrid.






AZORIN EL GRAN MAESTRO DEL PERIODISMO


AZORÍN Y ASTURIAS

"Se conoce la calidad de un escritor por la manera de afrontar el paisaje" escribía José Martínez Ruiz allá por el año 1913 cuando visita Asturias acompañado por Ramón Pérez de Ayala. Querían rendir homenaje a Clarín muerto un decenio antes. Hierático y refractario al elogio, se siente impresionado por el escenario grandioso y lo plasma en uno de sus artículos en El Imparcial: "la mañana de nuestra visita bajo un cielo ceniciento un cendal de niebla se iba desgarrando sobre los árboles de la colina. Ese verde suave y ese gris melancólico es el que ha puesto Clarín en sus paisajes"
Amigo de Leopoldo Alas el escritor alicantino se carteaba con él y le dedica una de sus primeras novelas "La voluntad" que no tuvo éxito de público pero de crítica sí. el ovetense saluda la irrupción literaria de Azorín como una voz nueva dentro del orfeón literario matritense aunque atisba fallos en su carpintería narrativa.
Don José Martínez Ruiz que pronto cambiaría su nombre de pila por el pseudónimo de Antonio nunca fue un novelista. Se trata de un autor camaleónico que experimenta una metamorfosis a lo largo de los años.
Sus tiempos de anarquista cuando iba por Gran Vía con un paraguas rojo y era de aspecto gordo, jovial, juerguista, avuncular se transforma en el escritor retraído que hablaba poco, comía menos, dejó de fumar por recomendación de Marañón, no acudía a los cafés, elegante y misterioso, que después de ser subsecretario de Maura abandona la política y se dedica a recorrer los pueblos de España en tren a caballo y a veces en diligencia. Debió de ser algo camaleónico, un tipo enteco de aspecto señorialhabía adelgazado veinte kilos después de un cólico nefrítico.
El dolor de España según su mejor biógrafo Alejandro Fernández Pombotendría la culpa de esta metamorfosis.
Colgó su paraguas rojo en el perchero y se hizo monárquico aunque por poco tiempo. En 1936 emigró a París disconforme con la República y fue uno de los primeros intelectuales en regresar el mismo verano en que acaba la guerra. Ortega, Baroja, Pérez de Ayala, Gómez de la Serna, Casona, Sender vendrían más tarde reconciliados con el Régimen o tras la muerte de Franco. en mi época de estudiante en los colegios de frailes nos iniciábamos en el crudo ambiente del estudio y del trato con las musas leyendo los libros del autor de Monovar del Campo. A mí me pareció algo melancólico y cándido pero ya de viejo encuentro en él un maravilloso artista que derrama quintaesencias en sus libros. la palabra justa, el sustantivo olvidado que él desentierra hay que tener a mano siempre un diccionario cuyos párrafos no chirrían como los del iracundo Unamuno quien tampoco era novelista o esperpéntico y genial como Valle pero conciso en su brevedad y un gran visionario al que le dolía España y no se andaba con remilgos cuando dijo que el cine sería el arte del futuro.
Azorín es un paseante ensimismado, un itinerante, no un turista que pasaba por los viejos villorrios, sus laderas y cabezos, sus castillos derrumbados. Obsesionado por el olvido y el paso del tiempo, observando sus plazas, describiendo los corrales, los aperos de las casas de labor.
Eso sí, sin apasionarse manteniéndose distante y a un tiempo solícito. Le intimó un día Gómez de la Serna; "tú y yo, Pepe, somos dos turistas que vamos por el mundo con papel  lápiz y cuaderno  de notas en ristre". Contestó él: "No, nada de turistas. Ramón, somos dos transeúntes".
Viajero incansable, sus libros de viajes aun son referencia de las guías turísticas. Azorin inició un nuevo género literario: el libro de viajes.
Le importaba lo sustantivo no lo adjetivo de las gentes que viven en el entorno de un paisaje que condiciona su manera de ser. Se pateó las calles de Cataluña, Levante, Andalucía, Galicia, Navarra, Vascongadas, Aragón pero sobre todo leyó a los clásicos.
Resultó un apasionado de Gracián y deMontaigne maestros del ensayo. Saavedra FajardoCadalso y Pi Margall. Su pasión fue Castilla sobre todo un título "Un pueblecito Riofrío de Ávila".
Sin embargo aunque con los libros de ambiente castellano obtuvo fama creo que no supo entrar en el fondo de la cuestión. Cela y Delibes en mi opinión, como segoviano, supieron entender a Castilla en su austeridad, su altanería, su resistencia al sufrimiento, su aguante y tal vez su hidalguía en disfraz de servilismo. En Castilla siempre fue Sancho el héroe epónimo y no el Cid ni don Quijote no el Romancero sino las fondas, los arrieros, los labrantines. Galicia y Asturias tal vez tengan una faz más amable pero con el peligro de quedarse al margen y descentralizadas; en la periferia se siente a España de otra manera o no se siente a España. y quiera Dios que me equivoque.
Del talento al genio media un trecho y Azorín en su concisión y afán de brevedad de andar y contar lo que se ha visto (Vázquez de Mella decía que donde otros ponían una coma Azorín ponía un punto y sus libros son una buena propedéutica de iniciación a la literatura) Se manifiesta como un gran periodista un difícil arte en que la rapidez y la brevedad son las que van a misa. su concepción cinematográfica de la escritura casi profética hoy se ha cristalizado en la tecnología moderna, elwhatsap, los bylines o titulares que han de estallar igual que una tralla que retumbe en los oídos del comprador de periódicos decían los editores y jefes de noche de Fleet Street cuando yo vivía en Londres. Es lo moderno.
En el año 1966 uno de los primeros encargos que recibí cuando empecé a trabajar en esta profesión mi redactor jefe me pidió que fuera a ver a don Antonio a su casa de la calle Zorrilla 21 detrás del Congreso. Me citó para una fecha de diciembre pero estaba ya muy viejín, casi no veía, la interviú hubo de suspenderse. Poco tiempo después falleció Antonio Azorín el primero de marzo de 1967.
Razón llevaba el Maestro de Monovar del Campo en su abominación de lo tochos. Aunque bibliómano incorregible y cliente habitual de librerías de lance y de los tenderetes de la Cuesta Moyano se daba todos los días una vuelta cada mañana, los libros gordos no eran su agrado.
No obstante su obra abarca más de treinta volúmenes casi toda ella centrada en los artículos periodísticos. Se pasó la vida ante la cuartilla blanca. Escribió muchísimo.

EL NOVELISTA DE LOS CHALECOS AMARILLOS HACE FUROR EN LA DULCE FRANCIA: "LOA POLÍTICOS DE EUROPA NO ESTÁN DISPUESTOS A MORIR POR SU PUEBLO PERO LUCHARÁN A MORIR POR EL LIBRE COMERCIO"

Michel Houellebecq
 Houellebecq has praised Donald Trump for his protectionism, calling him ‘one of the best American presidents’, and has lauded Brexiters’ ‘courage’. Photograph: Agencia EFE/Rex
He is idolised as France’s biggest literary export, a controversial poet-provocateur who holds up a mirror to the grim truths of contemporary France.
So when Michel Houellebecq’s long-awaited novel, Serotonin, hit French bookstores on Friday morning with a massive print run of 320,000 copies, translations in several countries, and the author for the first time staying silent and refusing any interviews or media promotion, it was proclaimed a national event.
The novel’s release was accompanied by the Légion d’honneur, France’s highest national honour, being bestowed on the 62-year-old enfant terrible for his services to French literature by the president, Emmanuel Macron.
Serotonin, the story of a lovesick agricultural engineer who writes trade reports for the French agriculture ministry and loathes the EU, has been hailed by the French media as scathing and visionary. The novel rails against politicians who “do not fight for the interests of their people but are ready to die to defend free trade”.
Written before the current gilets jaunes anti-government movement began blockading roundabouts and tollbooths across France, it features desperate farmers in Normandy who stage an armed blockade of roads amid police clashes.
Houellebecq and his despairing, white, middle-aged, male narrators are seen as eerie predictors of the national mood. His last novel, Submission, which envisioned a France subjected to sharia law after electing a Muslim president in 2022, was published on 7 January 2015 and featured on the cover of the satirical magazine Charlie Hebdo just before terrorists stormed the offices of the publication and shot dead 12 people.
Platform, his earlier controversial novel about sex tourism and terrorism, came out a year before the Bali bombings of 2002.
Serotonin.
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 Sérotonine, Michel Houellebecq’s latest novel. Photograph: Bertrand Guay/AFP/Getty Images
Serotonin “confirms [Houellebecq’s] status as a visionary and he earns his stripes as a great novelist of the people”, wrote the rightwing paper Le Figaro.
The novel follows a typical Houellebecqian anti-hero: lonely, dissatisfied and ranking the sexual talents and bodies of the women he once slept with, as he returns to the Normandy countryside, remembering lost love. The narrator, an agriculture consultant, once worked for the agrochemical conglomerate Monsanto before an unsuccessful stint devising new ways of promoting Normandy cheese. He finds few joys in modern urban life, bar the array of hummus varieties in city-centre supermarkets.
In a recent article for Harpers, Houellebecq lauded Donald Trump for his protectionist policies, calling him “one of the best American presidents I’ve ever seen”, and praised Brexit: “The British get on my nerves, but their courage cannot be denied.” Serotonin, which will be published in English in September, viciously criticises free trade. Houellebecq has said he does not vote in elections, only in referendums.
As often is the case with Houellebecq, throwaway lines caused offence even before publication, with an MP for Macron’s La République En Marche party complaining that his narrator had called the western town of Niort the “ugliest place in France” and suggesting the novelist should “get out of his Parisian bubble” and explore the town.
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 Gilets jaunes resume protests and clash with Paris riot police - video
Indeed, being trapped in a Parisian bubble as a superstar writer is something Houellebecq has lamented. If he once embodied the anonymous, nihilistic man on the drab concrete outskirts, on France’s periphery, he has become such a wealthy figure that he complained at the last presidential election: “I’m part of the globalised elite now.”
Houellebecq’s worldwide fame came from his deliberately nihilistic novels depicting men trapped in loveless existences, admiring of casual sex. This seventh novel, in which a narrator looks back in detail at past girlfriends in terms of how they dealt with his penis, caused even some of his greatest admirers, such as the critic Nelly Kaprièlian from the magazine Les Inrocks, to concede: “He’s missed the Me Too movement – that’s obvious.”
Kaprièlian told French radio that his “dated” view of women was her only reservation about the new novel. A reference to bestiality and a description of a discovery of child abuse imagery on a suspect’s computer in the novel also irked some critics. Elisabeth Philippe wrote in L’Obs: “That whole aesthetic of the ‘old white male’ is dated, past its sell-by date and clearly no longer brings anything good. ‘What’s the point in trying to save a vanquished old white male?’ the narrator asks. What’s the point, indeed.”
Although Houellebecq has shut himself away from the media – he recently left it to his friend Carla Bruni, the singer and supermodel married to the former president Nicolas Sarkozy, to reveal on Instagram his latest marriage – he has not given up on cinema. Houellebecq has often appeared behind and in front of the camera, and has reportedly been filming with the actor Gérard Depardieu, with the two men playing characters at a seaside spa.
Meanwhile, Charlie Hebdo magazine, which in 2015 had featured Houellebecq on its cover as a haggard Nostradamus preparing to celebrate Ramadan, published a brief paragraph saying a new Houellebecq novel was about to be released. “We won’t be saying anything bad about it: the last time we did wasn’t a success for us.

viernes, 4 de enero de 2019

UN BABLE EN CADA VALLE

El ruinseñora


GARCÍA TRAPIELLO
08/07/2018
Queda aún mucha palabra vieja, incluso sin sentido, colgada del hablar de hoy y cada sitio tiene las suyas, les dicen localismos, voces ininteligibles muchas veces para el valle contiguo, que también tiene las suyas, faltaría más. En estas tierras a cada objeto o asunto se lo llama de seis o doce diferentes formas según lugares (toda esa enriquecedora diversidad que se uniformará y extinguirá cuando alguien invente una única lengua muerta puesta a resucitar de papo). Nunca hubo acuerdo posible, por ejemplo, para llamar filandón al filandón porque cada cual seguirá llamándolo a su modo: filorio, hila, calecho, hilorio, serano, hiladera...
Con los pájaros ocurre otro tanto; si ya fascina que en Palencia llamen «siete colores» al jilguero, supe hace poco que a este mismo pájaro lo llaman en zonas de Zamora, tan vecina y tan lejana, «ruinseñora»... ¿?... ni siquiera un equívoco ruiseñor o ruinseñor, no, ruinseñora... el ruinseñora, en masculino rarito... y esto quiere decir que en materia de jilgueros jamás se pondrían de acuerdo León, Zamora y Palencia (y en otras materias, lo mismo).
A quien no confunden en Zamora, ni aquí, es al gorrión al que llama pardal como media España, mote que le dio su plumaje pardo... vulgar gorrión que no pide permiso a Machado para colarse en sus versos, pardal más urbano que campesino, paisaje de cercanía humana, oportunista al quite y pícaro ladronzuelo de corral... inevitables pardales, vosotros, los más audaces, me evocáis todas las cosas.
Y sobre pardales hay malas noticias. Es totalmente cierto que su población se reduce drásticamente en muchos países. Aquí, también. Lo certifica mi balcón al que años atrás venían a menudo una o dos docenas de gorriones a chulearme la propina de unas migas de pan, pero este año sólo fichan cinco y, últimamente, se han reducido a sólo dos, ya no veo al resto, y son un macho viejo y una hembra joven, padre e hija deduzco, inseparables. ¿Y los demás?, ¿qué les está matando?, ¿el monóxido?, ¿quizá esta comida urbana tan distinta de antes?, ¿les va mal picotear en las terrazas que todo lo inundan?...

La Sibila retorna a la Catedral

Por tercer año consecutivo el templo gótico rescata una tradición propia que no se representaba desde el siglo XVI.


La Sibila, en la Catedral de León. FERNANDO OTERO PERANDONES -
La Sibila, en la Catedral de León. FERNANDO OTERO PERANDONES -
23/12/2018
Lugar: Catedral de León.
Hora: 20.30.
Entrada: gratuita.
La Catedral de León acoger hoy, a las 20.30 horas, el Concierto de Navidad Prophetia Nathalis Domini et Versus Sibyllae, a cargo del Coro Samuel Rubio, con un programa que incluye la representación de una tradición propia del primer templo diocesano con la interpretación, por tercer año consecutivo desde que se suspendiera en el año 1581 y se recuperara en el concierto de Navidad del año 2016, del Canto de la Sibila y la Profecía de Isaías. Un «acontecimiento histórico para León desde el punto de vista litúrgico y cultural» que, según el propio Samuel Rubio, canónigo y organista de la Catedral, «se ha de convertir cada 23 de diciembre en un día clave, porque supone recuperar aquel acontecimiento que desde el siglo XI al XVI, sin faltar ni un solo 23 de diciembre, se representaba en la Catedral a bombo y platillo con la participación de todo el pueblo».
A partir de las anotaciones del Códice Número 23 del Archivo Musical de la Catedral, datado en el siglo XIV, el maestro de capilla Samuel Rubio ha transcrito la partitura del Canto de la Sibilia, que el Coro Samuel Rubio interpreta hoy en este recital que se abrirá con el canto gregoriano Veniet dominus (Ant. I Ad Vesp. Dominica III Adventus) y que se cerrará con la pieza también en gregoriano Domine, quando veneris, recuperado del Códice Número 83 del Archivo Musical de la Catedral, en una velada en la que participarán los 35 integrantes del Coro Samuel Rubio con el apoyo de cinco músicos y un organista.

COMO ESTÁ EL PATIO

Un preso mata a golpes a otro a las pocas horas de entrar en la cárcel de Soto del Real


La Guardia Civil traslada a un preso en Soto del Real. JAVIER MARISCAL -
La Guardia Civil traslada a un preso en Soto del Real. JAVIER MARISCAL -
28/12/2018
EFE | MADRID
Un hombre de 28 años que ingresó en la cárcel madrileña de Soto del Real acusado de intento de homicidio a un vigilante privado ha matado de una paliza a otro recluso, de 55 años, que la prisión le había asignado como interno de apoyo para sus primeras horas en el centro penitenciario.
Fuentes penitenciarias indicaron que los hechos se produjeron en torno a las 21.00 horas del miércoles en la cárcel cuando, por causas que se investigan, el presunto homicida, que había ingresado de madrugada en Soto del Real, comenzó una discusión con la víctima, un hombre de 55 años condenado por tráfico de drogas.
Según fuentes cercanas a la investigación, el presunto agresor es J.M.R.H, de nacionalidad española y experto en la disciplina Muay Thai, un arte marcial tailandesa en la que compite y de la que ostenta varios títulos como el de campeón de España en el peso de 67 kilos, según dice el mismo en una página web especializada en este deporte.
Aunque la pelea se inició fuera de la celda, fue en el interior de la misma donde el presunto agresor, experto en artes marciales, le propinó varios golpes, añadieron las fuentes consultadas, que señalaron que los funcionarios encontraron al hombre tendido en el suelo en estado muy grave y alertaron al 112.
Los servicios sanitarios del Summa que acudieron a la prisión comprobaron que la víctima tenía un traumatismo craneoencefálico y golpes faciales. Aunque trataron de reanimarle, el preso falleció antes de llegar al hospital.
Las fuentes consultadas detallaron que el presunto agresor llevaba pocas horas en prisión preventiva por un intento de homicidio tras una trifulca en el metro de Madrid donde se enfrentó e hirió de carácter leve a un pasajero y trató de agredir a un vigilante de seguridad. Estos hechos ocurrieron el pasado domingo en el metro de Legazpi en torno a las ocho de la tarde cuando J.M.R.H hirió a un pasajero con un cuchillo y le robó el móvil.
Según fuentes cercanas a la investigación, en su huida el asaltante llegó a enfrentarse con un vigilante de seguridad del metro que tuvo que refugiarse en una garita ante la agresividad del atacante y sus repetidas amenazas. Ya en la calle, fue detenido por la Policía Nacional, que llegó a encañonarle para que depusiera en su actitud.

UNA IMAGEN VALE MIL PALABRAS

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